Secreto tras secreto.

25 2 2
                                    

-¿Eh? ¿Dónde estoy? ¿Por qué mi cuerpo está cubierto de sangre?- Me preguntaba en mi cabeza.

A a mi alrededor observaba mares de sangre... Mi sangre.

Sentía un dolor insoportable en todo mi cuerpo. Para cuando me di cuenta, mi cuerpo tenía multiples apuñaladas profundas.

A lo lejos sólo veía a mi madrastra... Con un cuchillo a la mano y mirándome con una sonrisa maligna.

-¡AH!- Grité.

Desperté en mi cama sudando y con la respiración agitada.

-¡Eh! ¿Qué pasa?- Dijo Ahn despertando a mi lado.

-¡AHHH! ¡¿QUÉ HACES AQUÍ?!- Dije pegando un brinco que me hizo caer de la cama.

-¿No recuerdas que te dije que no podía dormir solo?- Dijo aún adormilado.

Aghh... Es verdad, en la noche no me dejó huír, que mal.

Revisé todo mi cuerpo y las sábanas para saber si algo andaba mal... Como dije antes, virgen al matrimonio.

Me levanté del suelo y tomé mi uniforme que estaba en mi armario y me encerré en el baño.

-¡TE LO ADVIERTO MALDITO PERVERTIDO, NO ENTRES O TE MATO!- Le grité con miedo.

Me duché pensando en lo que había soñado, fue realmente raro, y la habitación me parecía muy familiar... ¿Qué podrá significar?

-¡Eh!, llevas mucho tiempo bañándote, sal de ahí mocosa. -Dijo algo ¿molesto? ¿burlándose? No lo sé.

Terminé de bañarme, me arreglé y salí.
Olía realmente bien, no sabía qué era, pero olía muy bien.

Me dirigí a la cocina que era de donde provenía el olor.

-¡Vaya! ¡Huele realmente bien! ¿Tú lo has cocinado? -Pregunté olfateando aún.
-Si, cuando era niño pasaba la mayor parte del tiempo solo, así que se convirtió en mi pasatiempo. -Dijo feliz.

Bueno, yo realmente pensaba que su único pasatiempo era hacerme sentir incómoda y molestarme...

-Siéntate, ya te he servido.- Dijo con una cálida sonrisa.
-Bueno, gracias.- Dije algo sorprendida.
Probé el primer bocado.
-¡Está riquísimo! Creo que éste es tu pago por quedarte a dormir aquí sin invitación.- Dije señalando a la comida.
-Si tenía invitación.- Dijo con una sonrisa de seguridad.
-¿Ah, sí? ¿De quién? -Dije retándolo.
-Pues la mía tontita, si alguien no te invita, invítate tú solo.- Dijo sonriendo y haciendo un gesto con las manos en señal de haber ganado.
-Hmph...-Gruñí.

Es verdad, ¿cómo es que ese bastardo sabe decir insultos en español? Tengo que averiguar más sobre él, me parece algo sospechoso que hable a la perfección español sin haber vivido en un país de habla hispana. Puede ser simple coincidencia, pero no se descarta de mis opciones y de mis sospechas con respecto al asesinato se mi padre.

Tal vez sabe algo que yo no sé...

Terminamos de desayunar y nos fuimos a la escuela.

-Ahhh... Que bien, ya es viernes. - Dije estirándome.
-Si, podemos hacer algo como ir al cine...- Dijo mientras yo lo interrumpía.
-Oh, no, ni pienses que voy a salir contigo.- Dije molesta.
-Tranquila, sólo bromeo, tengo cosas importantes que hacer. -Dijo con seriedad.
-¿Qué... Qué tipo de cosas?- Le dije con sospecha.
-Algunas... -Dijo tratando de evitar el tema.

Cuando llegamos, todos se nos quedaban viendo, era realmente incómodo. Veía cómo algunas chicas murmuraban y cómo otras me lanzaban miradas asesinas.

My dear princeUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum