Psychosis

Capítulo 6 (Good End)

Advertencia: Contenido para mayores de 18. :v

Desde aquél día en el puente, Osamu y Atsushi no se despegaban el uno del otro. Siempre juntos, todo juntos. ¿Quién diría, que lo único que Dazai necesitaba era un alma tan pura que le acompañara el resto de sus días? Tanto el castaño como el albino, sonreían ante sus problemas, porque solos eran víctimas de sus demonios, pero juntos los vencían con un dulce beso, o una tierna mirada.

Dos amantes románticos empedernidos. En la agencia era algo de esperarse, a pesar de que su relación causaba algunos estragos, ambos estaban mejor que nunca. Doppo miraba con horror cada día que tomaban su comida. El par derrochaba miel, compartían sus alimentos con melosas palabras, y risas tontas, por lo menos son felices, siempre se decía. La salida era igual, ambos partían a casa, tomándose de las manos.

-Dazai-san, mañana cumpliremos un años de novios. -dijo el albino entusiasmado.

-Sí, lo sé. Planeaba hacer algo especial. -comentó el castaño, aumentando la emoción del albino.

- ¿Qué cosa? -quiso saber.

-Es una sorpresa, Atsushi-kun~ -le recordó, picando su mejilla.

El albino hizo un puchero, señalando su falso enfado. Osamu rió, besó su mejilla y continuaron su camino a casa. Siguieron su rutina, comer, bañarse, ver televisión un momento, luego ir a la cama, pero terminaron por elegir una opción distinta.

Sus labios se buscaban entre ellos, sus cuerpos calientes, deseosos por sentir la piel del otro en suaves caricias. Jadeos y gemidos rompían el silencio de la habitación.

- ¿Estás seguro? -preguntó por milésima vez en ese momento.

-Dazai-san, estoy listo. -, besó sus labios para dar seguridad a sus palabras. El castaño sonrió, Nakajima no tenía remedio.

-Vale, entonces lo haré. -

El albino se aferró a las mantas de su cama. Contuvo la respiración por un momento, mientras su cuerpo se acostumbraba a Osamu. Sus caderas se relajaron, señal para el castaño. Comenzó a embestir lento, aumentando la fricción gradualmente. Ambos gimiendo del placer. Enterrando su pasado con su amor y felicidad, convirtiéndolo en poco menos que un mal sueño.

Dejando sus cuerpos ser guiados por el éxtasis de un orgasmo. Dazai masturba el miembro de Atsushi, forzándolo a gemir su nombre. Sus cuerpos se contrajeron, liberando sus orgasmos. Respiraban agitados, pero sus labios volvieron a unirse. Ya no podían estar separados.

A la mañana siguiente, Nakajima fue despertado por un singular aroma, Chazuke, su comida favorita. Osamu dio los buenos días al menor con un beso, sirvió los platos en el pequeño comedor, y se sentaron a comer.

- ¡Está delicioso! -dijo luego de tragar la última cucharada.

-Me alegra que te guste. -, tomó los platos de ambos y los dejó en el lavavajillas. -Avisé a la Agencia que nos tomaríamos el día de hoy. -, sonrió. -Ve y arréglate, hoy daremos un paseo por la ciudad. -explicó.

El albino obedeció, y pronto se arregló. Juntos caminaron hasta el parque de diversiones. Probaron cada uno de los juegos, y comieron cada una de las golosinas que vendían. Se divirtieron. Al atardecer, el castaño guió a Nakajima hacia un familiar puente. Atsushi comenzaba a dudar sobre seguir a Osamu, pero continuó hasta que se detuvieron.

-Atsushi-kun, -comenzó. -Hoy hace un año comenzamos a salir. -, respiró. -Y hoy, en este mismo lugar, quiero pedirte una cosa. -, se arrodillo ante el albino, y de su bolsillo sacó un anillo. - ¿Te casarías conmigo? -Los ojos del menor se llenaron de lágrimas, y por más que intentó contenerlas, no lo logró.

-Sí. -sollozó arrojándose a los brazos de su amado. Sus labios sellaron una promesa de compromiso y amor eterno. Dazai y Nakajima, vivieron felices por siempre.

~Fin~

Nota: Gracias por acompañarme a lo largo de esta historia, gracias por su apoyo, y por leer mis loqueras :9 Agradezcan a Mike! Él es el responsable de que esta historia fuera creada xd Mike \:)/ tu regalo :D
Pd: Nos leemos en otra historia~