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—esto es hermoso — susurró ned una vez que estramos al salón principal del castillo para el banquete de bienvenida.

Todos asentimos facinados mirando las diversas y llamativas decoraciones mientras caminamos a nuestra respectiva mesa.

—Lyanna creo que seria mejor que me vaya este no es lugar para mi— susurró en mi oido mi nuevo amigo Howland.

Había conocido a howland en la mañana, fui a recorrer el lugar y mientras caminaba lo encontré siendo molestado por unos escuderos cuyas casas reconocí al instante. Llena de rabia tome una espada y los enfrenté, en un principio les sorprendió ver a una mujer usando tan bien una espada y para evitarse menos problemas estos huyeron cual cobardes.

Howland estaba herido así que lo llevé a mi tienda y allí curé sus heridas, también le presente a mis hermanos los cuales se mostraron muy educados y lo aceptaron muy bien.

Al descubrir que howland era miembro de la casa reed comencé a insistir en que nos acompañara al banquete de esta noche, este se negó rotundamente pero yo insisti y como no quería un no lo logré.

Y aquí estábamos.

Gruñi por lo bajo al escucharlo decir eso y lo miré enojada. Howland tragó en seco nervioso por mi mirada y volteo a ver a brandon y a ned los cuales se estaban riendo.

—No le ganaras muchacho— esta vez habló robert llegando y colocándose entre nosotros— así que mejor tomate un vino que esta noche será larga.

Todos soltaron una pequeña risa, hasta holland que rendido se sentó a lado de brandon y esperó a que le trajeran de beber.

—te ves preciosa esta noche mi señora— susurro robert tomandome de la cintura y acercándome a él— aunque me encanta verte no soporto que los demás lo hagan y con ese vestido estas llamando la atencion de todo el salón— Robert se veía tan apuesto que con solo verlo me hizo estremecer, sus ojos azules me miraban atentos llenos de emoción y juro poder reconocer amor en ellos.

Sonreí avergonzada ante su comportamiento frente a mis hermanos y como consecuencia rei nerviosa.

—Gracias mi señor— le respondí y tomé una de sus manos para acercarla a mi, deposité un beso en ella y luego la entrelace con la mía

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—Gracias mi señor— le respondí y tomé una de sus manos para acercarla a mi, deposité un beso en ella y luego la entrelace con la mía.

Robert me miró sorprendido con una brillante y hermosa sonrisa adornándole los labios, sin previo aviso tiró de mi y estrelló sus labios con los mios.

Me sorprendí ante su acción pero le devolví él beso de manera tímida.

—Robert deja de comerte a mi hermana y ven a sentarte— le gritó brandon en tono burlesco.

Cuando nos separamos sentia mis mejillas arder y solo enterré mi rostro en el pecho de robert.

—Seguro ya está sonrojada— esta vez fue benjen él que habló haciendo que todos rieran.

Robert y yo nos separamos y miramos a nuestra mesa, reí al ver a mis hermanos cada uno mirándome con sorpresa en sus ojos pero mas que nada felices. Creo que ya no era sopresa que le estaba dando una oportunidad a Robert.

Robert y yo nos sentamos y así comenzamos a charlar.

La noche paso lenta pero cada segundo que pasaba era un placer. La comida estaba exquisita, las personas eran muy amables y la musica era tan contagiosa que no había parado de bailar a lo largo de la noche. Había bailado con cada uno de mis hermanos, fue con Robert con quien baile mas y debo admitir que quedé sorprendida ante su agilidad para eso, incluso había bailado con howland pero también tuve la oportunidad de bailar con el joven jamie lannister.

En estos momentos estaba bailando con él mismísimo oberyn martell, hermano de la princesa elia. Este hombre era apuesto y podias ver que su apariencia dorniense era cautivadora, ojos negros, piel tostada y tenia una sonrisa de ensueño. Oberyn me hacia girar al ritmo de la musica mientras reíamos como locos, todos en la pista estaban igual, al final este me elevo en los aires y al caer la canción terminó.

Todos los que bailaban comenzaron a aplaudir.

—Cielos lady Lyanna para ser norteña tiene buenos pies a la hora del baile— hablo oberyn mirándome con una sonrisa.

Rei ante su comentario y después respondí.

— Muchas gracias mi señor —  contesté feliz.

Oberyn me tomó de la mano y me escoltó hacia mi mesa, una vez que llegamos se despidió depositando un beso en mi mano, le sonrió y camino perdiéndose entre la gente.

Llegué y me senté entre Robert y Benjen. Pude notar que Robert y brandon habían estado abusando del vino, reí al ver sus estados.

Cuando me senté Robert me envolvió con su brazo y recargó su cabeza en mi hombro, sintiendo que ya me estaba acostumbrando a esto no me incómodo.

Varios sirvientes comenzaron a acomodar la pista de baile y acercaron un arpa en medio de esta, miré curiosa lo que hacian hasta que terminaron y poco después un joven de intensos ojos violeta y cabello platinado se acercó y se sentó en frente.

El joven que reconocí como el príncipe de rocadragon se sentó y comenzó a tocar llamado la atención de todos los presentes. La hermosa melodía me envolvió y sentí como esa triste canción me estaba llegando al corazón. Los finos dedos de Rhaegar Targaeryen se deslizaban sobre él arpa creando así la canción mas melancólica que alguna vez escuché.
Me sorprendió ver al príncipe y tan talentoso.

Cuando Rhaegar terminó todo él salón  se inundo de aplausos y yo no pude evitar levantarme y aplaudir. Hasta ese momento noté que estaba llorando, aunque estábamos lejos él príncipe y yo cruzamos miradas y algo en mi se sacudió.

Sus ojos violeta chocaron con los mios y mi corazón latió desbocado, mi cuerpo entero pareció recibir una descarga eléctrica y mis piernas me amenazaron con hacerme caer. Esta reacción me sorprendió ya que nunca nadie me había hecho sentir eso y lo que me intrigó fue que él con solo una mirada lo logró.

Me sentí nerviosa ante su potente mirada que no había apartado de mi y con una inclinación de cabeza le mostré mi respeto, él hizo lo mismo y sin mas se retiro del centro del salón.

—Lyanna demonios por que lloras solo era una canción — escuche que benjen se burlo cuando tome asiento y me limpiaba las lágrimas.

Fulmine a mi hermano y sin pensarlo mucho le tire una copa de vino en la cabeza.

Brabrandon, Robert, howland e incluso Ned soltaron una sonora carcajada.

Benjen me fulminó pero yo lo ignoré ya que solo tenia en mente unos ojos violeta.

...

¡Capitulo nuevo!
Voten y comenten mis amores.
Las amo
💜

A Song Of Ice And Fire | Rhaegar&LyannaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora