(THE FLASH) Ya no seré una niña 1#

15.-Pesadillas

Narra Oliver

Estoy durmiendo en el sofá-cama de la habitación que hay junto a la enfermería, cuando oigo un grito y me despierto sobresaltado. Salgo corriendo de la habitación para ver a Rachel dando vueltas en la camilla, empapada de sudor.

-Rach. Ey, Rach.- la despierto, y abre los ojos sobresaltada- Tranquila, solo era una pesadilla.- La abrazo y ella esconde la cabeza en mi pecho respirando de forma entrecortada.- Ssh... Tranquila, estoy aquí.

-Gracias- susurra, de forma a penas audible.

-¿Por qué?- le pregunto confuso sin entender.

-Por haberte quedado conmigo. Podrías haberte ido, pero has preferido cuidar de mí.- dice bajando la mirada.

-Ey- le digo levantando su barbilla para que me mire a los ojos- Eras una de las personas más importantes que tenía en mi vida. Y cuando me enteré de tu muerte... no pude hacer otra cosa que culparme. No hacía otra cosa que pensar que seguirías conmigo si no te hubiese dejado ir sola al bosque esa noche.-hago una pausa y seco una lágrima que cae por su mejilla- Una vez te prometí que cuidaria de ti y que siempre te protegería, y no puede cumplir esa promesa. Pero ahora tengo una segunda oportunidad y pienso cumplir esa promesa.- veo caer otras dos lágrimas de sus enormes ojos castaños y vuelvo a retirarlas, justo antes de que Rachel se abalance sobre mi para abrazarme.

-Tu también fuiste una de las personas más importantes de mi vida, Ollie. Eras... eras como mi hermano mayor. Y por eso hice lo que hice... para protegerte...- nuevas lágrimas caen por sus mejillas, pero ésta vez ella es más rápida y las retira nada más salir.

-Ya habrá tiempo de explicaciones mañana. Ahora es hora de dormir- le respondo intentando hacer que descanse.

-Ojalá fuera tan sencillo... Pero cada vez que consigo dormirme tengo la misma pesadilla una y otra vez- otra lágrima amenaza con salir, pero Rachel la retiene y no llega a caer.

-Tranquila...-vuelvo a abrazarla colocando su cabeza en mi pecho y dejándole un beso en la coronilla. Debe ser una pesadilla realmente horrible, no puedo ni imaginar lo que estará pasando.

-¿Puedo dormir contigo?- pregunta en un susurro.

-Eso ni se pregunta- cojo en brazos su pequeño y menudo cuerpo pasando un brazo bajo su espalda y otro bajo sus rodillas. La dejo en el sofá-cama, y nada más tumbarme a su lado, me abraza.

-Buenas noches, Ollie- susurra.

-Buenas noches, hermanita-le respondo y le dejo un beso en la coronilla.
Quince minutos después, Rachel se ha dormido y no parece repetirse su pesadilla, cosa que me reconforta. Ella no merece sufrir noche tras noche, no tan pequeña, no así. Porque se que Rachel nunca llorará o se doblará ante el sufrimiento físico, pero el sufimiento psicológico es algo que no soporto ver como la destroza desde dentro.
Diez minutos más tarde, siguo sin poder conciliar el sueño, pero prefiero no moverme por si despierto a Rachel, por lo que permanezco abrazandola tal como se ha dormido ella. Esa situación me trae un recuerdo de hace diez años.

Hace 10 años...

Rachel y sus padres han venido a comer y a pasar la tarde. Como Tom (mi mejor amigo) ha venido también, estoy con él viendo una película en el salón. Le he dicho a Rachel que si queria verla con nosotros, pero ha preferido ir a dar un paseo por el bosque. Creo que no le cae bien Tom. Se que a veces puede ser insufrible, pero hay que conocerlo mejor.

-Esta ya me la he visto-dice Tom al empezar la película- Al final resulta que fue su hermano quien había puesto la bomba.

-¡Pero para que dices nada!-respondo molesto dandole un codazo.-Eres imbécil...

-Lo sé.-responde sonriendo.

-Pues me da igual que te la hayas visto, no tengo ganas de ponerme a buscar otra película.-empieza la película, y en ese momento Rachel entra por la puerta que da al jardín, y se dirige a las escaleras.

-Rach.- la llamo, y se da la vuelta justo antes de subir las escaleras- Acabamos de empezar la película, ven a verla con nosotros.

-Seguro que prefiere irse a jugar con muñecas-dice Tom de mala gana.

-Eso seguro que no. Rach odia las muñecas.- me río y veo que ella hace lo mismo.-Anda, ven aquí.- me muevo hacia un lado y doy unas palmadas en el sofá. Ella sonrie, se sienta a mi lado, y pone su cabeza en mi hombro recostándose.

Cuando llevamos veinte minutos de película, una bomba hace explotar una calle entera. Rachel suelta un grito y me abraza escondiendo la cabeza para no mirar. Yo me río cariñosamente ante su reacción y le devuelvo el abrazo frotándole los hombros.

-Venga, hombre.-salta Tom-¿Se asusta solo con eso?-Rachel se separa del abrazo y se mira las manos-Está claro que solo la aguantas por pena. Es una cría asustadiza e inútil que le da pena a la gente con esa cara de niña buena.

Rachel sale corriendo del salón y sube las escaleras llorando. Yo me giro y miro a Tom cabreado.

-¿¡Por qué coño has hecho eso!?-me levanto-Eres un capullo...-salgo del salón y subo las escaleras para buscar a Rachel. La encuentro en un rincón de mi cuarto, abrazandose las rodillas y escondiendo la cabeza mientras llora. Me acerco y me arrodillo a su lado.

-Rach... Sabes que todo lo que ha dicho Tom es mentira... -ella sigue llorando con la cabeza escondida- Ya sabes que a mi me encanta estar contigo, y eres la única persona a la que conozco a la que le guste entrenar conmigo. -me río y veo que levanta la cabeza.

-Y tu eres el único que no me trata como una niña pequeña y me deja hacer las cosas peligrosas que me gustan.-se ríe y yo hago lo mismo.

-¿Te refieres a cosas como subirte a los árboles o escalar por las rocas?-nos reímos los dos, y me alegra ver que deja de llorar.- Además, no tienes nada de asustadiza, ¿cuántas de nuestras pruebas has fallado o las has abandonado antes de conseguirlas?

-Ninguna...-dice en un susurro.

-Perdona, creo que no te he oído.

-Ninguna- dice ahora más fuerte.

-Esa es mi chica- le revuelvo el pelo y la cojo en brazos para dejarla en la cama. Ella me abraza y me tumbo a su lado abrazandola por los hombros.

-Recuerda que yo siempre estaré a tu lado.- le dejo un beso en la coronilla y le froto los hombros.- Siempre estaré ahí para protegerte.- Ella me abraza más fuerte y se queda dormida a mi lado, para luego hacerlo yo.