Destroying.- Duki.

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- Ay, la concha de tu madre. Van dos días que duermo acá y me despiertan como el culo.- Dijo Aisha. Básicamente se había despertado con la cara psicótica de su amigo a centímetros de la suya. Mks se tentó, hace media hora estaba así.

- Bajá que están los pibes, vamos a ir a desayunar.- Dijo saliendo del cuarto.- Ah, y no bajes con tu pijama que me contó Duki que muestra mucho.- Rió y bajó las escaleras.

Aisha rodó los ojos. Se levantó muy a su pesar, hizo lo que una persona hace cuando se levanta, se cambió y bajó.

- Hola.- Saludó en general. Todas las miradas se posaron en ella y todos le devolvieron el saludo. Estuvieron hablando un poco y luego emprendieron viaje a Burger King caminando.

[...]

Dam, Lit Killah, Ecko, Nacho, Alejo, Mks, Duki, Wolf, Midel y Frijo caminaban un poco más adelante que Aisha. Ella estaba en su mundo, mientras los demás pelotudeaban por el medio de la calle.

- Son altos giles, eh.- Sintió Aisha a su lado.

- Si, pero son graciosos.- Rieron.

- Te acordás de mi nombre, ¿No?- Ella miró su cara y en unos segundos ya lo había reconocido.

- Alejo a.k.a el gordito exportador de aceite.- Claro que lo reconocía. Él fue el primero que conoció.

- Cómo te acordás, ¿Eh?- Rieron.- ¿Te está gustando Argentina?- Preguntó el gordito.

- Bueno, desde que llegué me despertaron como el culo, no cambié plata uruguaya por argentina, tengo que ver al mismo pelotudo todos los días.- Señaló a Duki.- Y me corrieron turros, pero Argentina es un país muy lindo.- Alejo rió y Aisha le siguió la risa.

- ¿Mauro te cargosea?- Señaló a Duki y Aisha lo miró extrañada.

- ¿Mauro?- Al parecer ese era su nombre real.

- Si, mira. Damián Lafuente, Mauro Monzón, Nacho Spallati o Matias o Ignacio, como más te guste.- Aisha rió.- Nacho Augenuino, Mauro Lombardo, Alexis y Emanuel.- Nombró a todos por orden.

- Voy a tratar de acordarme de todos.- Rieron.

- Volviendo a lo de Duki, ¿Te jode mucho?- Aisha puso los ojos en blanco y Alejo rió.

- Si, además me vive diciendo cosas.- Alejo rió mal y se llevó una mala mirada de parte de la morocha.

- Le caíste bien, te va a joder siempre así. O si no, le gustaste.- Las palabras de Alejo le habían quedado en la cabeza. ¿Gustarle? ¿A Duki? Seguramente él no quería nada más allá de una noche, o al menos eso es lo que piensa Aisha.