Luego de la muerte de Kate Argent, nuestros protagonistas creyeron que vivir en Beacon Hills sería más fácil y solo tendrían que lidiar con nuevos Betas en la manada. Pero estaban equivocados. Una nueva amenaza aparecerá para poner de cabeza la vida...
-Lo perdimos.- Gruñó Derek, deteniendo sus pasos al igual que Destiny, quien lo seguía tan solo pocos metros atrás.
-Detesto a ese lagarto.- Se quejó ella, pero detuvo lo que iba a decir cuando Jackson reaparecía a unos metros.- ¡Detrás tuyo!- Advirtió ella, apuntando al Kanima con su pistola.
Derek se lanzó hacia él, comenzando a pelear. Pero, luego de unos minutos, el Kanima lo estampó contra una columna, por lo que Destiny se acercó a ellos, tomando a la criatura del cuello y tirando hacia atrás para alejarlo de Derek, pero ella resultó ser arrojada lejos gracias a un golpe por parte de Jackson.
El pelinegro gruñó con fuerza, golpeándolo con la puerta de un vehículo que se encontraba cerca de ellos. Destiny regresó a la pelea, pero incluso siendo dos contra uno, estaba claro que perderían.
Un auto frenó cerca del Kanima, por lo que Derek y Destiny aprovecharon para esconderse de él y los cazadores que salían del vehículo. Chris Argent no tardó en vaciar un cargador en el Kanima, que cayó al suelo como si finalmente estuviera muerto, lo que le dió la oportunidad al hombre de revisar el lugar con la mirada.
Gracias a ello, se vio distraído y Jackson lo atacó por detrás, arrojándolo también contra una columna mientras Gerard bajaba del auto y lo observaba con intensidad hasta que esté escapó. Scott llegó a la escena justo para ver al hombre con curiosidad a la vez que Destiny y Derek perseguían al Kanima hasta una discoteca.
-¿De vuelta a los viejos tiempos, eh?- Bromeó ella, sacándole una ligera risa a su amigo.
-Vamos, tenemos que encontrar a Jackson antes que mate a alguien más.- Destiny asintió y ambos ingresaron al club.
-¿Lo ves por alguna... parte?- Preguntó Derek con lentitud al ver que un par de chicos lo miraban más de la cuenta.
-No, pero te acabo de conseguir como cinco citas.- Volvió a bromear ella, intentando aguantar la carcajada que amenazaba con salir ante la mirada de su amigo, quien protestó con un bufido.-Tenemos un problema.-
-¿Además de Jackson?-
-Stiles y Scott están aquí.- Derek la miró confundido, por lo que ella tomó su rostro con una mano y lo giró en dirección de los adolescentes que parecían separarse.
-Ve con Stiles, acabo de encontrar a Jackson.- Destiny asintió no muy convencida y, con dificultad, se abrió paso entre los chicos que bailaban, dirigiéndose a su hermano.
-Stiles, vámonos.- Ordenó ella, tomando el brazo del aludido.
-¿Des?-
-Tenemos que salir. Vamos.- Stiles dejó que su hermana lo guiara hacia fuera.-¿Dónde está Jackson?-
-No...- Stiles se interrumpió a sí mismo cuando notó un rastro de sangre oscura en el suelo. Los hermanos siguieron la mancha hasta llegar a un Jackson inconsciente y a un Scott mirándolo con miedo.
-¿Ahora qué hacemos con él?-
-Lo matamos.- Destiny apuntó al adolescente con su arma, pero Scott se apresuró a pararse en medio.- Scott, sal de mi camino.- El lobo negó con seriedad.
-No vamos a matarlo.-
-¡Si no lo hacemos él seguirá asesinando gente, Scott!-
-Podemos hacer algo más.- Destiny puso los ojos en blanco mientras guardaba su arma.
-Bien...- Entonces caminó hacia Scott.- Pero si Stiles llega a tener un pequeño rasguño no lo pensaré dos veces, ¿Entendido? Y, por favor, no pongas a Allison antes que a tu mejor amigo.- Susurró ella, lo suficiente como para que Stiles no pudiera escucharla.
Entonces, se alejó de ambos, dispuesta a encontrar al otro hombre lobo, que seguía en el interior del club, no sin antes dedicarle una sonrisa a su hermano.
[...]
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Luego de hablar con Stiles, que la mantenía al tanto de lo que pasaba con Jackson y el plan de Scott para mantenerlo seguro en una camioneta en medio del bosque, Destiny se acercó a los Betas que esperaban para mejorar sus nuevas habilidades.
-Seguiremos con el entrenamiento, espero que hayan descansado anoche.- Bromeó Destiny.
-Bien, comencemos.- Comenzó el Alfa.- Boyd.- El susodicho se preparó para entrenar contra el hombre lobo, pero este ganó con facilidad.
Isaac y Destiny los siguieron y, al igual que su mejor amigo, ella ganó fácilmente. Por último, Erica y Derek se prepararon después, obteniendo los mismos resultados.
-¿Cómo piensan enfrentarse a Jackson?- Les preguntó él.
-Quizás deberíamos demostrarles cómo se pelea.- Bromeó Destiny, dándole una idea a Derek.
-Tienes razón.-
El hombre lobo pateó la parte trasera de su rodilla, tirándola al suelo mientras soltaba un quejido de sorpresa.
-Pero no deberían tomar el ejemplo de tí. Siempre debes estar atento.- Agregó con una sonrisa socarrona que inmediatamente se transformó en una mueca cuando la chica se quejó y tomaba su pierna golpeada, como si le sucediera algo, lo que tuvo al lobo a su lado en menos de un segundo.
La humana aprovechó para tomar su brazo y tirarlo al suelo para después levantarse con agilidad y colocar un pie sobre su pecho, manteniéndolo en su lugar.
-Creo que no deberían tomarlo de tí, nunca pierdas la concentración y jamás confíes en tu enemigo.- Señaló ella con la misma sonrisa que había puesto Derek previamente, sacando una risa a los tres betas, quienes se mostraron más divertidos ante el gruñido de este.
Derek tiró de la pierna de Destiny, volviendo a tirarla al suelo a su lado. Ambos se pusieron de pie rápidamente y ella dio el primer golpe, pero falló. El hombre lobo la hizo retroceder de una patada en el estómago, pero ella se recuperó al instante, lanzando otro puñetazo a su rostro que esta vez no esquivó y aprovechó el momento para patear su costado.
Estuvieron peleando por varios minutos bajo la atenta mirada de los Betas. Isaac intentaba memorizar algunos movimientos, Erica disfrutaba ver a Derek perdiendo al final y Boyd solo los observaba sin esforzarse en recordar sus ataques.
Hasta que finalmente Destiny derribó al Alfa, quedando arrodillada a su lado mientras sostenía un cuchillo contra su garganta.
-Perdiste.- Dijo con la respiración entrecortada, ganando otro gruñido por su parte.
-¡Así se hace!- Festejó Erica, que solo quería molestar al mayor.
-Bien, ahora tú y Isaac pelearán y el que gane irá contra Boyd.-
Los Betas se quejaron por lo bajo, pero se prepararon de todas formas, lanzándose al ataque en conjunto.
