Capitulo 8

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SETH

Cuando al fin terminaron las clases, me encaminé al estacionamiento para buscar a Jake y poder irnos, como aun no salía fui hasta su camioneta y me recargué en ella.
Unos minutos después salió apresurado mientras mirada su teléfono.

- Nessie está esperando, ¿verdad? – le pregunte mientras subíamos a la camioneta.

- Si, dice que si no llego lo más rápido posible estará muy molesta – dijo poniéndose el cinturón; encendió el auto y salimos rápidamente del estacionamiento.

Al llegar vimos que aún no salían, y me reí por la cara que puso Jake al ver esto.

- Si ni lligis ripidi ti mitiri jiki – Imito mi amigo a su novia mientras bufaba y salía de la camioneta para recostarse en esta.

Baje de igual manera y camine hacia donde estaba aún riéndome.

- Dijo que iba a venir con una amiga, ¿cierto? – le pregunte entre risas poniéndome frente a el.

- Eso me dijo, iban a hacer una tarea – cuando termino de responder sonó el timbre que indicaba la salida; voltee un poco para ver la entrada y hay estaba Nessie con una chica, vi que conversaron algo para que luego la chica se vaya en otra dirección siendo Nessie la única que venia hacia nosotros.

- Chicos, llegaron a tiempo – dijo con una sonrisa cuando estuvo frente a nosotros.

- Graciosa, salí literalmente volando de mi escuela – dijo Jake con un puchero mirando a su novia.

- No quería que llegues tarde y me dejes mal frente a mi amiga – dice acercándose a Jake para abrazarlo.

- Hola – escuche una voz detrás de mi haciendo que me voltee, encontrandonme con una chica hermosa.

- Bueno Annette te quiero presentar a Seth, Seth ella es Annette -  y una vez que la vi a los ojos lo supe.

Al ver esos ojos marrones todo se detuvo para mí por un momento, vi como todas las cuerdas que me ataban a mi existencia se cortaban rápidamente, todo lo que me había hecho ser como era, el amor por mi familia, la lealtad hacia mi manada, el amor hacia mis hermanos se cortaba.
Pero yo no flotaba a la deriva.
Una nueva cuerda me ataba a mi posición. Y no solo una, sino un millón, y no eran cuerdas, sino cables de acero; un millón de cables de acero me fijaban al mismísimo centro del universo.
La gravedad de la Tierra ya no me ataba al suelo, lo que ahora hacía que tuviera los pies en el suelo era la bella chica que estaba frente a mí, Annette.

Con un carraspeo salgo de mi ensoñación con un sonrojo, miro a la pelinegra que se encuentra frente que estaba sonriéndome mientras estiraba su mano hacia mí.

– Annette Bianco, un gusto – con nerviosismo le devolví el saludo

– S-Seth Cle-Clearwater, i-igual.

– Vaya, ¿Quién diría que Seth puede tartamudear? – se burló Jacob entre risas.

Y Nessie estaba que igual el, burlándose de penoso intento al presentarme a mi alma gemela, subimos todos a la camioneta, dirigiéndonos a la casa de los Cullen; pero antes de salir del estacionamiento Jacob me vio por el retrovisor con una media sonrisa.

– Pareces un tomatito, Seth – y con ese comentario Nessie se soltó a reír junto a mi amigo y lo más vergonzoso fue que Annette también estaba que se reía.

– Idiota – le dije tapándome el rostro mientras sus carcajadas aumentaban.

ANNETTE

Durante el camino a la casa – al parar de reírnos por las tiernas reacciones de Seth –conversamos tranquilamente de cosas de la escuela; sin embargo, se nos quedó corto el tiempo o al menos eso me pareció a mí.

•il Protettore•                                                 Seth ClearwaterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora