Silencios

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Las semanas trascurrían y ya por fin estaba cerca el comienzo a clases. Claro que mi emoción no era por ver clases o a mis compañeros. Solo quería verlo a el y volver a nuestros buenos momentos de meses atrás, En ese entonces nunca me pregunte, si el quería lo mismo o si me quería igual. Pense solo en lo que yo sentía, lo cual era intenso. Pero a medida de que fue pasando el tiempo de que fui creciendo, fui obteniendo respuestas. 

Pensaba que nuestra relación comenzó mal, o mejor dicho, yo comenze mal con el, no sabia como funcionaban la relaciones así que la cagaba a diario, y quería compensarselo, quería dejar el orgullo o la pena con el, quería enamorarlo,  quería que sintiera que realmente tenia una novia. 

-Comenzaron las clases-

Volví a mi rutina, estaba en 2do año, me sentía emocionada. Solo copie mi horario, las profesoras hicieron la típica presentación de niñitos de kinder, me irritaba. Regrese a mi casa temprano, no vi a Alex ese día, solo cuando cantábamos el himno.

-Le escribi-

-Hola amor -Yo no era muy melosa, pero intentaba darle un poco de interes-

-Hola kathe.

-Como estas eh ? que tal ese regreso a clases.

-Bien y bueno, normal, ya estoy en 5to año, ya no me es emocionante. Los mismo profesores, los mismos compañeros, los mismo pasillos .. 

-Hmm bueno, solo yo me emociono, claro yo estoy en 2do, tu pasaste por eso hace rato- Recordar que eramos de etapas muy diferentes, me deprimía, era tedioso contarle cosas por las que el ya había pasado, era solo una niñita de 2do-. 

-Yo también me emocionaba, tranquila, es normal. 

Hablamos por horas, hasta que nos ganaba el sueño, o mi mama me encontraba bajos las sabanas, escribiéndole y me regañaba. Era otra de las cosas que el no sabia, me ganaba tantos regaños a diario, todo por querer hablar con el.

Diariamente me despertaba a la 4 am, para revisar los mensajes que el me dejaba, ya que mi señal era sumamente mala y me llegaban algunos mensajes tarde. Mantener mi relación con el, fue complicado, el no lo sabia, pero hacia mucho. Mis padres revisaban mi teléfono y debía borrar mensajes a diario a la hora que fuera. A veces sospechaban cosas y debía aguantar regaños. No tenia moral para decir nada, porque era mi novio, pero no hacia nada incorrecto. 

Las cosas entre nosotros fueron mejorando, verlo a diario me era satisfactorio, uno que otro día, nos sentábamos en los pasillos, el solo me abrazaba y me contaba una que otra cosa. A veces nos quedábamos en silencio, pero eran silencios cómodos, me quedaba jugando con su mano, o viendo lo bonito que se veía nuestros dedos unidos. 

Cuando estaba en clases pasaba por su salón y lo miraba a el, con sus manos sujetando su mentón, concentrado supuestamente en la clase, o cuando se pasaba su mano por su hermosa cabellera negra. Ese cabello liso que me encantaba peinar.

Aunque peleábamos mucho, por una u otra cosa, era feliz con el,  y lo mas importante con el me era suficiente, no quería nadie mas. Confiaba plenamente en el, era un buen chico y yo lo sabia. Era mi chico. 




Todo Comenzo Con Una Solicitud De Amistad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora