Hope siempre había dependido de su hermana para la gran mayoría de las cosas, al ser un asco interactuando con cualquier otro ser humano se le dificultaba encontrar a alguien con quien hablar libremente, por eso cuando se entera que su hermana plane...
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El domingo terminé el libro de Hope, no estuvo tan mal como había pensado, me había atrapado lo suficiente como para terminarlo en dos días y no tardé en mandarle un mensaje con mi reseña, con la cual coincidió en algunas partes y difirió en muchas otras. Hablar con ella era entretenido, siempre salía con historias raras sobre documentales o animales, nuestras charlas eran tan diversas que sentía que no había un tema que fuera aburrido hablar con ella.
Pero aún así, pese a que había tenido un fin de semana agitado y no tan aburrido como otros, sentía que después del horrible día que me hizo pasar Thalia tenía que hablar algunas cosas con Jackson. Éramos mejores amigos desde primaria, lo conocí muchísimo antes de conocer a Tobías, pensé que estábamos en la misma sintonía y no había necesidad de ocultarnos nada, pero por sobre todas las cosas nunca pensé que iba a convertirse en amigo de alguien como Timothy, no cuando él mismo sabía mis razones, las razones para pensar que él no era una muy buena persona.
El lunes, luego de arreglarme para ir a la escuela y esquivar lo mejor posible las sugerencias de Alex de llevarme en su auto, me subí a la bicicleta y comencé a pedalear hasta la escuela. Hoy necesitaba llegar temprano, quería hablar de esto con Tobias, necesitaba preguntarle si estaba al tanto de la amistad de Jackson y Timothy antes de que él llegara. Las cosas entre nosotros ya estaban un poco raras por Hope y, aunque me molestara esto que estaba sucediendo, no era un idiota que quería arruinar nuestra amistad.
Después de colocarle la cadena a mi bicicleta, me encontré con Tobías hablando con un grupo de chicos, solo conseguí identificar a algunos que iban a teatro con él, por suerte no me hizo saludarlos como otras veces y se acercó hacia donde me encontraba junto con su habitual euforia, rodeando mis hombros con uno de sus brazos mientras chillaba sobre el hecho de que hoy Thalia le había venido a hablar por su propia voluntad.
—Está enamorada de mí, es obvio.
—Tobías, solo te saludo mientras iba caminando por el pasillo.
Su imaginación era demasiado para mí, estaba a un paso de cruzar la línea de lo gracioso a lo demencial.
—Pero no fue un hola normal, fue un hola —dijo intentando cambiar el tono en que decía ambos saludos—. ¡Me estaba intentando seducir! La amo, le voy a pedir que salgamos.
—Haz lo que quieras, pero no digas que no te lo advertí —repliqué consiguiendo que en respuesta que soltara un suspiro, me había olvidado que Tobías vivía en un mundo de fantasía en donde todo giraba en torno suyo—. Ey, ayer me enteré de una cosa por ahí y quería ver si sabías.
—¿Qué? —dijo recostando su espalda sobre los casilleros mientras observaba cómo quitaba el candado.
—¿Es verdad que Jackson y Timothy fueron amigos?.
Tobías se comenzó a reír de manera tan exagerada que parte de su saliva terminó aterrizando en mi rostro.
—¿Qué? La persona que te dijo eso vive en una caja —protestó rodando los ojos—. Sé que las cosas entre ustedes están un poco sensibles, ¿pero en serio creerías algo como eso?.
