Dulce Venganza

Pésimo despertar

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:D

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Leves gruñidos salían de su garganta, sentía la cabeza un poco pesada, como si estuviera experimentando la sensación de vértigo, aun con los ojos cerrados sentía levemente como la habitación daba vueltas, más todo paso rápidamente... el malestar seguía, pero era algo soportable, lo que no aguantaba más era el insistente hormigueo en su brazo, sentía un peso extra sobre este, se movía un poco pero aquel peso se negaba a liberarlo.

Lentamente fue abriendo los ojos, espero un poco a que su visión adormilada dejara de ser nublosa hasta que todo comenzó a tomar forma... mechones de cabello marrón apenas dejaban ver un par de ojos cerrados con espesas pestañas, apenas le podía sentir respirar contra el cuello... hasta ese momento fue consciente de su abrazo alrededor de su cintura y como si ella fuera fuego le soltó rápidamente.

-¡¿QUE DEMONIOS HACES AQUÍ?!- Roxan despertó de inmediato a causa del grito, ambos pares de ojos se encontraron, unos verdes que irradiaban fuego y los de ella confundida.

Los recuerdos de la noche anterior y su extraña y ridícula pelea con el familiar de Ezarel le hicieron recordar cierto detalle, por lo cual instintivamente comenzó a manotear contra de él hasta caer al lado contrario de la cama.

- ¡EZAREL!

- ¡Te hice una pregunta! ¿Qué haces aquí? - pregunto realmente enfadado, ella apenas y podía pronunciar una ligera "a" - ¡HABLA!

-R-realmente...-musito, Ezarel soltó un gruñido en muestra de impaciencia, nunca lo había visto tan enfadado y aun que estaba lejos de darle miedo la ponía algo nerviosa. - ¿N-no recuerdas lo que paso?

Ezarel relajo sus facciones un par de segundos ¿Paso? ¿Qué debía de pasar? La molestia se plasmó en su cara nuevamente, le dio la espalda, entonces observo el desastre, frascos que debían estar en la cómoda tirados, su ropa desordena y regada por la habitación, algo parecido a un vestido roto en el suelo, sintió un frio en la espalda, algo aturdido se giró a ver a Roxan quien le daba la espalda, ella tenía marcas de arañazos en los costados, brazos y piernas.

-¡¿Qué carajos paso?!

Mientras que Roxan le daba la espalda, esbozo una gran sonrisa, al parecer había caído en la trampa. Lentamente fue girándose por acto reflejo tomo una de las sabanas para cubrirse.

- ¡Lo que vez que paso! - grito ella.

- Pero ¡¿cómo?! Yo nunca... y tu... ¡¿Qué?! ¿Por qué dejaste que pasara?

- ¡No lo sé! ¿Feliz?... anoche cuando te fuiste yo me quedé un rato más y... regresaste pediste un trago y comenzaste a hablar de las torturas que me esperan ahora por perder contigo, fui por un trago y después, no se creó siguieron otros y otros y... lo último que recuerdo fue que nos reíamos mientras caminábamos pro el pasillo.

Ezarel gruño nuevamente esta vez llevándose las manos a la cara intentaba recordar, pero nada, nada aparecía por su mente, solo el hecho de entrar sumamente cansado a su habitación. Roxan ya no aguantaba más quería reír, y sobre todo quería dejar de estar solo en ropa interior, tal vez la broma no fue tal cual la ideo, pero ahora se veía que el elfo estaba sufriendo por la falta de recuerdos, rápidamente fue a por su vestido para vestirse, pero este estaba casi hecho girones, ese familiar tenía garras muy afiladas... ¡El vestido fue un regalo de Ykhar! Sentía pena por su estado actual

-Dame eso. - de un solo movimiento le quito el vestido de las manos.

- ¿Y que? ¿pretendes que me vaya a mi habitación en ropa interior? - sin que él dijera nada se encamino hasta su armario de donde salió su familiar, este al ver a la humana quiso írsele encima como la vez anterior, por mero instinto, Roxan retrocedió hasta que su espalda quedo contra la pared esperando poder traspasarla o algo.