Latidos de un ángel

Superándote parte 1

era el día siguiente, como me lo temía, era el momento de mi contra-marcha, me dirigí al baño por si acaso, pero esta vez no fué tanto como la otra vez, solo sentí que mi parte de mi pierna izquierda se quemaba ¿será porque hace poco pasó la primera rompe-promesa?

-hola hermanita-me dice rukawa, mirándome desde su cama

-hola...-le respondí, me puse a pensar en lo que ocurrió ayer, hanamichi había terminado de romper mis sentimientos hacia él, gracias que marco llegó justo cuando necesitaba de alguien

-pasa algo?-pregunta mi hermano, demonios...tendría que empezar con mi show

-no, nada,solamente es que pensaba en los resultados de los exámenes

-ja! la vieja confiable

-no me crees?!- no recordé que utilicé eso mismo un día...en el que hananne estaba llegando a su fin

-ok, te creeré-dice mi hermano

-ya, si me disculpas iré al baño a lavarme los dientes y la cara, tú prepara el desa...-fuí interrumpida por un abrazo de mi hermano-....¡qué demonios te pasa idiota!

-qué! no puedo darle un abrazo a mi hermana favorita

-punto uno: nunca muestras gestos cariñosos como ese, punto dos: soy tu única hermana-le dije, mientras de contaba con los dedos el punto uno y dos

-si es verdad-dice él, tocando la parte de atrás de su cabeza

-ya, no me atrases-le dije, mientras entraba al baño, mi actuación acabó, de nuevo empecé a recordar los momento en que estuve con hanamichi, solo atino a llevarme mis manos a la cara, -¡mierda! ¡por qué sigues en mi mente! ¡como me fijé en alguien como tú!-pensaba, mientras me dejé caer en el suelo del baño...solo quería que se alejara de una vez...que me dejara en paz, y que estos 3 años de pena se fueran para siempre.

*luego me acerqué una silla al escritorio de mi hermano para que pudiéramos conversar*

-que piensas hacer hoy?-me preguntó mi hermano, mientras tomaba su pan tostado con mantequilla

-no lo sé, quizás me la pase encerrada aquí-le dije, para luego tomar mi café

-ah, yo iré donde los uchiha, creí que me querías acompañar-en ese momento, paré de tomar café y abrí los ojos

-no! obviamente no te acompañaré

-por qué?! yo creía que eran tus amigos, como te llevaste un tiempo genial con hanamichi incluso cuando ya no eran nada

-cállate y véte!- él ya estaba listo para irse, entonces solo llegué, tomé su celular y lo empujé hasta la puerta

-qué dije! sólo daba mi opinión de que tú y hanamichi...

-no me hables de ese imbécil!-inmediatamente le cerré la puerta en la cara, estaba furiosa, pero al mismo tiempo triste...no era fácil hablar de él en esos momentos

-hermana...-oigo sus pasos alejarse, quedé completamente sola de nuevo, me tiré al piso, empecé a mirar el techo...y recordé su voz hablándome...su mirada tan linda...esos labios perfectos...pero él ya no era mío, yo quería que se fuera de mi mente, ni siquiera verlo en pintura, otra vez lloré en silencio

-por qué...se me tiene que hacer tan difícil olvidarte?...porqué aún te necesito?...solo fui un pequeño capricho creado en tu corazón.

-nadie vendrá a salvarte-me dije en voz alta, mientras lloraba aún en el piso,sentí que alguien me abrazaba por detrás, pero no había nadie-si fueras tú papá, eso no me ayuda-me fui a mi cama, en donde esta vez no sentí nada de abrazo, volvía a preguntarme lo mismo una y otra vez...hasta que dormí, esperando y anhelando que al despertar ya no lo recordara más...pero sería imposible.