Capitulo 8

1.7K 31 7
                                    

Un susto detrás de otro.

Narra Daniel

Marina seguía en coma, llevábamos mas de media hora ahí, y seguía en coma. Entro su tio por la puerta, y nos pregunto que tal estaba.

Jesús: Esta bien, nos ha dicho el médico que se despertara pronto.

tio: Muy bien, y gracias por cuidarla. Me tengo que ir otra semana mas por asuntos de trabajo, decídselo cuando despierte, y... cuidadmela bien.

Y se fue. Nos quedamos con Marina hasta las cinco y media, hasta que decidimos llamar a los demás y avisarles que hoy no podríamos quedar.

*Llamada telefónica*

Rebeca: ¿Si?

Daniel: Hola Rebeca. Hoy no podemos quedar, y Marina tampoco. Estamos en el hospital.

Rebeca: ¿¡¿¡Que a pasado!?!?

Daniel: Marina esta ingresada porque....

Se lo conté todo en menos de tres minutos.

Rebeca: ¡Hay mi niña! Vamos en diez minutos.

*Fin de la llamada*

Y tal y como dijo vinieron todos en diez minutos.

Rebeca: Mi niña... Pobrecita.

Álvaro: Pobre angelito.

Todos: .....

Se quedaron un rato pero se fueron porque iban a la piscina o no se que. Y a las siete...

Marina: ¿Que a pasado?

Jesús: Guapetona, te a dado un bajón de azúcar y has estado en coma desde las dos.

Daniel: Princesa, ha venido tu tio a verte y nos a dicho que se va otra semana mas por asuntos de trabajo.

Marina: Gracias por traerme mis niños, ¿os quedais a dormir conmigo?

Daniel: Pues...si.

No teníamos ni cama ni nada, sólo una silla plegable, y  para no pelearnos por ella, dormimos en el suelo.

Marina: ¿Seguro que estáis bien?

Jesús: Si, y no te preocupes por nosotros, ahora duermete.

Marina:  ¡Pero si e dormido todo el día! Los que tendrían que descansar sois vosotros, que habéis estado todo el día cuidando de mi. Estaréis agotados.

Daniel: No, no estamos cansados.

Marina: No se si os lo e dicho, pero la juventud de ahora ya no miente como antes.

Reímos. Lo dijo como si fuera la típica abuelita de película que le esta contando a sus nietos una historia.

Jesús: Ni que tuvieras setenta años.

Marina: Bueno, no me comas...

Reímos. Esa expresión siempre nos hacia mucha gracia.

Marina: Bueno... a dormir ya eh...

Y con unas mantas, unos cojines y unas almohadas nos hicimos dos pequeñas camas en las que dormimos  toda la noche, algo incómodos, pero lo hacíamos por cuidar a nuestra princesa.

***

Narra Marina

Al día siguiente me desperté a las diez, muy pronto para mi gusto, y me puse a desayunar. Mis dos angelitos seguían dormiditos, y de repente entro la enfermera y se levantaron de golpe.

Enfermera: Marina, ya te hemos regulado el azúcar, ahora te pasas por recepción y te damos el alta. Terminate rápido el desayuno.

Y tal y como había llegado se fue. Me puse muy contenta de poder salir ya de esa especie de 'cárcel', tal y como yo la llamaba y poder salir otra vez a la calle. Termine muy rápido el desayuno y recogí todo lo que tenia ahí. Me vestí con una falda de tubo roja, una camiseta blanca de tirantes con un lazo rojo dibujado en grande en el tirante derecho, y unas sandalias rojas. Me peine con algo normal, no me apetecía estar media hora para peinarme, así que me hice una coleta alta y listo.

Al llegar a recepción me dijeron...pues lo mismo que cuando me diagnosticaron diabetes: haz mucho ejercicio, come lo que necesitas, no comas dulces... Esto ultimo se sobreentiende, pero parece que la chica pensaba después de hablar porque al instante se tapó la boca. A mi, personalmente, no me importa, nadie nace enseñado ¿no?

Salimos del hospital con trescientos papeles, y llegamos a mi casa, subí a mi cuarto y lo recogí un poco. Al bajar al salón, vi otra nota de mi tio. Decía algo así:

'Marina, lo siento pero me voy otra semana mas por asuntos de trabajo. Te e dejado mas dinero donde siempre, y hoy e hecho la compra. Un beso y cuidate.'

Me pareció algo extraño que mi tio se fuera tanto tiempo, pero no le di importancia. Quedamos todos en el parque y se alegraron mucho de verme bien. Luego fuimos al centro comercial a dar una vuelta, a ver tiendas y mas tarde al cine.

Los note a todos algo tensos a medida que pasaba el tiempo. Me di cuenta de que todo el grupo miraba a otro de chicas, como no, unas pijas que tienen que llamar la atención de alguna forma.

Marina: ¿Quienes son esas?

Daniel: Nah... las pijas del instituto, no merece la pena presentartelas.

Lara: Las conocerás según empiecen las clases, en cuanto ven a un chica mas guapa que ellas, o una chica nueva, se ponen de los nervios. No soportan no llamar la atención de los chicos...

Paula: Te harán la vida imposible...

Marina: Anda y que les den. No corre prisa para conocerlas.

Carlos: Bien dicho.

Pasamos toda la tarde como siempre: broma, risa, broma, broma, silencio incomodo, carcajadas, risas, risas... lo típico. Casi cuando nos íbamos a ir me sonó el teléfono y..

Marina: ¿Si?...Si tio estoy con ellos... ¡¿¡¿COMO?!?!

Se me inundaron los ojos de lágrimas y salí corriendo...

Narra Jesús

Marina no llego a colgar, tenia los ojos llenos de lágrimas y echo a correr... No la encontrábamos, así que nos dividimos. Oí a alguien llorar en un banco y era ella.

Jesús: ¿Que te pasa guapetona?

Marina: Lo peor del mundo Jesús, lo peor... les ha pasado una cosa terrible a mi padres...

No paraba de llorar, es mas, cada vez lloraba mucho mas...

Jesús: ¿Que les ha pasado?

Levanto la mirada, tenia lo ojos rojos y las mejillas húmedas...

Marina: S-se...

------------------------------------------------------------------------------------------

Hola de nuevo!

¿Que creéis que les a pasado a los padres de Marina?¿Ese grupo de chicas, sera tan malo como ellos dicen? y si es así ¿como lo pagaran con Marina? Ahí os dejo con la intriga.

P.D.:

También recomiendo la novela 'iguales pero solo uno' y si queréis que haga una maratón por semana santa, solo tenéis que poner en los comentarios 'maratón' y si  queréis vuestro comentario. Tenéis que llegar a los 35 comentarios con la palabra 'maratón' como mínimo.

De aqui a la luna, ida y vuelta en triciclo (GEMELIERS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora