Parte uno.

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— Érase una vez un precioso puebo llamado Hamelin. En él se despidaba aire puro todo el año puesto que estaba situado en un valle, en plena natudaleza.— el pequeño Jimin sostenía el gran libro de cuentos entre sus pequeñas manitos, trataba de leer y poder pronunciar aquellas palabras difíciles que le dificultaban su camino en la lectura.

A pesar de la entorpecedora leída de Jimin, su amigo Jungkook lo escuchaba atentamente como si este fuese lo más interesante del mundo.

Observaba como su amigo hacía muecas y fruncía el ceño cuando las cosas tenían mucha dificultad, aquellas expresiones hacían que tuviese muchas mariposas rondando en su estómago, provocando una extraña sensación en él.

—Kookie malo no me está escuchando —mencionó formando un pequeño puchero.

El pequeño Jungkook estaba tan absorto en sus pensamientos que no escucho cuando su amigo paro su lectura.

—Lo siento, ¿puedes seguir leyendo?

—Ummm—. Dijo con su pequeña manito en su barbilla pensando en sí debería de seguir o no—Bueno kookie—. Y de esa forma prosiguió en su lectura.

Todos los días Jimin le leía una historia diferente a su pequeño amigo Kookie, aun cuando tenía ciertos problemas para hablar. Y esto le dificultaba la lectura. Aun sabiendo aquello Jungkook disfrutaba de escucharlo, porque nadie lo hacía sentir de esa forma "extraña" igual que Jimin. Y a pesar de que era algo desconocido, se sentía cálido ese sentimiento en la pancita de Jungkook. Su pequeño Jiminie le causaba una explosión de emociones y, algunas veces, hasta se ruborizaba gracias a este.

—... y, fin.—Jimin finalmente terminó de leer el cuento y lo cerró fuertemente con sus dos manitas causando que Jungkook, quien se encontraba absorto en sus pensamientos admirándolo, despertase.— ¿Qué te pareció el cuento kookie?

—Todo lo que tú me leas, me gustara Jiminie — palabras simples, pero a Jimin le ocasionaron varias "cositas" como el las solía llamar en su estomago.

—Jimin nos tenemos que ir— Una mujer entro a la habitación, era la madre del mencionado.

—Lo siento kookie me debo ir, mañana venga a leerte más— este se acercó a Jungkook y le dejo un suave beso en la mejilla— mejórate pronto, así podemos salir a jugar

Y sin más se fue dejando a su amigo en esa gran y fría habitación color blanco.

❀ ❀

Desde hace ya un año Jeon yacía en la camilla de un hospital pese a su corta edad, los doctores le habían diagnosticado leucemia.

Al principio su madre pensó que no estaba comiendo bien, por eso su pérdida de peso, pero empezó a notar que Jungkook estaba más pálido de lo que debería, hasta que un día llego de la escuela con una hemorragia nasal, ahí se dio cuenta de que tenía que llevarlo al médico.

Para Jungkook no fue agradable ver a su madre llorar al recibir tales noticias, la verdad es que no entendía muy bien como un sangrado de nariz podía ocasionar el llanto de su madre, probablemente Jungkook no entendía la gravedad de su enfermedad ni siquiera cuando su madre le explico que padecía, simplemente no podía entender que era tan grave.

— Jungkook, te debes quedar acá— explico su madre con voz suave.

— Pero mami, Jimin me ira a buscar a casa como todos los días, no puedo defraudarlo— hizo un tierno puchero.

— Yo le explicare lo que pasa, hasta puede venir para acá para visitarte.

— ¿Harías eso por mí? —su semblante de tristeza había cambiado totalmente a una de felicidad.

— Claro que si, ahora pórtate bien, volveré dentro de un rato, recuerda si quieres algo puedes llamar a unas de las enfermeras —beso la frente de su hijo, para luego irse y dejar al pequeño Jungkook en esa habitación solo.

❀ ❀

Jimin volvió al día siguiente como había prometido, y venia con un nuevo cuento para leerle a su amigo kookie, pero cuando fue a la habitación de su amigo él no estaba.

Desesperado fue a buscar a la señora Jeon para saber dónde estaba su kookie, pero hubiera preferido no encontrarla realmente. La señora Jeon estaba con sus ojos hinchados de tanto llorar, trato de ocultarse, pero la señora Jeon ya lo había visto.

— Jiminnie —el pequeño se sobresaltó, no pensó que lo hubieran descubierto tan rápido— si buscas a Jungkook, él está...él está en otra habitación por este momento, en unas horas más estará en su habitual habitación, puedes esperarlo ahí si quieres.

— Gracias señora Jeon— y con una reverencia se marchó al cuarto de su amigo.

Al llegar a la habitación se dio cuenta de tan grande era estando solo ahí, se sentó en su habitual puesto y empezó a leer el cuento que trajo en esa ocasión, su título decía "El principido" o eso era lo que Jimin leía.

— El principidio — comenzó a leer en voz alta — cuando yo tenía seis años vi un libro sobre la selva vidgen — suspiro — esto no es divertido si kookie no está para escucharme.

El pequeño Jimin empezó a sollozar, el quería que su amigo estuviera ahí con él, pero no estaba, Jimin estaba sólo. Y con todas sus fuerzas deseo que su amigo estuviera con él.

Y como si fuera magia, Jungkook apareció, pero no le agradó para nada lo que vio.

❀ ❀

Nota: Hola esto será un two-shot probablemente ah, la verdad es que si no lo publico ahora de seguro no lo voy a publicar jamas :c, si hay errores me avisan

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⏰ Last updated: Oct 25, 2017 ⏰

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✿ Nefelibata ; KookminWhere stories live. Discover now