Capítulo 11.-

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Casi media hora después de que le enviara un mensaje a Tyler sentí pasos cerca y casi al mismo tiempo la luz de una linterna sobre mí. Los pasos se apresuraron y su voz agitada hizo que quisiera llorar.

-Dios... Alex ¿estás bien? ¿Qué ocurrió?

Me quedé en silencio mientras él ponía su chaqueta sobre mis hombros y parpadeé cuando insistió.

-¿Estabas con alguien?

-¿Puedes sólo llevarme a casa? Por favor. –su mirada confusa me hiso sentir incómoda y el pareció entenderlo, así que desvió la mirada y asintió.

Cuando salimos del bosque el camino se hizo largo, Tyler no puso música en la radio del auto como acostumbra y sentí su mirada sobre mí casi todo el tiempo, ya fuera de mi casa bajó del auto antes que yo y me abrió la puerta, indicando con la cabeza que bajara.

-¿Vas a decirme que ocurrió?

-No.

-¿No? Estabas sola en el bosque, de noche. Tú nunca vas al bosque ¿Qué ocurre contigo? ¿Y quién te dejó ahí? Alex, yo...

-Cállate ¿quieres? No eres mi padre.

-¡Trato de entender lo que te ocurre!

Me llevé una mano al rostro y gemí, ni siquiera yo estaba segura de lo que me ocurría, ni de lo que le ocurría a Josh pero Tyler no podía saberlo, no podía saber nada, no por ahora.

-Mi madre va a oírnos, baja la voz, joder...

-Alex...

-Lo siento ¿sí? –me acerqué a él y lo abracé, respondió al gesto algo confundido y suspiró en mi cabello, relajándose.

-¿Estarás bien?

-Sí.

-¿Quieres que le hable de esto a Jenna? –preguntó luego de unos segundos.

-La llamaré mañana, es viernes de películas ¿recuerdas?

-Bien.

-Gracias, TyJo.

***

La música de MTV no era suficiente para sacármelo de a cabeza, así que apagué el televisor y anhelé los días en los que ponían buena música en la TV. Tomé mi teléfono y revisé los últimos mensajes. Diez sin leer de mi padre, uno de Jenna diciendo que ya viene y uno de Brendon preguntándome cuando iré a visitarlo.

Suspiré, recostada en la cama, mientras mi vista vagaba por los rincones más recónditos del techo. Había pasado muchas tardes así, la mayoría con Brendon y me di cuenta de que hace mucho tiempo no estaba tan sola, sí, así me sentía, con una especie de vacío que no sabía cómo llenar. Me asustaba que Josh fuera la causa, me asustaba haberme involucrado lo suficiente como para que me incomodara tanto la situación y no podía dejar de preguntarme si el estaba sintiendo algo parecido.

Me sobresalté cuando mi teléfono vibró en mi estómago y contesté sin fijarme en el nombre en la pantalla.

-Los Angeles es tan grande pero mi departamento es tan pequeño, a penas cae el piano ¿y sabes cuánto me cobraron por trasladarlo hasta aquí? Joder Alex, quedé en banca rota. –dijo Brendon del otro lado de la línea.

-Creo que te extraño. –murmuré sin prestar atención a lo que acababa de decir, su voz había abierto un par de grietas ¿qué tan necesario es tener una pareja en estos días? ¿por qué no podemos ser felices en soledad?

-Suenas como si estuvieras en la mierda.

-Le dije a Josh que me gustaba.

-Vaya... -el suspiró largamente. –Eso sí lo veía venir.

-Me dejó sola en el bosque.

-Que hijo de puta.

-¿Crees que se me pase?

-Espera ¿de que estamos hablando? ¿estás... enamorada de él?

-No.

-¿Eso es un sí disfrazado de un "no quiero admitirlo porque me lo advirtieron"?

-Es no disfrazado de un "no lo sé, espero que no"

-Sé cuidadosa, Alex... estas cosas, son extrañas.

-Lo sé.

-Supongo que soy el único que lo sabe.

-Bueno... Jenna está viniendo. –el sonido de un motor anunció la llegada y me asomé a la ventana para verla despedirse de Tyler y luego entrar a mi casa. Ví a Josh en el asiento del copiloto, parecía normal, con sus lentes de sol y la gorra hacia atrás, neutro, su vista en el teléfono. Apuesto a que fingió que no sabe dónde vivo. –De hecho, acaba de llegar.

-Hablamos luego ¿sí? Te llamaré.

-Adiós.

Cuando Jenna entró dejó caer su bolso sobre mi escritorio y se quitó la gafas de sol, masticando un chicle se acercó hacia mi y negó con la cabeza mientras se cruzaba de brazos.

-Sé que todo esto es por Josh y sé que se acostaban, así que dime que fue lo que hizo porque yo misma iré a golpearlo y no me importará lo que piense Tyler.

-Fue mi culpa.

The Run And Go [Josh Dun Fic]Where stories live. Discover now