GIVE ME HATE AND ALL YOUR LOVE (Nathan Sykes)

Capítulo 28. "Libérate"

Los pelos se me pusieron de punta, volteé ligeramente y lo vi, su carita tierna estaba viéndome, me quedé ahí, paralizada, los ojos se me llenaron de lágrimas, abrí la boca, me había quedado sin palabras.

__________- Volvió a decir

Ingresé a la habitación

- ¿Por qué lloras?
-Estaba preocupada por ti - contesté sollozando.

Nathan me mostró una sonrisa pícara, me quería abalanzar sobre él, llenarlo de besos.

-Tengo que irme.
-¿A qué has venido?

Seguí caminando hacía la puerta.

Quería gritarle lo que sentía, estaba segura que no era el momento ni lugar, pero estaba sensible, ya no me importaba lo que había sucedido entre nosotros, sólo quería tenerlo conmigo.

Antes de cerrar la puerta susurre:

-Te quiero Nathan.

No dejé que respondiera y cerré.

Salí por los pasillos, rota, no sabía que sucedía, después de todo me doblegué a mis sentimientos. Quería a Nathan, y mucho.

Al día siguiente en la escuela no se hablaba nada más de Nathan y Kaila.

Me dirigí a la cafetería, ahí estaban Kenzie y unos chicos de la clase de historia.

-Te ves terrible- dijo Kenzie
-No dormí bien.

Me limitaba a contestar o iniciar una conversación, no estaba bien, solo quería encontrarme a mí misma, lograr entender todo lo que estaba ocurriendo, poner en orden la cabeza y el corazón. Mientras todos a mi alrededor no dejaban de hablar de asuntos que realmente no eran de mi interés, tomé mis cosas y salí.

-¡Hey!, ¿a dónde vas?- gritó Kenzie

-Necesito aire.

Empecé a recorrer los pasillos, podía sentir toda la tensión que se expedía, finalmente llegué a la puerta principal de la escuela y el fresco aire de la tarde pegó en mi cara y sentí un pequeño alivio. Me hice una coleta alta y tomé el camino de la salida del estacionamiento, mientras que mi  celular lo activé en modo avión, coloque mis audífonos y reproduje el playlist más triste que tenía, y caminé, y caminé, hasta dejar atrás todos los problemas.

Después de haber regresado a la escuela y aclarar todo el enredo que había en mi cabeza, entré a la última clase. Y de repente mi celular empezó a sonar descontroladamente, y sí, eran miles de mensajes de Kenzie.

*¿Todo está bien, Donde estas? *

*¿Te encuentras bien? *

*Te estas perdiendo clase *

*Oye ya me has preocupado*

*Pliss, respóndeme!!*

*____. ¿¡Donde te has metido!?*

-Señorita Kalani, apague ese aparato, -gritó el profesor

Solo alcance a responder:

*Todo bien, te veo en la salida 😊*

Sonó la última campana que indicaba el inicio del fin de semana. Todos los estudiantes llenaban los pasillos de la escuela y no alcanzaba a ubicar a Kenzie, así que decidí esperar en el corredor del estacionamiento, mientras intentaba acomodar todo el desastre que llevaba en mi bolsa. Una voz hizo que pegara un salto

-Por Dios Alex, me has asustado. 

-Tranquila ____, -mientras se carcajeaba.

-Hola, -dije, mientras intentaba controlar la respiración.

-Hola, oye, que harás mañana, me gustaría invitarte a salir... como amigos.

Realmente apreciaba que Alex aceptara la distancia que había pedido. Solo amigos.

-Oh Alex, me encantaría, pero mmm, ya tengo planes- dije lamentándome.

-Si no quieres, solo dilo. - hizo un mueca de desagrado y se retiró.

Pero realmente ya tenía planes, duros y difíciles planes. 

- ¿Que la pasa a ese chico? - dijo confundida Kenzie

-Se enfado porque le dije que no podía salir con él. Como amigos, - recalqué

-Perfecto, porque mañana será tarde de chicas, has estado muy estresada y te mereces un día de relax.

-Emmh, Kenzie, tampoco podré salir contigo, quede con mis padres de ir a un evento. - mentí

- ¿Un aburrido evento? En lugar de ir con tu amiga -. me vio confundida

-Kenzie, lo siento, pues ya había aceptado la cita de mis papás

-No te preocupes, será a la próxima. – se despidió y se marchó

Subí a mi coche y conduje hasta mi hogar, al pasar por casa de Nathan todas las luces estaban apagadas, una chispa de tristeza se hizo presente, recordarlo allí en el hospital lleno de golpes, me dolía, y yo no podía hacer nada, pero si podía estar ahí para él y para mí, para liberarme.

Hola, cuanto tiempo, realmente mucho, pero he vuelto, y espero que disfruten los próximos capítulos, gracias por sus vistas y dejen sus comentarios si quieren que continué .

Daniela.