Mía

Capítulo 2

Narra Stephen

-Tu hermano es un verdadero idiota, debería de cuidarte no ponerte en peligro así, esto fue lo menos grave que pudo haberte pasado.

Estaba enfurecido, no entendía como Charlie había podido poner en semejante peligro a su hermana, qué hubiera pasado si yo no hubiera estado en ese momento para defenderla, por alguna razón que no entendía me hervía la sangre solo de pensarlo. Una vez dentro del elevador  pude darme cuenta del temor que Claire tenía, y pensé que mi actitud no la ayudaría a relajarse así que traté de pensar en una forma inteligente de calmarla pero recordé que nunca he sido hábil para entender a las mujeres, es extraño porque aún así soy bastante exitoso con las chicas, quizá sea por mi poder, pero ellas siempre quieren un poco de Stephen.

-¿Estás bien? No temas por lo que pasó, no volverá a suceder.

-¿Am? Sí... Bueno, gracias por defenderme.

-No agradezcas, Marcus es un idiota.

-Aún así, eres el único que hizo algo, los demás parecían disfrutarlo.

-No sabían que eras una invitada, dije que eras mía allá adentro y salí contigo de la mano, quizá pienses que aproveché la situación pero lo hice por protegerte, ahora no solo saben que hoy fuiste una invitada sino que ahora creen que realmente eres mía por lo que tienes mi protección, nadie te va a tocar.- Hubo un silencio breve después de mis palabras pero después de dar un suspiro y como si temiera hablar, Claire me miró fijamente.

-Parece que todos te tienen miedo.

-Supongo que sí.- Dije con una sonrisa burlona.

-¿Debería de temerte también?

-Tú no.

El elevador abrió sus puertas, y cruzamos la recepción, mi auto ya esperaba afuera del hotel, aún llevaba a Claire de la mano y sentía como temblaba delicadamente, estaba muy callada y era obvio, debía de tener miedo y seguramente tenía muchas preguntas después de lo que sucedió, la solté solo para abrir la puerta del auto y le sonreí amablemente mientras entraba al auto, solo intentaba calmarla, no quería que sintiera terror al estar sola en un auto con un hombre que conoció en medio de un momento que debió de haber sido traumático para ella. ¿Por qué me preocupaba tanto y por qué estaba siendo tan amable? Yo no soy así.

-¿Sabes llegar a tu casa?- Dije después de cerrar la puerta del auto y encender el motor.

-De hecho no.- Pude ver como en ese momento su rostro cambiaba al darse cuenta de que no tenía idea de cómo llegar a su casa, la miré extrañado y ella lo notó así que siguió hablando.-Me acabo de mudar con mi hermano, aún no conozco la ciudad... Pero puedo llamarlo y me dirá cómo llegar.- Claire metió la mano en su bolso pero la detuve.

-Será mejor que no lo hagas, mi padre dijo que tenía trabajo que hacer, no lo interrumpas, te llevaré a cenar, si te parece bien.

-Preferiría ir a casa, no quiero ser una molestia.

-No lo eres y no te llevaré a que estés sola en casa, tu hermano llegará muy tarde.

Empecé a conducir, fue un trayecto corto, de vez en cuando volteaba a ver a Claire asegurándome de que estuviera más tranquila, cada vez que lo hacía me parecía más hermosa, había algo en ella que me atraía. Después de unos minutos en completo silencio detuve el auto frente a un restaurante bastante elegante, pero estaba cerrado.

-Creo que llegamos tarde, ya está cerrado.- Dijo Claire mientras inspeccionaba el lugar desde la ventana del auto.

-Nunca está cerrado para mí, yo soy el dueño.

Saqué un juego de llaves de la guantera y se lo mostré a Claire con una sonrisa orgullosa, ambos bajamos del auto y entramos al lugar, no había nadie evidentemente, se sentía frío. Señalé las escaleras que conducían a la terraza mientras encendía las luces, Claire comenzó a subir las escaleras y yo detrás de ella, admito que con una muy buena vista aunque traté de disimular. Desde mi terraza teníamos una vista una calle algo solitaria pero extrañamente era agradable de ver.

-¿Te gusta?- Pregunté.

-Mucho.

-Que bueno, ahora tengo que hacer una llamada. -Señalé una mesa y Claire se dirigió a ella mientras yo hacia la llamada.- Hola Patt ¿Qué tal todo? Sé que es tarde pero te necesito en el restaurante... Y sabes que te pagaré bien.

-¿Stephen? ¿Cena con los amigos después del bar otra vez?

-No esta vez, pero date prisa, eres bienvenido a cenar con nosotros si quieres quedarte.

-¿Nosotros? Suena tentador con tal de descubrir quién es tu misteriosa compañía el día de hoy.

-Eres peor que mi madre.- dije mientras me reía.

Después de colgar me dirigí hacia Claire que aún lucía confundida, me quité el saco pues pude ver que temblaba, a fin de cuentas estábamos en la terraza y la noche era algo fría así que le ofrecí el saco para que se cubriera, solo estaba usando un pequeño vestido que cabe mencionar le quedaba demasiado bien, Claire lo tomo agradeciendo y se cubrió.

-Llamé al chef, estará aquí en unos minutos, mientras puedo ofrecerte algo de beber.

-No era necesario que hicieras eso, el chef probablemente ya estaba descansando, podríamos haber ido a otro lugar.

-Tranquila.-Dije soltando una pequeña risa al ver su rostro de preocupación- El chef es mi amigo, Patt, siempre quiso tener su propio restaurante pero nunca pudo ahorrar lo suficiente así que compré este restaurante para él y pasa la mayor parte del tiempo aquí, ama este restaurante, algunas veces a la semana vengo por la noche, generalmente con otros de mis amigos y Patt viene a cocinarnos, además le pago muy bien, así que no es un problema para él.

-Wow, ¿le compraste un restaurante a tu amigo de verdad? Yo a veces ni siquiera tengo dinero para darles un regalo en su cumpleaños.-Por primera vez vi el miedo en los ojos de Claire desaparecer y entonces sonrió, dios, su sonrisa era insoportablemente adorable y entonces sin perder la sonrisa sus ojos se cerraron haciendo un gesto de confusión- Espeeeera... ¿Acaso ammmm? Bueno es que es un acto demasiado bueno, digo, tendría que amar mucho a un amigo para comprarle un restaurante, además de trabajar tres turnos durante toda mi vida... ¿Es? Bueno, ¿Es Patt tu novio?-Claire se sonrojó al decir esas palabras.

-¿Qué? JAJAJAJAJA, por dios, mujeres, qué les pasa, para ustedes un hombre no puede hacer algo bueno sin buscar algo romántico. No Claire, Patt no es mi novio y honestamente los hombres no son lo mío, que imaginación tienes, es mi mejor amigo, nos conocemos desde que éramos niños, pero esa es una historia larga.

-Perdón, creí que tal vez...-Claire se sonrojó aún más y parecía muy arrepentida de lo que había sugerido, de nuevo el miedo en sus ojos, detestaba que ella me viera así, le había dicho claramente que ella no tenía porque temer.

-NO CLAIRE, es un amigo, ya lo conocerás, solo un amigo, digamos que Patt no es mi tipo... Tú eres mucho más mi tipo.- Dije con una sonrisa que yo sabía que hacía que las chicas se derritieran y para este punto Claire ya era un tomate de lo sonrojada que estaba.