Make Him Smile |JinMin|

Tercer intento.

Jimin seguía estando apagado, seguía sin decir que le pasaba y seguía alejándose de todos. Y SeokJin decidió que ya no lo iba a tolerar.

Había estado notando que el chico no comía tanto como siempre, y cada vez que querían pedir algún platillo especial o proponía salir a comer, él declinaba amablemente la invitación alegando que ya había comido, aun cuando nadie lo había visto hacerlo.

En ese entonces estaban preparando las cosas para el cumpleaños del grupo, y SeokJin quería hacer una transmisión de Eat Jin con todo el grupo. Así que cuando estaban teniendo reuniones para planear los eventos, les dijo a los demás su deseo.

Pero Jimin dijo que no quería participar, y no podía mentir, le había roto un poco el corazón.

—¿Por qué no quieres aparecer Jimin? No sería lo mismo sin ti— le recriminó.

—Sólo no me gusta aparecer en cámaras comiendo como si estuviera muriendo de hambre hyung, está bien si tú lo haces, pero a mí me da vergüenza.

Todos se quedaron congelados viéndolos, pasaban su vista del malhumorado Jimin, al herido Jin, quien al parecer podía llorar en cualquier segundo.

Jimin, sintiéndose culpable, se levantó y marchó rápidamente de la sala de reuniones. SeokJin, sólo agacho la mirada, sintiendo palmaditas cariñosas y recibiendo palabras de aliento de sus amigos. Pero su corazón no dejaría de doler por el insulto que Jimin le había dado, prácticamente le dijo cerdo, y no era en broma, como sucedía usualmente.

Entonces, decidió que no iba a aguantarlo más. Se levantó también y salió corriendo de la sala. Dirigiéndose al estudio de baile que solían utilizar. Ahí encontró a Jimin, hecho bolita en una esquina, con la mirada triste y ausente.

Se sentó a su lado, sin querer decirle nada serio. Él sólo quería hacerlo sonreír.

—Jimin, ¿sabes cual es el árbol que asusta?

El menor lo miró confundido, porque estaba seguro que vendría a reclamarle por su insulto, así que no entendía que tipo de pregunta era esa. Negó con la cabeza, esperando una respuesta.

—Pues fácil, el Bamboooooo.

Jimin no tardó en darle una mala mirada, pero segundos después estaba muriendo de risa. Y no fue hasta unos treinta segundos después que pudo calmarse.

Le dio un abrazo a SeokJin y le murmuró un lo siento con su voz más dulce. El mayor sonrió, feliz de haber logrado sacarle unas cuantas carcajadas al pequeño, pero se puso serio de pronto.

—Jimin, si no estás comiendo nuevamente porque las fans o anti-fans están hablando de tu peso, me enojaré contigo— le acusó haciendo un puchero muy poco apropiado para alguien de su edad— Sabes, lo del bamboo no era sólo un chiste, hace un tiempo escuche que algunos espíritus se sienten atraídos por la planta, y se quedan allí, habitándolos hasta que encuentran alguien a quien poseer.

Jimin estuvo dispuesto a reír otra vez por la tonta historia, pero al notar la seriedad de su hyung, dudó un poco.

—Es mentira...¿verdad?— preguntó con duda. SeokJin sólo negó, ocultando como todo un profesinal la risa que quería soltar.

—Si sigues comportándote así, comprare una planta de bambú y la pegaré con cemento al lado de tu cama.

Jimin prometió que comería, y dejaría de alejarlos a todos. 

Y Jin se alegró de haber escogido la actuación como carrera, porque de otra forma habría estallado en risas ante la ingenuidad de ChimChim.

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Empiezan los chistes malos, sí saben alguno me lo pueden comentar, y ya veré donde ponerlo!!!

Y, nuevamente, gracias por votar y comentar, Jin les dará un corazón como recompensa!