El último día llegó, nada podría salir mal, pues yo me propuse con ello.
Pero, ¿Por qué esta inquietud aqueja con fugaces pensamientos?No importa ya, después de todo lo que deba suceder, sucederá; el día de hoy me haré con el pútrido corazón escarlata, aquel que ostenta la más flamante llama. O por lo menos es lo que yo esperaba.
La fatiga y el dolor quemaron el jardín violeta, no hubo suelo que retuviera el arder del rencor y en el centro, la sangre ahogaba los pensamientos de aquel que, alguna vez, ocupó el máximo peldaño de la monarquía, el susodicho rey.
Un segundo tarde llegué yo, eso sucedió; fue necesario hacer lo que se debía, después de todo nadie más lo intentaría, ofrecí algo con un valor más allá del alma misma, el tiempo estancado se quedó y junto a él, un suceso más impactante para el espectador, del cual yo, no he de arrepentirme.
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¿Arrepentirse? ¡Jamás!
Short StoryEsto no es un relato, ni una novela; no crean que será feliz o triste, no esperen identificarse o quizás si, siempre y cuando tampoco se arrepientan de nada en esta vida. No espero que lo aprecien, ni que lo vean como yo lo veo; solo espero que al l...
