La Carta (Final)

214 31 8
                                    

Han pasado seis meses desde que llegué a este país. Desde el momento en que le confesé a Clara que estaba embarazada se negó rotundamente a que me fuera de su casa. Ella dice que no puedo estar sola, así que, no quiere que me mueva de aquí. Afortunadamente conseguí un trabajo en una tienda de abarrotes, la paga no es mucha, pero me ayuda a ahorrar un poco para mis gastos después del parto.

Tendré que dejar de trabajar una temporada, pero no me preocupa tanto, tengo aún algo guardado de lo que me dejó Ángel. Entre Clara, Giovanni y yo, pagamos los gastos del departamento que compartimos.

Mis citas médicas para el control de maternidad han revelado que voy a tener una niña y que viene muy saludable. Estoy a menos de dos meses de dar a luz y mi nena, gracias a Clara, tiene tanta ropa que ya no cabe en el armario. Trato de hacerle un poco más de espacio, así que muevo, con mucha dificultad, unas cajas de la parte de arriba y de ellas cae un sobre, a duras penas me agacho a recogerlo, leo mi nombre escrito a mano.

Es la carta que me dejó Ángel, la que venía dentro de la mochila. Creo que ha llegado el momento de leerla. Me siento en la cama y respiro profundamente, la saco del sobre, es una hoja escrita por los dos lados. Empiezo a leer.

Emma, amor mío:

Si estás leyendo esto, es porque las cosas salieron mal, muy mal y ya no tendré oportunidad de ver tus hermosos ojos, ni de saborear tus labios. Necesito que sepas, que entiendas, lo mucho que te amo, lo mucho que te amé, porque sé que nunca fui bueno para demostrártelo, necesito que sepas todo lo que provocaste en mí.

Cuando te miré en el punto de San Luis, por un momento pensé en llevarte conmigo, luego el autobús empezó a avanzar y me arrepentí de no haberlo hecho, así que, aunque pude haberlo dejado atrás con facilidad, di la indicación de ir detrás de él, quería saber a dónde ibas, pero en el trayecto recapacité ¿Con qué derecho? Por qué iba yo a atravesarme en tu futuro, siendo la mierda que era.

Nunca me perdonaré no haberlo hecho, nunca me perdonaré el infierno por él que te hizo pasar ese cabrón, fue mi culpa, porque de haber tenido el valor de llevarte conmigo, te hubiera evitado mucho dolor. Jamás pasó por mi mente hacerte ningún tipo de daño. No tuve el valor de confesártelo, cuando llegaste a mí, temía que me odiaras.

Estaba tan enojado, cuando creí que estabas ahí por tu voluntad, pensé en salir corriendo, pero Ángel Villanueva no corre, menos de una mujer, no podía entender como alguien como tú, o al menos la idea que me había hecho de ti, podría haber elegido esa vida y entonces te miré asustada y sin voluntad, totalmente sometida a Checo, y fue cuando entendí que no estabas ahí por gusto. Me lo habías dicho claramente "este es el último lugar en el que quiero estar" y yo lo tomé personal, idiota, siempre pensando en mí.

Tuve que contenerme para no matar a Checo y Chegoyo, cuando entendí lo que te habían hecho, parecías tan lastimada, que no quise mostrarte el monstruo que yo podía llegar a ser.

Entender esa verdad y probar tus labios esa noche, revolucionaron mi mundo, saberte asustada por lo que mi beso te hizo sentir, me llevó convencerme que estabas hecha para mí. El camino hacia la puerta contigo de mi mano, fue el recorrido más largo y tortuoso, que he experimentado, y tú lo tenías que dificultar, cuando te plantaste en el suelo, tenías una mirada de determinación y supe que no saldrías de ahí sin hacer nada por las demás mujeres, eso tocó lo más profundo de mi ser y supe que eras diferente, por un momento estuve tentado a cargarte en mi hombro y sacarte a la fuerza, pero nunca me lo hubieras perdonado.

Salir de ese lugar contigo a "salvo" fue la victoria más grande de mi vida.

Las siguientes dos horas, fueron las más horribles de mi vida, verte ahí desangrándote me hizo sentir tan inútil, pensé que la vida me castigaría por todo lo que había hecho, e hice lo que nunca me imaginé volver a hacer algún día, le supliqué a Dios que te salvara y me escuchó, en ese momento entendí que tu habías hecho por mi más de lo que yo podría hacer jamás por ti. Me devolviste la vida, la fe, me hiciste ver que había esperanza de nuevo.

Estuve a punto de perder todo eso cuando me dijiste que te querías ir y me porté de la manera más vil, te obligué a estar a mi lado. No quería ser como tus captores, por eso te di tu espacio y no sabes lo que me alegró ver que no estabas dispuesta a someterte a nadie de nuevo, por eso te llevaba al límite, quería que te defendieras, que no estuvieras dispuesta a someterte a mi voluntad, eso me hizo ver que hacía falta mucho más que lo que te habían hecho para quebrarte, me hizo ver que eras fuerte y que saldrías adelante ante cualquier situación. Nunca olvidaré como la lección que yo te quise dar se volvió en mi contra y me demostraste que podías con lo que te pusiera delante. Quise que me necesitaras y termine necesitándote, quise que me suplicaras y terminé rendido ante ti.

Ahora Emma, ese mismo espíritu que me mostraste, necesito que lo dejes salir a flote, porque ya no voy a estar para ti. Necesito que me prometas que te mantendrás viva, pase lo que pase. Yo no podré cumplir la promesa que te hice de cuidarte siempre. Pero estoy tranquilo, porque fui parte de tu crecimiento y sé que no quedas desamparada, llegaste a mí como una chiquilla y te vas de mí como una mujer. Ahora más que nunca, puedes hacer frente a cualquier cosa que la vida tenga preparada para ti y yo me quedo con la satisfacción de saber que dejé una huella en tu vida. No te arrepientas de nada, no te reproches nada, si tienes que olvidar, olvida, incluso olvídame a mí, si eso te lleva a seguir adelante.

Te amo Emma y lo haré hasta el final. Si al infierno te hubieran llevado, al infierno voy por ti... Siempre tuyo...

Ángel V.

Leo la carta una y otra vez, porque casi puedo escuchar su voz con cada palabra, las lágrimas corren por mi rostro. Hacía mucho tiempo que no me permitía pensar en él, por el dolor que me causaba, siento un hueco en el pecho que no sé si podré llenar algún día. ¿Cómo puede extrañarse tanto a alguien? Me pregunto repetidas veces. Siento como si mi pecho fuera a estallar en forma de un grito y trato de contenerme, lo último que deseo es a Clara interrogándome. ¿Alguna vez me volveré a sentir completa?

En ese preciso momento siento como mi nena golpea mi vientre desde adentro. Es como si me estuviera dando la respuesta, ella es un pedacito de Ángel, ella va a complementarme.

FIN

===============================================================================

Llegamos al Final de Un Ángel para Emma, de verdad espero que la hayan disfrutado y espero no haberles decepcionado con el final de este libro...

:(

:(

:(

Pero qué creen???? 


Hay Secuelaaaaaaa! :D

No te la puedes perder, tienes que estar al pendiente porque próximamente la estaré publicando. Mientras tanto, ayúdame a votar, comentar y compartir esta historia. Quiero agradecer a mi lectora fiel a GauthierKassandra y a los demás que han estado al pendiente de las actualizaciones, lamento haberles hecho esperar. Les mando un abrazo...

Un Ángel para Emma 1era Parte ✓✓ (Completa)Where stories live. Discover now