내 사랑; Nae salang

757 145 26
                                    

Amor mío.





La suavidad de la piel de YoonGi seguía marcada en cada parte de mi cuerpo, al igual que cada dulce beso que se dedico a depositar por doquier.

Si pudiésemos permanecer así más tiempo, si yo pudiese gravar su piel en mi piel para no olvidarla nunca. Lo haría así doliera de mil maneras, porque el amor significaba más cuando provenía de dos locos, y nosotros estábamos precisamente así, locos, tanto él por mi, como yo por él.

Hosie, tengo miedo, mucho miedo de perderte.

Seguíamos en el bosque, desnudos, recostados sobre nuestras ropas y hojas que decoraban el húmedo suelo.

—¿Por qué? —suspire, girando mi cuerpo hasta quedar recostado de lado.

—Por qué... —tomó un minuto antes de responder adecuadamente—. La vida es paralela al infierno, pero debo mantenerme por ti.

—Hyung, te amo. Seamos prósperos juntos, pensado que vivimos peligrosamente.

¿Aún sino es sano?

—Aún sino es sano, sé que naciste para usar armas y hacer pagar a los demás por sus malas acciones...

Lo miré con tranquilidad, dejando que las palabras flueyeran entre ambos. Algo me sabía a despedida, no tenía claro si eran sus caricias o sus besos, incluso sus palabras tan profundas.

—Pero yo también hice cosas malas Hosie, y lo lamento, de verdad lo siento —su mirada lucía tan vacía, que me vi tan necesitado de abrazarle y acariciarlo tiernamente.

—Te amo tanto mi pequeño Seokie —sonrió con nostalgia, besando la coronilla de mi frente—. ¿Recuerdas?

—Odiaba el sobrenombre de Seokie, por eso terminaste llamándome Hosie —reí añorando aquellos tiempos de niñez.

Observé a YoonGi sonreír, probablemente porque quizá había recordado lo mismo que yo.

Poco a poco el sol iba escondiéndose entre los grandes árboles que nos rodeaban, pronto caería la noche, y con ella, nuetras almas.

Seokie, cada cosa que digo y hago, es por ti y para ti —acarició con dulzura mi mejilla—. El amor que siento por ti es incluso más firme que la muerte. Recuerdalo siempre.

Asentí con un nudo en la garganta, un pequeño dolor recorrió la parte trasera de mi nunca y se extendió hasta el centro de mi cabeza. Ignoré eso, cerrando mis ojos, sintiendo el cálido tacto que YoonGi se dedicaba a darme.

—¿Te casarías conmigo?, seguro que no es el mejor momento para pedirte algo así, pero, necesito saberlo, Hosie.

En ese instante, justo cuando su pregunta atravesó por mis oidos, quise echarme a llorar como si no hubiese un mañana después.
Estaba siendo sumamente masoquista, tanto con él, como conmigo. Estaba avivando las llamas de nuestro amor, sin siquiera saber con certeza si lograríamos a estar juntos una vez más. 

—YoonGi —reuní fuerzas, poniéndome de pie.

Busque el bóxer para cubrirme y la demás ropa que estaba esparcida, colocándomela.

—Perdón, lo siento, no debí preguntar eso —rió muy bajo, levantándose para también, vestirse.

—Sí, acepto Min Yoon Gi —sonreír por la cara de asombro que puso en cuando solte las palabras—. Pero tienes que prometerme algo.

Abotone rápidamente mi pantalón y YoonGi se coloco su camisa casi tan rápido o más que yo con el pantalón.

—Cualquier cosa, voy a cumplir lo que me pidas —sonrió dejándome ver su perfecta dentadura, junto a sus  encías rosadas.

Pase lo que pase, volveremos a estar juntos, ¿sí?

Su mira bajo hasta las hojas y el suelo que pisábamos, estaba a punto de responder cuando...

—¡SUGA! —llamaron, más bien, gritaron fuertemente—. ¡HOSEOKIE!

Entre en nerviosismo en cuanto note las linternas entre los árboles. La noche estaba próxima a caer y no era buena idea permanecer ahí.

—Creo que nos hemos tardado un poco —dibujé una media sonrisa en mis labios, antes de darle un último beso—. Gracias, te amo.

YoonGi chasqueo su lengua molesto, tomando mi muñeca y atrayendome hasta sus labios nuevamente.

—Eh... hyung, van a vernsghs —no finalice mi palabra, YoonGi decidió callarme con un profundo y humedo beso.

—¡SUG..., ¡EH, LOS ATRAPE! ZICO, ESTAN AQUÍ —el menor del bando, alumbró hasta donde nos encontrábamos YoonGi y yo—. Que asco, ya me imagino lo que hicieron.

—Que te importe poco, Zelo —bramó YoonGi, aferrándose a mis caderas.

—Sí sí, huelen a sexo así que bañense antes de irse a dormir.

—¡Hombre, avisa que te vas a tardar! —chilló Zico, acompañado de P.O y JaeHyo, quienes también traían consigo linternas.

—¡Muero de hambre! —gritó el menor de cabellos rosados, adelantándose de vuelta a la cabaña.

—Concuerdo con Zelo —comentó DaeHyung yendo detrás del pelirosado.

—¿Hacía falta salir todos en bola sólo para buscarme? —cuestionó YoonGi a Zico, entrelazando su mano con la mía.

Me mordí la mejilla intentando no sonrojarme por la mirada de Zico en nuestras manos.

—Eh, pues... Sí, hacía falta —quizá, un poco sorprendió, negó levemente y miro hacia el frente, observado al resto de los chicos que iban aventandose unos entre otros, riendo como niños pequeños. Excepto YongGuk.

—¿Qué? —rió YoonGi notando lo mismo que yo—. ¿Te es raro que le tome la mano a mi prometido?

Zico se detuvo en seco, tociendo escandalosamente, llamando la antecion del resto que ya iba más adelantado que nosotros.
Reí muy poco viendo la cara de espanto que puso en cuanto YoonGi dijo "prometido".

—¡Hyung-nim! —chilló Zelo, trotando de vuelta hasta nosotros—. ¿Qué le hiciste? —miro de mala gana a YoonGi, mientras daba palmaditas en la espalda de Zico.

Llegando a la acogedora y pequeña cabaña, todos juntos cenamos como si nos conociésemos de toda la vida, entre risas y pláticas tontas, terminamos con viejos recuerdos y lamentaciones que llevaríamos siempre con nosotros.
El suju se fue terminando, y fui el único que contemplo como se volvían idiotas entre ellos mismos y como se ponían de cariñosos o simplemente optaban por echarse a dormir, como YoonGi.

Me tumbe a su lado, envolviéndo mis brazos alrededor de su cintura, y antes de cerrar mis ojos, le robe un enfimero beso que apenas le hizo efecto como para moverse, sólo pude sonreír por lo tierno que un Min YoonGi lucía ebrio.






©セシア

¿Qué tal?, ¿les gusto?💜
Disfruten lo más que puedan.

1/07/17.

사랑을 위해 살인 Temporada 1 || YoonSeok Donde viven las historias. Descúbrelo ahora