Lukey say yes ♡ m.c

a life without him.

La mañana estaba despejada, el sol brillaba en la alto pero lo que no sabia era por que brillaba tanto si Luke no estaba allí. habían pasado algunos meses desde que él ya no vivía pero los días seguían pasando, la vida seguía o al menos eso decía mi madre cuando me venia a visitar.

flashback;

 Lo cierto es que luego de la muerte de él yo intente intoxicarme con las pastillas para la ansiedad, vacié el frasco por completo y luego solo me senté a esperar en el baño, con la espalda pegada a la fría pared y mi cabeza apoyada en mis rodillas y luego de eso me dedique a observar un punto inexistente en la pared; cuando las pastillas empezaban a surtir efecto, mamá empezó a llamarme porque que no me encontraba, lo único que hice fue permanecer en silencio, era obvio que no podía seguir con esto, ella lo había notado y no me perdía de vista desde lo de Luke, ella sabía y siempre sabrá lo que el significa para mi. entonces empezaba a darme sueño, se que las pastillas al fin hacían efecto, entonces todo se volvió Calígino[1], pero la puerta se azotó tan violentamente y entró mamá con su cara de preocupación y algunas cuantas lagrimas caían por su rostro, se que ella sabía que había una alta probabilidad de que yo tuviera esa tendencia suicida luego de lo que le paso a él y entonces vió el frasco de Xanax(alprazolam) y se apresuro a tratar de despertar mi pequeña somnolencia; me arrastro hacia la tina y hecho a correr el agua fría para luego meter sus dedos en mi boca y inducirme el vomito, lo hizo hasta que vio que solo salia espuma de mi boca, luego lo que recuerdo son las voces de ella, marcando el teléfono y luego todo se desvaneció. Desperté en un cuarto blanco con una intravenosa en mi brazo y mi madre dormida en una pequeña silla incomoda, la trate de llamar pero nada salio de mi reseca garganta, en la mesilla junto a la cama de hospital permanecía un vaso con contenido de agua y lo tome tan rápido que mi garganta ardió pero luego el ardor cesó y me sentí recompuesto y renovado, la llamé y despertó, habían sombras oscuras bajo sus ojos y su mirada demostraba lo mucho que había estado llorando hasta dormirse y todo por mi culpa, me miró y lo único que hizo fue sollozar y luego apretarme en un gran abrazo, besó mi frente y dijo que iría por un doctor para que me hicieran una revisión. Luego de eso, después de que me dieran el alta trataron de que hablara con un especialista pero me rehusé, todo lo  que quería era callar el fuerte dolor en mi corazón, no quería que se metieran en mis asuntos, pues si el dolor era mio, no era necesario compartirlo e involucrar a otras personas en el tema, el dolor era y es mio y así lo será siempre o al menos hasta que pueda acostumbrarme a esto, o eso me decía a mi mismo.

  [1]Calígino: oscuridad, sin luz, nebuloso.