Despedida rápida

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Keiran me sitúa a lado de la urna que contiene las papeletas de las chicas, la gente me observa, algunos de ellos me conocen, para ellos soy la desafortunada chica que quedo huérfana con tres hermanos menores, la chica que ahora sera tributo y tendrá una muerte tan insignificante como para recordarle.

Se que la gente de todo Panem me esta viendo, y aun que intento esforzarme por contener las lagrimas, es la imagen de mis tres hermanos abrazados con ojos llorosos la que me derriba, lagrimas silenciosas se deslizan por mis mejillas, no puedo quitar la vista de mis hermanos.

-Valto Wetland -El chico debe de tener unos catorce o quince, su piel es morena con un un color de ojos café tan oscuro que se pierde con la pupila, es larguirucho y desgarbado, un nudo se forma en mi garganta al verlo caminar al podio y subir, es como ver a Geran, aparto mi vista del chico.

Keiran anuncia que somos los tributos del distrito once, cuando el evento acaba nos conducen a una habitación para despedirnos de nuestros familiares.

Estoy en una pequeña sala amueblada, los sofás lucen tapicería vieja y sucia, las ventanas tienen unas cortinas gruesas de color vino, la alfombra tiene algunas machas, la puerta de la entrada se abre y por ella entra Lila, me envuelve en un abrazo fuerte.

-Oh Maya, cuanto lo siento -Niego contra su hombro, el nudo en mi garganta quema.

-Lila, prométeme que...

-No tengo que prometerte nada Maya, tus hermanos no pasaran hambre, te lo aseguro -Sin poderlo evitar, sollozo contra su hombro, Lila me aprieta más contra ella.- Ellos querrán verte, trata de ganar, escóndete en los arboles, sabes treparlos mejor que ninguno de nosotros, y sabes que plantas se comen, intenta mantenerte con vida Maya.

Lila se marcha, tengo que esperar unos segundos cuando la puerta se abre y Lotto entra llorando, se echa en mis brazos soltando sollozos que me desgarran entera.

-Tranquilo, todo va a estar bien -Geran tiene los ojos húmedos, se que quiere llorar, pero es fuerte y se mantiene firme, en cambio Sabyn, se rompe en cuanto me ve, tengo a mis dos hermanos pequeños llorando contra mi cuerpo, miro a Geran, él se acerca con pasos lentos y le abrazo-. No quiero que por ningún motivo pidan teselas, Lila se encargara de que no pasen hambre.

Geran asiente, se que en cuento me vaya Lotto comenzara a trabajar como los niños pequeños recolectando la fruta, se que Geran y Sabyn podrán cuidarse y cuidar de Lotto.

Les doy a los tres un beso en la frente, un agente de la paz entra, me dice que ya es hora, me cuesta tanto despedirme de Lotto, él no me suelta la mano, Geran tiene que sujetarlo y decirle algo al oído, me suelta y abraza a Sabyn escondiendo su rostro en su pecho, Sabyn lo abraza.

-Trata de ganar -Me dice Geran, asiento y salgo fuera de la habitación.

Jamas he salido de mi distrito, entrar al tren veo todos los lujos que tiene, me quedo completamente extasiada al ver tanta belleza.

-A que es divino, este lugar es sublime, pero el Capitolio... quedaras patidifusa -Keiran aparece por una puerta, tiene su típica sonrisa de dientes blancos, Valto entra detrás de mi, sus ojos mirando cada rincón del vagón.

Me asignan una habitación donde me doy una ducha con agua caliente, me cambio las ropas por unas más cómodas y frescas, llevo unos pantaloncillos de tela fina y suave de un color gris oscuro, la blusa es igual de tela fina, es un tono más claro y no tiene mangas, me cepillo el cabello húmedo.

Salgo de mi habitación, Keiran, Hunter y Valto están sentados frente a la mesa comiendo, las miradas de las tres personas se dirigen a mi en cuanto me ven, Keiran me sonríe y me invita a sentarme, Hunter me observa momentáneamente y vuelve a su comida frente a él.

-Chicos, tenemos la agenda muy apretada, desde el desfile de los tributos hasta las entrevistas, esperemos que todo vaya de acuerdo a lo planeado -Keiran se disculpa y se levanta dejándonos a Valto, Hunter y yo solos en la mesa.

-¿Que consejo puedes darnos para cuando estemos en la arena? -Hunter mira a Valto, una pequeña sonrisa se muestra en la comisura de su boca.

-Nuestro distrito tiene trabajos que nos benefician, desde el conocimiento de las plantas y raíces hasta poder trepar arboles enormes.

Miro el plato frente a mi lleno de comida, comida que Keiran coloco ahí por mi, no puedo evitar pensar en mis hermanos, no creó poder comer nada, no sabiendo que ellos carecen de esto, algo dentro de mi pecho se contrae.

-¿Sabes como matar a una persona, Maya? -Miro a Hunter, su pregunta me descoloca, sus ojos verdes me miran, él espera una respuesta-. ¿Sabes empuñar un cuchillo o usar el veneno de algún animal como proyectil? -Niego con la cabeza, Hunter me observa atentamente y luego a mi plato de comida intacto.

-Veré si Chaff tiene algún consejo -Valto se levanta de la mesa y sale del vagón dejándome a solas con Hunter.

-Tienes que comer Maya, estas demasiado delgada, debes aprovechar estos momentos previos a los juegos, intenta ganar peso y aprender todo lo posible para...

-¿Ganar? -Hunter asiente, le miro a los ojos verdes intensos, siento que estoy apunto de estallar-. ¿De que demonios hablas, como podría alguien tan débil como yo ganar? Por todos los cielos, tengo tres hermanos menores que se quedaron huérfanos y ahora se quedaran sin su hermana mayor, la que pone una comida en la mesa, Geran es muy joven como para enfrentarse a eso, y Sabyn... oh no quiero pensar en ellos pidiendo teselas -Me cubro la cara con las manos mientras dejo salir las lagrimas, en algún momento Hunter se levanto de su silla y se acerco a mi, sus manos se deslizan a lo largo de mis antebrazos para sujetar mis manos, las retira de mi rostro y nos observamos.

-Por ellos debes intentar ganar Maya, los demás tributos te consideran débil, demuestra que no es así, ahora come y luego puedes ir a recostarte un momento.

Veo a Hunter levantarse y salir del vagón, me quedo hasta terminar la comida, me retiro a mi vagón para poder dormir un poco.

Los Juegos Del Hambre - CenizasWhere stories live. Discover now