desde el primer momento que se conocieron supo que su vida seria una locura, es tan solo un joven de 18 años que transformara su vida en un torbellino de emoción y placer
el hijo de su mejor amigo es su locura y su perdición
-Tony cariño que haces aun en bata?, nuestros invitados llegaran dentro de poco
Amaba a su madre, de verdad que la amaba, pero en estos momentos solo quería gritar que lo dejara en paz. la noche no pintaba para nada bien, su pelea con Steve se mantenía vigente desde ayer y el muy idiota ni siquiera había hecho el intento de comunicarse, vamos que el hombre era algo lento pero joder, el que no lo buscara y rogara su perdón lo mantenía cabreado. ya estaba ideando miles de formas de hacerlo pagar, tal vez amarrarlo a la cama la próxima vez estaría en sus planes como castigo, ese capitonto se las pagaría, de manera sexual pero se las pagaría, muy aparte de eso había algo que lo estaba picando aún más...
-hoy conoceremos a la esposa de Steve, no estas emocionado? - juraba que si su mamá no fuera su mamá, ahora mismo hubiera saltado con garras en alto totalmente molesto, era de locos imaginar a la esposa del hombre con quien te estas acostando entrando a tu propia casa para invitarle una gran cena en su honor, conocía muy poco sobre la esposa de Steve solo sabía lo básico, su nombre era Sharon (hasta su nombre sonaba corriente), casada con Steve desde hace 5 años (bah tampoco es para tanto) y una mujer frívola a su parecer ya que se la pasaba en desfiles de moda y viajes a Europa (tiempo que él y Steve aprovechaban para pasarlo juntos) lo demás no le interesaba saber, esto influenciado por los celos que le producía. Steve era suyo y nadie más importaba - vamos cariño tienes que lucir hermoso, quiero que Sharon vea la belleza de hijo que tengo - lo último hizo que algo se encendiera en su interior, perfecto, un nuevo plan entre sus manos, Steve había sido advertido así que no habría quejas, haría de esta velada algo inolvidable, una sonrisa brillante salió de sus labios como respuesta a lo pedido por su madre, por supuesto que Sharon conocería la belleza y la total superioridad de Anthony Edward Stark
Un lujoso auto se estacionaba frente a la gran puerta de la mansión Stark, del auto descendió un rubio vestido con traje de 3 piezas y porte elegante, seguido tras el bajaba con ayuda del chofer una rubia con un ceñido vestido azul hasta las rodillas
Steve se aproximó a la puerta dando un cansado y silencioso suspiro, de verdad había echo lo que podía para evitar este momento, busco la forma en la que Sharon se quedara en Europa o planeara otro viaje pero para su desgracia esto no fue posible, la propia María había contactado con la rubia para invitarla personalmente y Sharon gustosa había aceptado no perdiendo la oportunidad de encajar con los poderosos Stark y ser parte de su exquisito círculo social, además estaba el tema de Tony, enserio que odiaba discutir con el castaño y por dios que lo había extrañado, un solo día sin la piel de Tony entre sus manos era un martirio, ahora que caía en cuenta, desde que Tony y el mantenían su clandestina relación no había un solo día en el que no se tocaran o se vieran al menos, ese joven de hermoso posos chocolate se había convertido tanto en su vicio como en su obsesión. Steve tenía dos misiones esa noche, evitar que Tony cometa una tontería frente a Sharon y sus padres, y buscar la forma de arreglar las cosas con su menudo castaño
Las puertas se abrieron siendo recibidos por un mayordomo de maduras facciones quien con una reverencia los guio hasta la estancia donde Howard y Maria los recibieron atentos. las presentaciones fueron hechas y mientras Howard y Maria hablaban con Sharon, Steve no podía evitar recorrer cada cierto tiempo con la mirada el lugar tratando de ubicar a Tony
-bien pues que les parece brindar por esta grata reunión? - dijo el mayor de los Stark mientras tomaba la fina copa que le ofrecía el mayordomo al igual que los demás, Steve tomo algo distraído el objeto ya que su enfoque estaba en encontrar a Tony
-son ustedes muy amables, quiero agradecerle por su invitación- miro adulante la rubia invitada, quien sonreía feliz
-no, por favor Sharon, llámanos de tu, sé que Steve es uno de los mejores amigos de mi esposo y es justamente por eso que deseaba conocerla - le devolvió la sonrisa la esposa de Howard
-Maria tiene razón, es un placer para nosotros tenerte aquí en casa, hace mucho que queríamos conocerla, Steve es muy afortunado - le siguió el mayor de los Stark - no es así amigo mío?
