No regrets. (TERMINADA)

No regrets (cap 9)

Capítulo IX. No puedes engañarte a ti mismo.

La gente suele pensar que las cosas maravillosas sólo suelen ocurrir en las películas. No sé, por mi parte he tenido que vivir muchas cosas, no todas han sido buenas claramente, pero han sido experiencias nuevas, y sin ellas no sería la persona que soy ahora.

Conocer a alguien de tu mismo sexo y enamorarte, que alguien te ayude cuando te estás derrumbando, enamorarte de tu mejor amigo (bueno, en mi caso es al revés) o que en tu vida aparezca alguien que sólo quiere hacerte daño. No es algo que pase en las películas, quiero decir... estoy segura de que no soy la única a la que alguna vez algo de esto le pasó. Mi vida no es un drama y no es diferente a la de esa chica que se maquilla intentando ocultar sus inseguridades o ese chico que todavía no se atreve a confesar su homosexualidad. No es un drama propiamente tal, es... la vida.

Si, en realidad, muchas cosas malas me han sucedido, y debo admitir que la mayoría de las cosas han sido por mi culpa. Pero al final, eso es lo que hago, estoy aprendiendo a superar los problemas, mis propios desafíos. Cuando todo esto termine me sentiré feliz y podré decir ''Vaya, finalmente soy mucho más fuerte''.

No me importa tener que romper el corazón de Ben. Es fuerte y estoy segura de que logrará seguir adelante sin mi. Bueno, extrañaré a mi mejor amigo y estoy casi segura de que a partir de hoy nada va a ser igual. Esa es la parte buena... la vida es impredecible y no por miedo a equivocarme voy a dejar todo a medio camino. 

He madurado bastante, después de conocer a Kendra, a Lisbeth, a David... he aprendido muchas más cosas que en cualquier otra oportunidad de mi vida. Estoy feliz y muy satisfecha conmigo misma, porque no soy la misma niña que vivía oculta en las sombras, hoy soy Beth y aprendí a jugar. 

Ben tiene su teléfono apagado. Quisiera hablar con él y explicarle todo... yo no soy de esas personas capaces de cambiar sus sentimientos de un día para otro, a pesar de que más de una vez se me pasó la idea de él y yo juntos, no, es realmente imposible, es mi mejor amigo desde siempre. La sola idea de pensar en que podríamos tener algo me causa dolor de estómago. No me importa tener que herir sus sentimientos si es la única manera de alejarlo de mi y de esa falsa idea sobre un 'nosotros'.

Buzón de voz. ¿Cómo es posible que ya siendo ''adulto'' no pueda enfrentar sus problemas? Es decir, soy yo. Ni siquiera he cambiado lo suficiente como para que no sea capaz de mirarme a la cara o al menos escuchar lo que tengo que decirle. No quiero tener que irme a la mala sin hablar con él. Después de todo, es como mi alma gemela. No soporto la idea de dejar todo inconcluso. Tengo que hablarle.

Voy hasta su casa. Ben todavía vive con sus padres, en realidad no es un problema, ellos me conocen y siempre han sido amables conmigo. Son la familia con la que me hubiese gustado crecer.

-¿Beth?¿Qué haces acá? pensé que estarías en la universidad hasta el fin del invierno. ¡Te extrañamos tanto!, Ben no nos dijo que pensabas volver antes.-

-Hola señora Minerva. Si, lo siento mucho por no haberla llamado. Vine por unos días de vacaciones a la ciudad, debería estar estudiando, pero ya me conoce bien. Eeeh.. ¿está Ben en la casa? tengo muchas ganas de hablar con él y...-

-Pasa, está en su habitación, tu sabes que puedes venir cuando quieras. ¿Puedo ofrecerte una taza de té? No, ni siquiera me discutas, quiero saber todos los detalles de tu nueva vida universitaria.-

La casa es muy grande y siempre tiene olor a galletas recién horneadas. Cuando mis padres se gritaban yo solía refugiarme con la familia de Ben. Es un verdadero hogar. Las mesas tienen manteles bordados, el piso siempre está brillante y ponen flores nuevas todos los días en las vasijas. Para llegar a la habitación de Ben debo pasar un largo pasillo, en las paredes hay fotografías de toda la familia y algunos cuadros pintados por el señor Smith, padre de Ben.