Entre el cielo y el desastre

Capítulo 61

—Brayden no es tan mal chaval, pero no me fío de él.
–murmura.

—Debería bastarte con que me hace feliz y estoy bien a su lado.
–murmuro suavizando la voz.

Suelta un suspiro, eleva su mirada hacia mí y se levanta del sofá quedando de pie.

—Quizá esté juzgando demasiado pronto. Te veo feliz desde hace un tiempo y no lo entendía, pero jamás pensé que era por él. No quiero estar enfadado contigo por más tiempo, es tiempoperdido y siempre vas hacer lo que te da la gana así que... ¿perdón?

—Disculpas aceptadas, Marlon.
–digo sonriendo.

Su cuerpo se acerca al mio dándome un abrazo algo rápido y deja un beso en lo alto de mi cabeza, pasando por al lado mio caminando hacia la cocina dejando la taza en el fregadero y caminando por el pasillo desapareciendo por él.

—¿Vamos a hacer la compra juntos como en los viejos tiempos?
–dice elevando una ceja y desapareciendo por la puerta de su habitación.

Acepto y camino hacia mi habitación para vestirme.

Me parece buena idea, hace bastantes meses que no vamos juntos a hacer la compra. Aunque cuando la hacemos los dos nos pasamos del presupuesto comprando dulces innecesarios, pero siempre es divertido.

[...]

Brayden apaga el motor y saca las llaves del contacto saliendo del coche rodeando éste y abriendo la puerta de copiloto tan rápido que apenas me ha dado tiempo a quitarme el cinturón de seguridad antes de que él llegue hasta la puerta. Ofrece su mano abriendo la palma y se la agarro ayudándome a salir del coche como todo un caballero, cerrando la puerta y caminando agarrados de la mano hacia un restaurante de comida rápida.

Nos acercamos hacia una mesa donde hay como cinco chicos charlando entre ellos y riendo, hasta que uno de ellos se fija en nosotros y habla consiguiendo que todos los demás miren en nuestra dirección. Es Lander.

—¡Hey, Brayden!
–saluda Lander.

–Hey.
–responde.

Los demás chicos me observan descaradamente haciéndome sentir algo incómoda. Así que, desvío la mirada hacia otro punto y trago seco.

Doy gracias a mi mente por haber pensado ponerme vaqueros largos y no una falda como tenía previsto, o posiblemente me hubieran comido con la mirada aún más. Más de lo que ya están haciendo, porque, no son miradas normales.

Brayden agarra una de las sillas de la mesa de al lado, la cuál está ocupada por una mujer y su marido y ni si quiera ha pedido permiso. Pero ¿qué se puede esperar? Es Brayden. Suerte, que no se han quejado y que no estaba ocupada.

Arrima la silla hacia la mesa cuando los demás le han hecho un hueco y se sienta en ella, agarrando mi cintura y sentándome encima de sus piernas pasando un brazo por mi cintura.

—Ella es Alle, mi novia. Ellos son: Lander, Cody, Logan, Louis y Carter.

No puedo negar que al escucharle decir «mi novia» ha pasado un escalofrío por todo mi cuerpo y un hormigueo por mi estómago.

Ellos me saludan con un "Hey" unísono.
Parece ser que un "Hola, ¿que tal?" es demasiado largo para ellos. Yo solo sonrío y ellos siguen a su rollo, Lander es el único que me devuelve la sonrisa.

—¿Alex qué, ha dicho que va a venir?
–pregunta un chico de la cabeza rapada quien supongo es Carter.

—Ha dicho que se pasaría, pero no le hemos dicho que estaba Brayden.
–contesta Cody.

¿Y por qué no le han dicho que estaba Brayden? ¿Qué ha pasado ahora?

La mano de Brayden libre se coloca encima de mi mano derecha, pero pongo mi mano encima de la suya tocando el anillo de su dedo índice y después entrelazando nuestros dedos.

—Míralo, por ahí viene.
–comenta Louis, creo.

Nos giramos todos a la misma vez hacia atrás cuando aparece Alex caminar en nuestra dirección. Y al vernos a Brayden y a mí, frunce en ceño.
Llega hasta nosotros quedándose de pie mientras que Carter agarra una de las sillas y la coloca a su lado, justamente enfrente de nosotros.

Brayden parece estar tranquilo.
No ha dado ninguna seña de estar molesto por la presencia de Alex o de estar incómodo. Al contrario de mí, que estoy algo nerviosa e incómoda y ni si quiera sé por qué.

—Hey Alex, ¿Por qué has tardado tanto?

—Estaba ayudando a mi padre.

Su mirada esquiva la mia por varias veces, intenta no mirar hacia nuestra dirección pero finalmente termina haciéndolo después de un par de minutos ignorando, chocando su mirada contra la mia.

El brazo de Brayden se estira por mi lado hacia el pequeño cuenco para agarrar una aceituna y llevársela a la boca. Su mano da un apretón en mi cintura y me giro un poco hacia él mirándole de reojo y él esboza una pequeña sonrisita de medio segundo. Me devuelvo hacia delante y siento los labios de Brayden dejar un beso encima de hombro.

—No sabía que ibas a venir.
–suelta Brayden de repente.

La mirada de Alex se posa en mi lado mirando hacia Brayden, dándole una mirada no demasiado amigable, para ser verdad.

Trago saliva y agarro el vaso de agua que antes me habían servido y doy un pequeño sorbo. ¿Por qué siento que esta noche no va acabar bien? Y apenas son las diez...

¡¡Hooola!! ❤

Hasta aquí el capítulo de hoy, os dejo con la intriga...

Alex vs Brayden

Viene un capítulo intenso, os espero en el próximo para saber que pasa  :)

(Mañana habrá otro capítulo más.)

¡Nos leemos!
❤❤❤❤❤❤❤

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