La tercera Jenner

45(Bugatti)

Septiembre

Como pasa el tiempo de rápido..

En estos últimos meses tratamos de aclarar y arreglar las cosas con Cameron, me dijo que se ha dado la oportunidad con otras chicas y me ha parecido muy bien, al igual que yo sigo muy bien con corentin.

Cameron y yo, decidimos continuar como amigos...

-hola scott! Dije cuando scott disick abrió la puerta de su casa.

-hey! hola! Que sorprendente es verte de nuevo! Dijo dándome un fraternal abrazo. -sigue.

-gracias, hey, todo está muy lindo. 

-gracias, decidí remodelar algunos cuartos y por supuesto las estanterías de la cocina, bien, Kattyn Jenner, te conozco lo suficiente para deducir que  vienes por hacer una simple visita, ¿ necesitas algo? 

-oh, bien, me atrapaste, necesito un pequeño favor. Dije haciendo cara de perrito.

-¿qué necesitas?

En su casa hay una pequeña ventana que se dirige a su cochera.

Señalé su cochera.

-¿qué? Jajaja estás loca nena, ¿mi bugatti? Jajaja

-oh vamos! Por favor! 

-olvídalo kat, hasta hace poco obtuviste tu licencia de conducir! 

-pero en serio! Lo cuidaré! 

Después de demasiadas (en serio, muy extensas) súplicas scott me lo prestó, con la única y simple condición de cuidarlo.

A Cameron le encantará este grandioso regalo.

Septiembre 8

Mi outfit fue el siguiente 

Algo simple.

 Decidí llamar a Cameron y preguntarle si este día podría pasar, fue muy amable y dijo que si

[...]

Toqué la puerta de Cameron.

-hola kat. Me saludó con un beso en la mejilla.

-hola, Feliz cumpleaños!  y por eso te tengo una sorpresa.

-oh, ¿qué es?

-Cameron, si te digo dejará de ser sorpresa, mejor acompáñame.

Bajamos por el elevador hasta el sótano.

-no comprendo, que sucede?

Abrí mi bolso y saqué unas llaves bugatti y oprimí el botón, produciendo que el auto sonara y que Cameron abriera grandemente sus ojos.

-estás bromeando Kattyn Jenner.

-todo tu yo por un día. Dije dejando las llaves en su mano.

El dio saltos como niño pequeño hasta el auto.

-no puedo creerlo. Dijo mirado el auto por dentro ya en el asiento.

Yo me senté en el puesto de copiloto

Salimos de las residencias y Cameron cada vez hacía sentir el motor de aquel auto, hasta que estábamos lejos de la ciudad, un hermoso Porsche negro matte, hizo sonar su motor, sinónimo de carrera, Cameron repitió su acto.

-cameron, evitemos correr demasiado, puede llegar algún policía.

-no te preocupes. 

Después de decir eso, el semáforo cambió y ambos carros corrieron a toda velocidad.

-Cameron, por favor, para. Pero él hacía caso omiso a mis palabras.

Y si,  unas calles después una patrulla de policía pidió que nos estacionáramos.

-papeles. Dijo el oficial que se acercó a nuestro auto.

-tijeras, okay no, disculpe oficial. Dijo Cameron dejando los papeles del auto, su tarjeta de conducir en manos del policía.

-usted es consciente de que iba a una velocidad no apropiada? Como consecuencia podía suceder un grave accidente? No sólo la de su acompañante y usted, si no la vida de demás personas también estaría en riesgo por sus faltas! 

-no era para tanto señor oficial, las personas no circulan mucho por esta zona.

-  su multa será por exceso de velocidad y tendrán un valor de 361 dólares. Dijo el policía entregando un papel a Cameron.

Oh por Dios, lo primero que scott me dijo.

Devuelta ninguno hizo el más mínimo murmullo, hasta que él decidió romper el hielo.

-como obtuviste este auto?

-scott me lo prestó, con la condición que lo cuidara.

-oh, disculpa, yo me encargo de pagar la multa.

-no te preocupes Cameron, puedo pagarla.

-kat, fue mi error, insisto, voy a darte el dinero.

-bien.

[...]

Llegamos a el apartamento de Cameron, él consignó en mi tarjeta del banco aquella cantidad.

-creo que no fue el mejor cumpleaños del mundo, te debí dar un regalo menos sustentoso. Dije sonriendo.

-no te preocupes, me has dado muchos maravillosos regalos a medida de este año, no hablo de los materiales...

Sonreí tímida

-kat, debo irme unos amigos me esperan para celebrar mi cumpleaños.

-oh, por supuesto, igualmente, ahm..yo también tengo cosas que hacer jeje. 

-bien, fue un gusto verte. Dijo Cameron, me abrazó  y besó en la mejilla. Es extraño como antes durábamos horas en despedirnos y demasiados besos dentro de esas horas, y que ahora, sea una simple despedida, en donde imaginamos que no sucedió nada en un pasado.

-igualmente.

Decidí llevarme el auto a casa, un día de estos se lo devolveré a scott 

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