Habia frío. Las calles estaban incluso mas desiertas que ayer y ese no fue un motivo tampoco para no ir a flotar. A dejar que mi cuerpo se sanara de todo el mal que recibía de los demás. Supongo que lo mas difícil después de quererte a ti mismo es escuchar mil insultos de las personas que se suponen deben apoyarte en todo y nunca darte la espalada. Supongo que me acostumbre, que después de tantos gritos y golpes al vació pude comprender que ni por todo el fuego del mundo iba a acabar aquello. Pero esta bien, así como siempre puedo surgir después de haberme rendido diez veces en un día puedo seguir a pesar de lo malo que recibo en mi día a día. Así que mamá, esto es para ti. Aunque digas que soy la peor hija del mundo y todo lo demás quiero que sepas que aun tengo fuerzas para luchar por un futuro mejor, y no. No soy una zorra, tampoco tengo aspiraciones de serlo, puedo seguir, sabes. Siempre puedo triunfar, se que si.
