Harry Potter y la travesía hacia el futuro.

8. ¿Y ahora que hacemos?

N/A: Los nombres de los adultos serán escritos así y el de los adolescentes así.

***

Harry, Hermione, Ron, Luna, Ginny y Neville adultos estaban en el despacho de la directora McGonagall discutiendo sobre cómo harían para arreglar aquel giratiempos.

—Yo creo qué hay que darles uno nuevo, Hermione. -opinó Harry-. Eres la ministra de magia, puedes conseguir lo que quieras.

—Harry sabes que no tenemos más giratiempos, no hay muchas opciones. Habría que buscar alguna solución. -comentó Hermione-. Además, el gira tiempos que se ha roto yo lo tengo, en una pieza. Hay que arreglarlo.

—Vamos, Hermione, no sabemos arreglar gira tiempos. Nadie de nuestra época... -dijo Ginny, quien estaba al lado de su esposo.

—Excepto que... -empezó a decir Ron.

— ¿Excepto qué, Ronald? -preguntó Luna, curiosa.

—Que hablemos con Delphi Riddle. -terminó de decir el pelirrojo.

Todos lo miraron y Harry negó con la cabeza.

—No, Ron. -dijo Harry-. No podemos ir a ver a la hija de Voldemort para hablar sobregira tiempos. Luego de lo que le ha hecho pasar a Al...

Ginny miró a su hermano entre furiosa y dándole la razón. Harry y Albus habían tenido una relación bastante complicada desde que él había sido elegido para Slytherin, siendo muy diferente a su padre. Luego de lo del año anterior y la pelea contra Delphi Riddle, ella prefería que nadie se acerque a aquella chica. Pero Ron tenía razón, ella era probablemente la que más sabía sobre gira tiempos, ya que nadie se había acercado o entrado en el Departamento de Misterios desde la batalla del ED contra los mortífagos en 1995.

—De acuerdo. -dijo Ginny-. Yo iré a hablar con Delphi Riddle.

Harry negó rápidamente con la cabeza y le tomó la mano.

—Ni aunque me haya tomado cien botellas de cerveza de manteca te dejaría ir sola a hablar con esa chica. -la contradijo Harry.

—Es por eso que Ron irá conmigo. -dijo Ginny-. En algún momento el fue un gran auror. Además, Harry, tu eres el jefe de aurores, me puedes destinar uno o dos más como protección, los que más confíes si quieres.

Harry suspiró hondo y lo meditó unos minutos.

—Bien. -dijo finalmente-. Pero será mañana por la mañana, ya es tarde.

Ginny le sonrió y luego miró a la profesora McGonagall.

—Agradecemos que nos hayas avisado todo esto, Minerva. -le sonrió a su ex profesora.

—Siempre es un placer, señorita Weasley. -contestó la mujer, asintiendo.

Luego de que todos se despidan, se fueron mediante los polvos flu cada uno a su casa.

***

Mientras tanto en la sala común de Gryffindor...

—Esto es una locura. -decía cada dos por tres Neville, mientras daba vueltas alrededor de unos sillones-. No puedo creer que estemos en el futuro... ¡Y yo soy profesor de Hogwarts!

—Si... si, Neville. -dijo Hermione, suspirando-. Felicitaciones, pero ahora tenemos cosas más importantes que discutir.

Estaban los seis en la sala común de Gryffindor, solos, ya que sus futuros hijos se habían ido a dormir. Ron, Harry y Hermione estaban sentados en el rincón donde se sentaban siempre. Mientras que Ginny estaba sentada a los pies de Harry, apoyando su espalda en las piernas del mismo y Luna estaba observando atenta la sala común de Gryffindor.

—Nunca había estado en otra sala común. -dijo la chica-. Es extraño... pero es bella.

— ¿Como haremos para ir a clases mañana? -preguntó Hermione, sin darle importancia a lo que la rubia había dicho-. Digo, no podemos aparecer así, somos muy parecidos a nuestros Nosotros de esta época, nos reconocerán al instante.

