Till the sun dies (hasta que el sol se muera) Harry Styles y tu

cap. 8

No teníamos mucha hambre así que compramos una botella de agua, una lata de coca-cola y dos manzanas caramelizadas y nos sentamos en un banco en frente del castillo. Eran las 11:26 y el espectáculo de las luces del castillo, empezaba a las 12.

Nos sentamos a comer y me llegó un mensaje de Whatssap al movil. Lo miré extrañada, pensando de quién podría ser. Lo abrí.

Hola, estaba pensando si nos podemos ver. Vas a ir a ver el espectáculo de las luces del castillo? Yo ya estoy ena plaza dando vuetas, esque me aburro. Bueno, ahora no voy vestido de Peter Pan;P.

Desconocido.

Lo añadí a contactos y le respondí.

Si, voy a verlo. Yo también estoy en la plaza "cenando" con mi padre. Estamos sentados en unos bancos justo en frente del puente de entrada. Tu dónde estas?

-Hola, por fin te he visto.- dijo alguien enfrente nuestra.

Levanté la vista y vi a el mismo chico de antes, sin el traje de Peter Pan. Era alto, ojos verdes-azules, pelo rizado y largo rubio apagado con mechas rubitas. Unos labios finos, junto a una nariz con los agujeros de esta ligeramente abiertos adornaban su cara. Cuando sonreía dos perfectos y profundos hoyuelos aparecían a ambos lados de sus labios rosas. Vestía unos jeans desgastados, negros y bastante ajustados con una camiseta blanca, y unos botines marrones desgastados.

-¿Quieres pasear?- preguntó.

-Claro.- respondí.- papá, voy a llegar antes de que enciendan las luces. Quédate aquí. Hasta ahora.

Le di un beso y salí de allí con el chico.

-Oye, hemos hablado ya mucho, y no se ni tu nombre.- me dijo.

-Me llamo ____. ¿Y tu?- pregunté

-Yo me llamo Harry.- respondió.

Estuvimos hablando bastante tiempo y al volver vi a papá con una chica rubia sentados en un banco distinto al de antes. Edtaban tan juntos y entretenidos que no quisimos molestarles así que me senté en el césped que había al lado del río y miré al castillo que se encontraba en frente mia. Harry se sentó al lado mía y nos quedamos así, hasta que apagaron todas las luces de las calles y empezaron a salir imagenes reflejadas en el castillo. Lo vimos Harry yo yo juntos y, al parecer, mi padre lo vio con su amiguita, porque al acabar, fuimos con ellos y me la presentó. Se llamaba Amanda y era rubia con ojos verdes super claritos. Era bastante guapa.

Ya estábamos en el taxi de camino al hotel. Al llegar subimos, me di otra ducha y me dormí.

E día siguiente, lo pasamos tranquilo. Salimos a pasear por el centro y a comprar. Visitamos los campos Eliseos, donde se encontraban las galerías Lafayette, donde compramos en Pepe Jeans, Dolce & Gabbana, Cartier, Abercrombie, Hollyster... y compramos camisetas, vestidos, pantalones, faldas, joyas, zapatos, colonias, maquillaje, accesorios... También estuvimos en Avenue Montaigne, donde se encontraban las calles más caras de París, pero no compramos nada, porque era EXCESIVAMENTE caro.

Hicimos un picnic al lado de la Torre E'Iffel y visitamos pueblos cercanos. Pasó todo ese día y ya estábamos rumbo a Italia, para visitar Milán. Resulta que solo nos quedaremos dos días en cada lugar, porque necesitaban a mi padre lo antes posible en Nueva York, para cosas de negocios.

Llegamos a Milán y entramos en el hotel AC Milano, donde nos atendieron estupendamente. Había spa, piacina, sauna, buffete libre... pasaría mucho tiempo ahí, porque Milán es más una ciudad rústica que solo había una pequeña-gran zona para comprar, el cuadrado de oro, y a mi, no me va mucho lo rústico, así que pasaría de eso.

Allí, no hicimos mucho. Compramos y nos relajamos. A los dos días, ya estábamos en Londres. Amaba este lugar. Aquí si hicimos cosas. Fuimos al London Eye, al Big Ben, a museos como el Madame Tussauds, el museos de Historia Natural... y compramos en Harrods y Hamleys. En fin, toda una aventura. Terminamos de visitar Alemania, Brazil y Washington y llegamos a Nueva York, una semana antes de que las clases empezaran. Yo estaba super nerviosa. Y el tiempo se me pasaba volando allí. La casa en la que nos instalamos era, más bien, un rascacielos. Estábamos en la cima de uno de ellos, en el piso 64. Eran todo ventanales y teníamos unas escaleras que llevavan a la terraza. Era super lujoso, pero a la vez moderno. Me encantaba. 

Esto era como un sueño... ¿Qué más podría pedir?

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ME VAIS A MATAR! Lo siento muchísimo! ESte capítulo a estado super aburrido enserio, lo siento bastante. Pero lo he hecho así de rápido para que las chicas que me pedisteís salir en la novela, salgaís cuanto antes. Dios, me siento de mal... Me perdonaís?

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Gracias por todo y repito, perdooon:'(