La vagabunda | SinRin

Ocho

Narradora:

Vio la pastilla que seguramente SinB le dejo al lado de su cama y se la metió en la boca para luego darle un largo sorbo al agua. Dejo el vaso de vidrio en la pequeña mesa que tenia frente a ella y acarició sus cienes mientras se hundía más en el sofá de la sala. Su cabeza le dolía y el sueño le invadía, pero no podía dormir.

Eran las seis de la mañana, se preguntaba si SinB dormía plácidamente como debería estar haciendo ella en este momento. Estiró sus brazos hacia arriba y dejo salir un gran bostezo.

--Maldición, quiero dormir.. --susurro molesta y se acostó en el sofá-- ¿En que estaba pensando? --se preguntó a sí misma mientras recordaba lo que había hecho hace poco.

Flashback

--¿Qué tal si jugamos.. a un juego? --le dijo la pelinegra en el oído.

--¿Q-qué clase de ju-juego? --se dejó llevar cerrando sus ojos con fuerza al sentirla tan cerca.

La mayor la miró con ternura y la empujo contra la pared mientras la acorralaba con sus largos brazos.

--Y-yerin.. --abrió lentamente sus ojos y se encontró con una mirada de deseo.

--Es mi hora de provocarte, cariño --sonrió pícara y bajo su rostro al cuello ajeno, respirando y hablando cerca, de una manera que dejó sin aire a la castaña--. Eres tan linda.. y sexy.

--Mmm.. --se le escapó un suspiró de los labios al sentir los besos la chica en su cuello-- Espera, e-estas borracha, maldita sea --jadeo y la alejó bruscamente con sus dos manos al sentir las manos de Yerin bajo su camisa-- no sabes lo que haces.

--Se lo que hago --se volvió acercar pero esta vez más pegada a la contraria-- es tu culpa por ser así.

La abrazó con la idea de volver a atacar la hermosa piel de la castaña, pero termino tirando su peso a un lado, logrando que caiga al piso junto a SinB.

Fin de flashback

--Agh.. --se tapo su rostro avergonzada y dio vuelta su cuerpo para hundir su rostro en el respaldo del cómodo sofá.

Por suerte no pudo recordar más, ya que si lo hiciera, estaría aun más roja.

--¿Estas bien?

Levantó su vista encontrándose con una adormilada SinB que restregaba sus ojos con sus suaves y cálidas manos. Parecía una pequeña de cinco años.

--Oye.. --sonrió y se acercó a ella-- hazme lugar --dijo y la chica obedeció alzando sus piernas para que pueda sentarse en rincón izquierdo, y eso hizo.

--... --estaba muy avergonzada la pobre.

--Este sofa es demasiado cómodo--hablo mientras que Yerin volvía a apoyar sus piernas pero esta vez en el regazo de la castaña.

--Concuerdo contigo.

--Por lo que veo tomaste lo que te deje --dijo al ver el vaso de agua en la mesa.

--Gracias..

--No es nada --sonrió de lado y cerró sus ojos. Pero de pronto dejo salir una sonora carcajada ganándose una mirada de confusión.

--¿De qué te ríes? --rió levemente al ser contagiada.

--No quiero incomodarte, pero es que recordé algo que hiciste en el bar.

La mayor se sonrojo y la pateó sin pensarlo.

--Auch --se acarició su costado "lastimado".

--Lo siento por eso, pero es que, me harías un gran favor si te olvidas de eso.

--¿Cómo olvidar?

Flashback:

Las dos chicas se encontraban sentadas en el piso, una frente a la otra, mientras se miraban y se reían de nada.

--EunBi --la nombrada la miró-- Hace mucho no beso a nadie, no se ni como se hace.

--¿Y? ¿Por qué me sales con esto de la nada? --rió y negó con la cabeza.

--No se.

--¿Acaso quieres que te de clases? --bromeó giñandole el ojo.

--Tonta.

Fin de flashback

--¡¿En serio te dije eso?! Que vergüenza... y tú, realmente eres una tonta --se sonrojo al escuchar y recordar.

--¿Yo? --la miro y asintió-- bueno si, pero estoy orgullosa de mí --rieron y desviaron su mirada.

Hasta que la mayor movió sus piernas y se desplazó hacia ella.

--¿Q-qué haces? --pregunto al ver que tenia a la pelinegra pegada a su izquierda muy cerca de su rostro.

--Enséñame.

--¿Ah?

--Besar.

--¡¿Qué?!

--Con lengua.

La menor se sonrojo a más no poder. Causando una carcajada de media hora en la contraria.

--¡Eres una idiota! --la empujo a un lado haciéndola acostar nuevamente.

--Debiste ver tu cara --rió nuevamente con sus manos en el estómago.

Sinb la miro con fastidio hasta que se contagio de su risa y termino riendo con ella.

--Lo siento, solo bromeaba. Estoy segura que se besar mejor que tú, linda --le giño el ojo, olvidándose por completo de su dolor de cabeza.

--¿Ah, si? --levantó una ceja y la miró asentir-- Tsk, yo lo hago mejor que tú --le peleó nuevamente.

¿Por qué terminaron peleando por quien besaba mejor? Ni ellas lo saben. Pero se nota que les gustaba pelearse.

--¿Me estas retando, niña?

--¿Niña? Nos llevamos dos años.

--Eres una niña.

--Con que te gusta jugar con fuego.

--Y a ti con hielo.

EunBi sonrió como tonta y se acercó lo suficiente para poder sentarse en el abdomen de una confundida y nerviosa Yerin.

--Veamos quien es mejor.

Acerco lentamente su rostro al de la pelinegra sin dejar de mirar fijamente aquellos ojos penetrantes color chocolate, hasta que rozó su nariz con la contraria, frenó y bajo su mirada a aquellos labios rosados. Yerin inconscientemente lamió sus labios.

¿Acaso la iba a besar de verdad?

--Yerin..

¿En que estaba pensando?

--No puedo..

A la mierda todo.

--Resistirme.

Después de alargar tanto el drama, por fin, por fin lo hizo.

La beso en los labios.