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¿Por qué no puedo recordar nada de aquella noche?, ¿Qué pasó exactamente?...

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— ¿Problemas con encontrar tu salón Ruiz?, —me burle al ver que Ángel llevaba consigo una de las tantas hojas llamadas horarios y en ellos venía cada clase.

Él miraba de arriba a abajo lo que sería su nueva instalación la preparatoria durante sus dos años de vida.

— Oh, vamos, ¿Qué clase tienes? —volví a insistir. El me miro por un momento y dudando algunos segundos, por principio del día me pregunte. ¿Qué fue lo qué pasó por su mente en ese instante?

— Calculo, —retiro la hoja de mi vista y se quedó por un momento en silencio. Él estaba actuando raro.

— ¿Qué es lo que tienes?, — pregunte impaciente.
Me estaba desesperando. Olvide por completo el tiempo, no recordé la noción ni mucho menos la hora en la que íbamos a entrar.

— Hay algo raro en ti. —hablo seriamente. Sus ojos trataron de ver más allá de mi mente y reparar el rompecabezas hecho en mi subconsciente.

— ¿Raro?, ¿Por qué lo dices?, ¿Hay algo qué he hecho mal?, — lo llene de varias preguntas ya sean coherentes no o no para el solo quería una respuesta.

— Te he notado algo raro, una presencia. —lo que había dicho Ángel lo dijo demasiado serio. Yo me quede callada y solo se escuchaba el eco de los pasos de los demás estudiantes que pasaban alrededor nuestro.

Lo mire confundida, esperando no tener algún indicio de nerviosismo o incomodidad al respecto.

Me burle, empecé a carcajear en nerviosismo de lo que iba a pasar después de esto. Pero ¿Qué más podía hacer?

— ¿El camino de Paris hacía acá te corto algún circuito? —aún seguía riendo cuando hablaba mi risa no acabo a no ser porque la mirada severa de Ángel no me quitaba la vista de encima.

Tuve que toser falsa mente y bajar la mirada y decir que lo sentía.

— ¿Por qué dices eso?, ¿Cómo qué una presencia?, — trate, trate de verme seria y no estar nerviosa al decir esa pregunta, pero, creo que no lo sé ocultar bien.

— No sé como explicarlo. Es extraño. Es como si se tratase de alguna entidad paranormal.

Okey, esto ya me estaba asustando, creo que la carrera que Ángel quiere estudiar si le sienta bien.

— Okey, Okey, primer lugar, ¿Por qué dices eso si apenas y llegaste ayer no he pasado ni un día completo contigo. Segundo, la poca probabilidad de qué una presencia paranormal este aquí conmigo ahora en este insípido momento, es meramente utópico.

Ángel entre cerro las cejas y se fijó mi viste por encima mío, lo pensó por un momento y tomo solo un segundo para llegar a una única conclusión.

— Fácil. Te conozco Noah y sé que si alguna entidad paranormal estuviera aquí contigo en este momento, tú nos lo ocultarías, tú dirías qué no te creeríamos, tú dirías qué esto es mera mente utópico ya qué es susceptible a la realidad en la que nosotros existimos y que haya o no una entidad aquí eso sería demasiado irreal como para poder creerlo sin pruebas subjetivas.

Tú, ¿Un Fantasma? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora