|Caja de cigarros|

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Después del entierro Maggie se notaba distante, y no paraba de llorar. Por un tiempo, cuando era más pequeña, pensaba que las lágrimas se tenían que acabar por deshidratacion o algo parecido, ahora veo que no; o al menos eso me da a entender Maggie.

Algunos no durmieron esa noche, y otros si.
No nos podíamos estancar en la pérdida de Beth, así que íbamos a seguir en busca de un lugar en donde quedarnos.

Esta mañana cuando me levante alcance a ver como Rick, Michonne, Tyreese, Noah y Glenn se alejaban. Le pregunté a mi madre el porqué.

—Fueron a buscar la familia de Noah.

—¿Crees que aún estén con vida?—. Dije mientras veía como ella cargaba a Judith.

Ella me miró por unos segundos.—Claro que si, y espero que Noah este nuevamente con su familia completa, así como nosotros nunca lo pudimos estar con tu padre...

Mamá empezó a acurrucar a Judith ya que ésta empezó a llorar y se fue.

¿Familia completa?, ¿A qué se refería con eso?, estoy de acuerdo que cuando Ed murió la "familia" completa se fue al carajo, pero ella dijo que cuando él estaba con vida.
No es la primera vez que lo hace, antes de todo esto a veces me repetía lo mismo, de una familia completa.

—¡Peletier!—. Sentí como alguien tocaba mi hombro y me sobresalte.

—Idiota—. Sonreí al ver que era Carl.— No me llames Peletier.

—Tranquila, Pele...—. Le di un pellizco leve en su hombro antes de que termira su oración.— Vale, lo eh entendido. ¿Qué hacías parada aquí viendo al suelo?

—Tú mismo lo acabas de decir—. Deje escapar una pequeña risa que se contagio inmediatamente a él.

—Encontre algo detrás de esos árboles—. Soltó Carl de golpe.

—¿Qué cosa?—. Le pregunté.

—Sólo sígueme—. Carl tomó mi mano y me guío atrás de los árboles que había mencionado. Esperaba que hubiera encontrado un río, pero no, lo que encontró fueron unos tres gatos.

Uno café, y dos blancos, pero uno de ellos tenia manchas negras.

—¿Eso es lo que encontraste?—. Levante una ceja mirando los gatos.

—Si, dijiste que eran tus favoritos ¿No?

—Si pero yo creí que era algo más importante...—. Mire hacia abajo, y uno se estaba enredando en mis pies.
Lo levante, era el de las manchas negras. Lo mire fijamente a sus ojos color verdes. Genial, igual que los míos.

-Lastima que no vayan a sobrevivir por mucho, son débiles.

Deje caer a el gato de golpe.

—¿Estas bien?—. Preguntó Carl mientras veíamos como se alejaban los gatos asustados.

—Si—. Mire a los lados buscando algo para olvidar a los gatos.—Mira, una mochila.

Fui hacia ella y empecé a revisarla. Un par de cuchillos, agua, comida para gato... Un encendedor y una caja de cigarrillos.

—¿Qué hay adentro?—. Carl me miraba atento.

Tome el encendedor y los cigarros, guardadolos en la bolsa de mi sudadera.

—Armas y agua, pero muy poca—. Tome la botella, tenía solo la mitad llena y tome un poco.

—¿No deberíamos guardar a los demás?, ¿No crees que es egoísta?

—No, no es tan egoísta, el agua es poca, así que aprovechala Carl—. Le lance la botella y se quedó mirándola para después tomársela por completo.

Carla Peletier #RiggersAwards2018Where stories live. Discover now