Mensajes; camren

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[Advertencia: Contenido explícito]
N/A: Al fin tienen lo que tanto me estuvieron pidiendo, no sean muy malas conmigo, nunca he sido buena con el smut.
Que lo disfruten...

—Camz—escuché a mi novia llamarme desde el baño
—¿Qué sucede, cariño?—le pregunte sin quitar la vista de mi Mac, había quedado con mi hermanita que yo me encargaría de diseñar las invitaciones para su fiesta de cumpleaños, podría haber simplemente pagado y decir que yo las hice, pero no quería fallarle a Sofía.

Escuche como Lauren cerró la puerta del baño cuando salió pero seguí sin moverme.

—Necesito atención—se quejó. Levante la mirada y me encontré con ese cuerpo que tanto me fascina en un conjunto diminuto de encaje rosa palo
—En un segundo, mi amor, de verdad necesito terminar con esto

La escuché suspirar y seguí trabajando en la laptop, sentí como la cama se hundía indicando que la ojiverde estaba ahí.

—¿Daddy?—susurró en voz baja e inocente

Sentí cómo una ola de placer recorría mi cuerpo simplemente escuchándola llamarme de tal manera. Al verla casi se me salen los ojos del rostro.

Mi princesa estaba en cuatro con el trasero alzado en mi dirección y lo meneaba suavemente.

Deje la computadora en el suelo e inmediatamente me incliné sobre mi novia acariciando su cuerpo.

—Siempre consigues lo que quieres, bebé , ¿no es así?—murmuré en su oído antes de dejar un húmedo beso en el lugar—Eres una pequeña niña mimada, ¿verdad?

Asintió con rapidez y dejó escapar un gemido cuando tomé su tanga y la moví contra su centro.

—Hiciste que dejara de lado mis responsabilidades por esto, necesitas hacer que valga la pena, kitten—con cuidado la ayude a ponerse únicamente sobre sus rodillas en la cama—Basta de ser mala, ¿vas a ser una niña buena para mi?

Con fuerza palmeé sus dos nalgas atrayéndola más hacia mi y robándole un fuerte gemido.

—Si—jadeo
—¿Si, babygirl?—alcé una ceja mirándola a los ojos
—Si, daddy—sonrió coqueta y pasó sus brazos por mi cuello para besarme con ansiedad—Hazlo de nuevo

Gruñí de placer.

—¿Disfrutas cuando te golpeo?—pregunte haciendo lo que me pidió; mi pequeña asintió ahogando su gemido en mi cuello. La empuje con rudeza sobre la cama haciéndola caer sobre su espalda
—Mucho, daddy—jadeo al sentir como el aire acondicionado de la habitación golpeaba su coño desnudo cuando me deshice de sus bragas

La obligue a abrir más piernas, lo más separadas que pudiera y di un par de palmadas con las yemas de mis dedos sobre su zona más sensible, haciendo que se retorciera un poco en la cama y cerrara los ojos.

—Disfrutas mucho siendo mi babygirl, ¿cierto?, te fascina cuando te someto, ¿no es así?

No pudo contestar más que con un jadeo seguido de un gemido cuando mordí su pezón por encima de su bralette, sin despegar mis labios de su cuello le quite la última pieza que me impedía tenerla completamente desnuda para mi.

—Te voy a hacer sentir muy bien, princesa—tomó mi rostro entre sus manos y me dio un beso desesperado
—Haz algo, por favor—rodeó mi cintura con sus piernas y pude sentir su humedad contra mi abdomen cuando se engancho a mí comenzando a frotarse—Camz, daddy

Deje que continuará frotándose contra mi abdomen y sentí como sus uñas se clavaban en mi espalda, seguramente dejándome marcas que mis outfits de escenario no podrán ocultar.

—Eres tan sexy—con rapidez hice que desenredara sus piernas de mi torso y coloque mis caderas sobre las suyas sacando un suspiro de aprobación—Tan jodidamente caliente, usándome para llegar a tu orgasmo
—Follame—gimió contra mi boca—Ahora
—Tsk, tsk, tsk, señorita, ¿a caso olvidaste quien toma las decisiones aquí?—mantuve sus caderas pegadas a la cama privándola de cualquier contacto que pudiera brindarle placer—Ya te perdone que me distrajeras de mis responsabilidades, dos no puedo, no quiero mal acostumbrarte y que te conviertas en una grosera rebelde

Me hizo sus ojitos de cachorro y sonrío inocentemente.

—Lo siento mucho, daddy—me miró directamente a los ojos y flaquee por un segundo
—Y lo vas a sentir aún más, princesa—besé su boca un par de veces—Ahora, boca abajo sobre mi regazo, ¡ya!

Me obedeció de inmediato haciéndome sentir un inmenso placer al verla en esa posición para mi.

—Van a ser solamente cinco en cada una, mi amor, y quiero que los cuentes en voz alta—le hablé con voz autoritaria—¿Entendido?
—No voy a soportarlo sin correrme—dijo sonrojada por la vergüenza

Pasé dos dedos entre sus pliegues y me reí roncamente al notar su excesiva humedad.

—Inténtalo, sino lo consigues tienes todo mi permiso de correrte, con la única condición de que seas muy ruidosa y grites mi nombre

Normalmente no soy así con ella en la cama, pero hoy ha estado provocándome durante todo el día, en los momentos menos indicados y quiero que todos en el hotel se enteren lo mucho que disfruta conmigo, sobretodo quiero que ciertos bailarines que la miraban de más en la piscina, se enteren.

Pase mi mano por su tersa nalga antes de darle una fuerte pasmada, dio un gritito antes de jadear su conteo.
Intercale entre cada cachete dejándole ambos rojos y con mi mano pintada, no pude evitar moverme hasta alcanzar mi celular y tomar una foto, sé que a ella no le molesta.

—Camz—lloriqueo—Por favor
—¿Qué necesitas, babygirl?—ahora estaba sentada a horcadas sobre mi regazo—Pídemelo de buen modo y haré lo que tú quieras

Seguí acariciando y apretando su trasero con ambas manos, tratando de hacer que se fuera todo el dolor que pude haberle causado en la zona, colé una de mis manos entre sus piernas y sólo bastó con pasar mi dedo entre sus pliegues una vez para que se corriera a gritos sobre mi mano.
Todo su cuerpo temblaba y no pudo sostener más su peso apoyándose completamente sobre mi.

—Si que estabas sensible, hermosa—acaricie su espalda haciéndole cariños mientras ella seguía perdida en su orgasmo—¿Crees poder aguantar un par de orgasmos más?
—Todos los que quieras, daddy

Continuará...