El rubio espabilo rápidamente prestándole atención a Howard
- sí, claro, gracias por la invitación, nosotros estamos....
-vaya solo tardo unos minutos y ya quieren empezar sin mí? - rápidamente todos levantaron la mirada para ver a un hermoso castaño sonriente que bajaba las escaleras de manera elegante, Steve se perdió un momento en aquella presencia, Tony lucia espectacular, un bien entallado traje rojo oscuro que atenuaba su cintura y aquel pantalón que resaltaba esa curva trasera que enloquecía al rubio, lo habían dejado sin palabras. Tony era tan fresco, tan vivaz, sus ojos y su sonrisa rebasaban por completo a cualquier vestido femenino y sus atributos físicos de por sí, enloquecerían a cualquiera sea hombre o mujer, el ojiazul solo podía morderse los labios por dentro al recordar que ese hermoso doncel con ese porte y elegancia también compartía su cama de la manera menos recatada y más fiera. si supieran...
-tarde como siempre Anthony, baja de una vez, nuestros invitados no tienen que esperar tu reloj - le regaño Howard, causando en Tony una risita descarada
-cariño, te demoraste mucho, hasta pensé que seguían indispuesto- lo recibió con un beso en la mejilla la dulce maria
El castaño no había parado de lanzarle miradas entrecerradas junto con pequeñas sonrisas a cierto rubio que le esquivaba la mirada de tanto en tanto, esto lo estaba empezando a divertir, el ver el nerviosismo de Steve era épico, con pasos elegantes se aproximó hacia la rubia invitada que lo miraba atenta. A primera impresión, la esposa de Steve no le causaba nada, estaba de por más seguro que él le ganaba en belleza y ni que decir en sensualidad. Rubia (de seguro teñida), cuerpo algo atractivo (jamás lo aceptaría por completo, además se notaba que esos pechos eran falsos y ni que decir de esa nariz, que mal cirujano), dios!!, ese horrendo vestido tenía que ser azul?, que era esto, la hora feliz?, la risa que moría por salir era contenida con picardía
-es una ocasión especial, y tenía que lucir especial para tan distinguidos...- miro de pies a cabeza a la rubia -...invitados - y un guiño juguetón había terminado su parla
Maria conocía muy bien lo vanidoso y sarcástico que podía llegar a ser su hijo y acostumbrada a esto solo sonreía negando tenuemente con la cabeza - y, no vas a presentarme a tu esposa Steve? - se dirigió al rubio, quien miraba expectante todo movimiento del castaño
-si, por supuesto - camino hasta ponerse entre Tony y Sharon - Anthony ella es Sharon, mi, mi esposa - presento algo nervioso camuflándolo perfectamente - Sharon, él es Anthony, hijo único de los Stark
-es un placer conocerte Anthony- le extendió la mano la rubia al joven que la miraba directamente a los ojos
-ho, créeme lo es - le sonrió divertido y giro la mirada hacia el rubio - y mucho, verdad Steve?
El rubio estuvo a punto de atragantarse con el champagne cosa que evito con maestría, esa había sido una indirecta muy directa a sus oídos, volteo rápidamente hacia Howard y Maria para buscar algún indicio de sospecha y solo vio a una sonriente mujer y a un Howard que casi volteaba los ojos sin ningún tipo de interpretación mas que el conocido jugueteo al que los tenía acostumbrados su hijo pasándolo por una más de sus bromas. Sharon solo veía a Steve y Tony de manera algo confusa pero aun así dentro de ella, intuyo algo
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y ya conocimos a la esposita, ¿lo viste venir? yo creo que si XD
capitulo pequeño lo se u.u pero actualizare el siguiente en esta semana, gracias a los que lo leen, es mi primera historia y de verdad que no quiero dejarla, dare lo mejor de mi para poder llenarme de ideas y actualizar. en el proximo cap tal vez sea +18 ( ͡ ͡° ͜ ʖ ͡ ͡°), nos vemos
