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- Dime que es una broma.

Jimin miró a Jackson y éste le devolvió la mirada orgulloso.

- ¡Dime si no somos originales! - Exclamó mirando su disfraz de helado y a Jimin, que estaba disfrazado de cereza.

- ¿Por qué...? ¿Cómo...? - Jungkook dejó las palabras en el aire.

- Espera, todavía no viste la mejor parte. - Habló Jackson y le hizo señas a Jimin mientras se ponía de cuclillas, éste entendió las señas y atravesó sus piernas por los hombros de Jackson.

El rubio se levantó con Jimin en sus hombros y chilló de la emoción.

- ¡Una cereza en el helado!

El menor comenzó a reír, la imagen que sus ojos captaban era divertida: Un rubio musculoso vistiendo un disfraz de helado de crema, y en sus hombros cargaba a un tierno chico con sus mejillas del mismo color que su disfraz de cereza.

- Acéptalo, Jackson. Ganarán por la ternura de Jimin.

- ¿Por qué crees que lo hice mi pareja? - Guiñó su ojo y volvió a ponerse de cuclillas para que el pelinegro bajara.

Cuando Jungkook propuso entrar de una vez por todas al baile - debido a que se encontraban en el estacionamiento-, caminaron en silencio mientras Jimin observaba el disfraz que su amigo llevaba (estaba vestido como un personaje de anime del cual el pelinegro desconocía; solo sabía que su amigo llevaba un traje con moño rojo y sus típicos lentes de lectura) y notó que no parecía esperar a nadie.

- ¿No invitaste a Taehyung? - Preguntó formando una mueca de confusión en su rostro, Jungkook negó.

- No me atreví. - Confesó dejando soltar un largo suspiro.

Entraron dando su entrada a una chica de último grado que estaba en la puerta y rápidamente se fueron a sentar a una silla apartados de todos.

- Iré a inscribirnos. - Dijo Jackson refiriéndose al concurso.

Jimin asintió y cuando el rubio se fue miró a su amigo.

- Creí que no se podía venir sin pareja.

- No se podía, pero se dieron cuenta que iban a ganar más dinero dejando que vengan solos así que... ya sabes, estoy aquí. - Se encogió de hombros restándole importancia, el pelinegro asintió lentamente.

Su mirada viajó por todo el gimnasio y sintió su corazón detenerse al ver a Yoongi disfrazado de Naruto.

- Oh por Dios... Jungkook no mires a Yoongi. - Dijo preocupado y cubrió los ojos de su amigo, éste intentó quitar las manos del pelinegro. - ¡No! ¡Vas a enamorarte si lo ves! ¡No lo mires!

- Jimin, ¿te estás escuchando?

Avergonzado quitó las manos de los ojos de su amigo y le mostró una pequeña sonrisa.

- Lo siento. - Suspiró. - ¡Es que es tan hermoso! Parece irreal...

Miró embobado al chico que ahora se encontraba hablando con un círculo de chicos de su edad, y se alarmó cuando notó que había volteado a mirarlo.

- Ay no. - Miró a Jungkook. - Taehyung acaba de entrar, y mira con quien viene.

Jimin miró la puerta y pudo divisar a su amigo junto con su vecino, el mejor amigo de Yoongi.

Hizo una mueca mirando a su mejor amigo.

- Eres un tonto, tenías que haberlo invitado antes. - Se quejó con su ceño fruncido.

Jungkook asintió, sabiendo que las palabras del pelinegro eran ciertas.

Jackson miró a los dos chicos que se encontraban sentados y luego a los dos que estaban observando.

Y pensó que realmente aquellos chicos eran realmente ciegos para no darse cuenta a los adorables pequeños que tenían a sus pies.

Lo que Jackson no sabía era que Yoongi no era ningún ciego, solo estúpido.

de amores platónicos y baja autoestima [ym]Where stories live. Discover now