Prólogo

5.7K 199 22
                                    

Antes de empezar, recuerdo que esto es una SEGUNDA TEMPORADA por lo que si no os habéis leído la anterior (No te enamores de la apuesta) es probable que os confundáis un poco. Lo dejo a vuestra elección.

--------------------------

Han pasado dos meses desde que comencé este diario. La psicóloga me dijo que esto me ayudaría a desahogarme escribiendo mis pensamientos. Bueno, comienzo.

Algunas personas creen que todo en la vida es bonito.
Recuerdo de pequeña, cuando veía a mis padres abrazados y yo y mi primo correteando. Esos tiempos de ser niña son maravillosos.

Luego vas creciendo hasta convertirte en una adolescente quinceañera, donde ves todo del color de las rosas y te crees insuperable. Ves todo como si la vida fuera un juego, al que tu puedes manipular. Te crees invencible, cuando en realidad eres muy vulnerable.

Criticas a todo el mundo, ves a todos los chicos con los mismos ojos. "Todos son estúpidos"

Oh, si. Aquella época cuando le decías a tu madre que todos eran feos y no te interesaba ninguno para que confiara en ti y te deje salir por la calle en compañía de ellos. Esa época donde conoces a tus amigas y aprendes a seleccionarlas. No por capricho, sino por saber las que te hacen bien y las que te hacen mal. De tener diez amigas íntimas, pasas a tener sólo dos.

Parece como si todo estuviera atrás, en él pasado. A partir de esos quince años, comienzas una nueva etapa en tu vida, un nuevo comienzo.

Tus amigas comienzan a cambiar y a ir a fiestas. Tu no vas. Crees que los hombres no merecen tu atención.

Si alguno se te acerca, lo alejas. Si te besa descaradamente, le pegas. Si trata de enamorarte, pasas de él. Ya no tienes quince años, donde conocías a muchos chicos y te hacías amiga de ellos enseguida y competías con tus amigas, a ver quien besa más en una noche.
Aquellos tiempos se esfumaron.

Ahora tienes dieciocho, tienes responsabilidades, trabajas, sales, vas al instituto... Conoces al que será tu marido.
Todo te parece perfecto.
Cuando te enamoras no eres capaz de ver los errores de la otra persona.

A los veinte te casas con esa persona. Sientes que estas tres metros sobre él cielo.
Encuentras a tu "Hugo".
Eres feliz por un tiempo. Él te llena de alegría. Es capaz de tenerte en él cielo o bajo tierra con tan solo una mirada.

Pero como la película, no todo tiene un final feliz. Al final la pareja se separa por los propios errores de cada uno.
Eso pasa llegados a este punto.

Larwen y yo nos separamos hace ya tres meses. Ninguno de los dos presentó los papeles del divorcio, así que es como si estuviéramos aún casados pero que nos hemos dado un tiempo.

Kim al día siguiente de quedarse en mi casa, se fue con su novio. Todavía no la he llamado...

Yo he seguido con mis estudios de forense y me falta muy poco para poder trabajar ya. Es un trabajo que amo con todas mis fuerzas.
He vuelto a las clases de Taekwon Doo y he mejorado muchísimo más en autodefensa.

Blair... Pues no se que vida lleva. Jane, su hermana, me dijo hace un mes que estaba pensando en dejar él trabajo y que lo herede su primo, pero no sabe si lo hará o no.

Yo y Jane nos llevamos muy bien, pero no tanto como con Vanesa, María, Tyler, Matteo, Lucas y Damon. Somos ya más maduros físicamente, pero mentalmente somos un desastre. A veces a Vanesa se le escapan chillidos de niña enamorada cuando está con Tyler y eso me da mucha risa.

Solemos quedar casi todos los fines de semana para ir a tomar algo o incluso a discotecas, pero no estamos como los adolescentes de dieciocho años de antes.

La relación de Jane y Lucas no fue bien, entonces lo dejaron.
María y Matteo siguen igual que antes.
Vanesa y Tyler tienen a Laura pero que ya es más mayor. Y Damon... Sigue igual que siempre.

Creo que me desvíe del tema.

Como iba diciendo, no todo tiene un final feliz, ni un libro con un acabado diciendo "y fueron felices y comieron perdices". Si la vida real fuera así de fácil y bonita... Si me pagaran por creer que un amor como él de Titanic es real, estaría en quiebra.

Ahora, desde ese día , cuando Blair me dijo que no volvería... Se me partió él corazón y juré olvidarlo.

No pienso mucho en él, al fin y al cabo soy fuerte y he conseguido sacármelo de la cabeza en estos tres meses sin verlo.

Recuerdo él primer mes que lo pasé muy mal, no voy a mentir. Tenía que venir Jane para consolarme y Damon para hacerme reír. Casi caigo en depresión de no ser por todo él apoyo que me dieron mis amigos y la alegría de Laura.

A veces pienso... ¿A Blair le habrá pasado lo mismo? ¿Habrá sentido un vacío en su interior al no verme? ¿Sabrá que lo pasé mal por su culpa? ¿Se arrepentirá de algo? ¿Algún día me pedirá perdón? ¿Estará bien?

Pero bueno, no quiero verlo, ni él a mi. Lo nuestro fue cosa del pasado, y cómo dicen algunos... Una relación en la que quedan cenizas, es difícil encender fuego.

En fin, mi conclusión es que hagas lo que hagas, sea lo que sea, hazlo sin pensarlo y no mires atrás, porque a veces ese gesto, puede llevarte a la mismísima miseria de tu vida.

Rebeca Philm

𝓟𝓻𝓸𝓶𝓮𝓽𝓸 𝓪𝓶𝓪𝓻𝓽𝓮 𝓼𝓲𝓮𝓶𝓹𝓻𝓮 [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora