Un matrimonio de hielo. H. S(1-Serie Magnates Apasionados)

6: Señor arrogante.

Aquel cerdo arrogante le iba a escuchar se dijo Stella, como había sido capaz de hacerle algo así.

Había recibido una llamada de la agencia donde la habían comunicado que estaba despedida y que debía pasar por recursos humanos para recibir su cheque de liquidación.

Estaba más que segura que aquello había sido obra de Harry Styles.

Ya sabía donde estaba su oficina pues la noche anterior había visto una placa con su nombre en una de las oficinas del último piso.

Como era de esperarse su secretaria intento impedirle el paso alegando que él no recibía visitas al menos que tuviera una cita o si se trataba de una emergencia familiar. La chica estaba tan furiosa que le dijo que ella era su futura esposa y sin decir más entró a la oficina de Harry.

La secretaria al igual que los demás empleados que estaban presentes se habían quedado más que sorprendido pues no podía creer su jefe fuese a casarse y más con una chica como aquella , pues todo el mundo sabía cual era el tipo de mujer que le gustaban a aquel hombre.

-Eres una escoria,¿ quien te crees que eres? ¿ El dueño del mundo ?. ¿Te sientes superior por haber logrado que me echaran de mi trabajo?. Eres un cerdo egoísta-cada palabra fue pronunciada con rabia.

Harry miro al empleado que estaba allí y este salió de inmediato de la oficina. Con cara de asombro.

Avanzo hacia ella y la tomo del brazo con fuerza.

-No te permito que vengas a mi trabajo a dar esta clase de escándalo. Baja la voz y comportarte. Hice lo que tenía que hacer-dijo con arrogancia.

Sus palabras hicieron a Stella sonrojarse aún más de lo que estaba, todo producto de la rabia que sentía.

-Que cinismo el tuyo. Yo no puedo venir aquí a reclamar por tu barbaridades pero tu si puedes ir a mi empleo y hacer que me corran.

-Ya te dije que no es un trabajo para ti, te conseguiré otro-dijo como si nada. Hablaba como un hombre que nunca le había faltado nada,un hombre que lo tenía todo.

-No quiero nada de ti, solo te diré una cosa no permitiré que manipules mi vida a tu antojo,no soy como esas mujeres con las que sales.

Él la miro de arriba así bajo y luego sonrió con frialdad.

-En eso tienes razón querida tu jamas podrás ser como ellas.

Dijo aquellas palabras con la intención de herirla pero no obtuvo el resultado que quería.

-Exacto no soy como ellas y ni quiero serlo. No dejare que manejes mi vida a tu antojo. A ellas podrás darles órdenes como a un perro pero a mi ni se te ocurra. Haré lo que me venga en ganas. Tu no eres nadie para prohibir me nada.

Harry apretó aún más duro su mano y a pesar de que la estaba lastimando ella no dijo nada. Pues no quería mostrarse débil delante de él.

-Seré tu marido, eso era lo tu quería. Hay un dicho que dice, cuidado con lo que deseas.

-Piensa lo que quieras .¿ Piensas soltarme o romperme el brazo?

Él la soltó y al ver las marcas rojas en su brazo debido a su fuerte agarre se sintió avergonzado.

-Me disculpo por eso, no fue mi intención hacerte daño.

-Desde luego, pues el daño físico deja marcas visible y eso no sería bueno para ti. Pero el daño psicológico solo deja cicatrices interiores. No importa que me hayan echado conseguiré otro trabajo.

-Ni se te ocurra, tengo influencias puedo hacer que te corran.

-Si es necesario trabajaré de prostituta es un trabajo libre y no creo que tus Influencias sirvan de mucho en ese caso.