— ¿Y si directamente no vamos a clases? -preguntó Ron, esperanzado-. Es decir... ¡Estamos en el futuro! ¿Por qué deberíamos ir a clases si para eso lo podemos hacer en nuestra época?

— ¡Yo no perderé clases sólo porque tu hayas roto un gira tiempos, Ron! -exclamó Hermione, molesta-. Además, sería genial ver cómo se les enseña a los chicos en el futuro.

—Hermione tiene razón... -dijo Ginny-. Tenemos que ir a clases, prefiero tener clases en el futuro que en nuestro presente con Umbridge y Snape.

Todos apoyaron lo dicho por la pelirroja, excepto por Ron.

—No puedo creer que estés diciendo que si a esto, Harry. -dijo Ron, indignado-. Ahora que mi hermana va a ser tu futura esposa la apoyas en todo. Me siento traicionado.

Harry se rió y luego miró a su mejor amigo.

—No me extrañaría que en el futuro tú hagas caso a mucho de lo que dice Hermione sólo porque es tu esposa, Ron. -dijo Harry, riendo-. Así que, no puedes reclamarme nada.

Ron miró a su mejor amigo, escrutándole con la mirada y luego asintió.

—Es probable que tengas mucha razón, Harry. -admitió el pelirrojo, encogiéndose de hombros.

—Volviendo a ese tema... ¿como haremos? -preguntó Hermione-. Saben que no podemos ser vistos, más de lo que hemos sido.

—Si, Hermione. -dijo Ron-. Pero no es que poseamos calderos llenos de poción multijugos. En ese caso tardaríamos mucho para realizarla. Ya sabes... cómo en segundo año cuando...

— ¡Ron! ¡Cállate! -exclamó la chica, y luego señaló con la cabeza a Ginny, Neville y Luna.

Ron hizo una mueca, pero Ginny no era tonta, quería descubrir que había pasado en segundo año.

— ¿Qué hicieron en segundo año, Harry? -preguntó la chica, tomándole la mano a Harry.

—Gin... no te puedo decir, nadie lo sabe. -dijo el chico-. Ni siquiera Dumbledore.

Ginny frunció los labios: si Harry no se lo decía, dudaba que se lo diga alguno de los otros dos.

—Y bueno, Ron, por primera vez en mi vida diré esto. -dijo Hermione-. Tienes razón. No podemos usar poción multijugos. Así que si no tenemos forma de disfrazarnos, supongo que tendremos que ser lo más precavidos posibles. -advirtió la chica-. No tenemos que llamar la atención.

Pero lo que ella no sabía, era que por primera vez en mucho tiempo, estaba equivocada. Era casi imposible que Ron o Harry llamen la atención, y no porque ellos lo decidan.

*** Mientras tanto en la habitación de Scorpius y Albus...

— ¿Scorp? -preguntó Albus, quien estaba recostado en su cama, con un brazo debajo de la cabeza y mirando el techo.

— ¿Si, Al? -contestó Scorpius, quien estaba mirando algo en una libreta.

— ¿Crees que este viaje al futuro cambie algo, como cambió cuando nosotros viajamos al pasado? -preguntó el chico.

Por más que él no lo quiera admitir a nadie, le había agarrado un poco de miedo a los viajes en el tiempo. Pero... ¿a quien no le pasaría si hubiese vivido todo lo que él?

—Creo que ya lo hubiésemos notado, Al. -le contestó Malfoy.

—No, Scorp. -lo corrigió Albus Potter-. Recuerda que solo los viajeros notan los cambios. Eso nos pasó a nosotros...

Ambos chicos se miraron, un poco con expectación y otro poco con miedo.

—Bueno. -dijo Scorpius-. Si ha cambiado algo, no lo sé. Pero me alegro que al menos no haya cambiado nuestra amistad.

Albus le sonrió a su mejor amigo y pensó "¿Qué había hecho él para conseguir semejante amigo de oro?"

—Gracias, Scorp. -le dijo Albus-. Por todo.

El rubio le sonrió y luego de eso, Albus se durmió.

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Capítulo editado el 07/03/2019.