DESTINO (ZADR & ZAKR)

3

Zim apareció frente a una puerta, la cual tenía un letrero que decía; "Bienvenido a la coronación". Algo muy primitivo a su parecer.

El cuarto tenía unos sillones de color rojo en el centro, ventanas que dejaban ver luz del día con cortinas rojas y detalles marrones, tenía una alfombra blanca que tapizaba todo el piso y en medio de los sillones había una mesa con decoración de un florero con rosas de color verde.

El cuarto era blanco con unos detalles hechos en madera. Muy elegante y grande. Empezó ha investigar el cuarto. Nunca había visto una habitación así, era sorprendente y extraña, ya que él no salía de la Inmensa y no conocía la extrañeza de ese planeta.

Mientras investigaba, se dirigió a la ventana para ver qué había fuera. Sus ojos se abrieron con sorpresa; había un jardín de flores de distintas especies que ocupaba la mayor parte del suelo, notó que donde estaba era como el quinto piso de aquella mansión o castillo. Más allá del jardín de flores se notaba una especie de laberinto hecho con paredes de arbustos muy verdes con rosas rojas, miro el cielo azul con unas pocas nubes color blanco. Estaba maravillado por tanta belleza, pero alguien lo sorprendió al escuchar unas palabras.

-Disculpe la demora ¿usted es Zim, el hijo de los altos, príncipe de Irk?

Zim al voltearse rápidamente pudo ver no a una sino a dos humanas. Vestían un atuendo de sirvientas color blanco y negro, ambas estaban con la espalda recta y con las manos en frente con una sonrisa.

—¡¡SÍ, YO SOY ZIM!!! ¿Quiénes son ustedes?—dijo Zim apuntandoles con el dedo.

—Lo siento por no decirlo antes, mi nombre es Mujun.— habló con una gran sonrisa.

—Yo soy Shrignold Virska, un gusto.— dijo la otra con una sonrisa, cerrando los ojos y ladeando la cabeza, al igual que un anime.

—Nosotras somos tus acompañantes personales, y te acompañaremos hasta la fiesta de la coronación— hablaron al mismo tiempo

—¿Ves? Te dije, Shrignold, que sería un gran toque decirlo al mismo tiempo.— dijo Mujun alzando la mano para que la otra sirvienta la chocará con la suya.

—Pues a mí no me parece correcto hacer eso, no sé cómo me convenciste.— ignoró a Mujun.

—Oh, por favor. No me dejes así.  —  dijo Mujun desanimada.

—¡¡OIGAN ¿QUE ACASO ESTA ES LA MANERA DE RECIBIR A UN INVITADO?!! Zim está molesto.—gritó.

—No, lo sentimos. Es nuestro primer día como sirvientas del castillo y yo solo quería animar a Shrignold Virska ya que estaba nerviosa. Por favor no le diga nada a Jhonen.— suplicó y parecía aterrada al nombrar ese nombre.

—Es nuestro jefe y no quiero que me despidan tan pronto.— Shrignold habló mirando al suelo.

Al ver cómo le suplicaban que no le dijera nada a Jhonen, Zim no tuvo más remedio que prometer que no diría nada y perdonarlas por hacer eso. Al hacerlo su Squeedly-Spooch sintió un mal presentimiento, ya que sabía que una de ellas no estaría tranquila y tenía razón.

*Cinco minutos después*

Zim estaba harto. Se dejó convencer por la humana Mujun de ponerse unos listones en las antenas y llevaban 3 minutos de que se las estuviera poniendo.

—OOOoowwW ¿no es lindo? sabía que ese listón le quedaría bien, el rosa combina con tus ojos.

—Si es lindo, pero Mujun ¿podrías dejarlo en paz? él es el príncipe de la raza irken, podría enfadarse y ocasionar una guerra.