Justamente un día como hoy, siete años atrás, estaba recibiendo la llamada que cambiaría completamente mi vida y ni siquiera terminaba de comprender lo que aquello significaba. Recuerdo el calor, aquel domingo donde todos maldecían de no dormir hasta tarde, creo que no era siquiera las 8:00 am cuando sonó el móvil. En el tercer tono mi corazón se paralizo, pronto escuche a mamá llorar y comprendí que era tiempo de volar. El abuelo había muerto. Eso fue todo lo que escuche y después no lo sé, supongo que todo en mi vida se apago. Todo se borro. Fue como un vídeo juegos que de pronto quedo en game over y ya jamas iba a volver a comenzar. El dolor en aquel entonces fue real, aun lo es. Recuerdo la mirada de dolor de la abuela, sus risas por las noches al dormir por mas de cuatro años porque el hombre de su vida se marcho y olvido llevársela a ella, a ella que le dio tanto amor. Supongo que ese es el momento mas difícil de tu vida, ver como se marcha alguien por quien dabas todo y no poder hacer nada para detenerlo, salvo quererlo y recordarlo siempre. Por eso hoy, que hace tanto calor aquí, quiero que sepas que aun sigo de pie por ti, que voy a luchar para que desde el cielo me veas y sonrías por mi. Te quiero abuelo, eres el mejor hombre que conocí.
