No te gusto. No me gustas.

cap 20

Agradezco que mi hermano no esté en casa, porque así podré pensar mejor en lo que ha pasado hoy. Entro a mi cuarto dejando mi mochila al lado de la cama y me tumbo en ella mirando hacia el techo. Inspiro y suspiro varias veces hasta que me relajo y pienso con claridad. "Deberías olvidarte de él" "Es él quien te ha dejado" Lo único en lo que puedo pensar es en lo que me ha dicho Jackson en su coche. Por mucho que me duela admitirlo, se que lo que ha dicho es verdad. Por eso he perdido los nervios y me he enfadado tanto con él. Sabía que lo que decía era cierto, pero no quería que fuese así. No quería admitir que Bryan es quien ha decidido hacer todo esto. Que Bryan ha decidido hacerme daño. Me paso las manos por la cara con un intento de relajarme y me incorporo. Él no merece mis lágrimas. Bryan me ha perdido.

Decidida, abro la mochila, saco el teléfono y marco el número de Jackson. Espero a que me coja, pero la llamada finaliza. Vuelvo a intentarlo y, después de unos segundos, me coge.

—¿Si?—dice con voz firme.

—Soy Eli. Solo quería pedirte perdón por haberme... comportado así antes. Solo estaba...

—No hace falta que te disculpes—me interrumpe—Me alegra que hayas pensado en lo que te he dicho.

Cuando lo recuerdo, trago saliva y me muevo inquieta.

—Gracias—le digo, aún que no sé muy bien porque.

Después de unos segundos de silencio, me pregunta algo que me pilla totalmente por sorpresa.

—¿Tienes planes más tarde?

No se cuales son sus intenciones ni si está tratando de ligar conmigo, pero yo no necesito nada de eso ahora mismo. Y él tiene que saberlo.

—Jackson, yo...

—No es lo que piensas, solo intento que seamos amigos. Se lo mucho que necesitas un poco de compañía ahora mismo—me creo todas sus palabras—Pero tú decides.

—Está bien—acepto. Tiene razón. Si paso el tiempo solo, solo conseguiré estar peor.

Oigo su risa detrás del teléfono.

—Te recojo a las 7.

Y dicho esto, me cuelga el teléfono sin permitirme ni siquiera despedirme de él.

Son casi las 7 y, puesto que no tengo ni idea de cuál es su plan, me he preparado un poco por si decide salir fuera a dar una vuelta. Le espero sentada en el sofá, y mi pierna se mueve nerviosa de arriba a abajo.

—¿A quien esperas?—me dice Alex mientras mira algo en su ordenador que parece bastante interesante.

Me doy la vuelta para mirarle.

—Un amigo.

Entonces, levanta la vista del ordenador y entrecierra los ojos. Yo suspiro y me doy la vuelta, no me puedo creer que piense que ya estoy con otro chico.

—Solo es un amigo. Se ha ofrecido a pasar el tiempo conmigo.

Justo cuando digo eso, un claxon suena fuera de casa y me levanto rápidamente. Corro hasta la ventana y cuando me doy cuenta de quien está fuera me despido de mi hermano y salgo por la puerta de casa.

—¡Te aviso cuando vuelva!—le grito a Alex una vez fuera de casa.

Camino hasta el coche y, al ver que Jackson no se baja de ese, abro la puerta del copiloto y me acomodo en el asiento. Me sonríe y le devuelvo la sonrisa.