Vywirm: El comienzo [PAUSADA]

Capítulo 11: Veneno

Koldo

-¿Por qué Zaid quiere iniciar una guerra? -dije.
-No se que es lo que le he causado para que me tenga tanto odio, pero quiere que se destruya éste mundo y la única forma que encontró fue iniciando la guerra -dijo Ludmila.
-¿Solo lo hace por rencor? -dijo Milo.
-Un rencor que yo he provocado -dijo Ludmila.
-Podremos detenerlos, pero yo no quiero tener que matarlos, aunque sea la única opción que tengamos -dijo Nidia.
-Los cazadores ya no tienen uso de razón, desde que Zaid les dio los artefactos no piensan en el daño que pueden causar, solo tienen avaricia de poder -dijo Ludmila.
-Tendremos que luchar, pero por ahora entrenaremos lo que podamos para estrechar lazos y mejorar nuestros dones -dije.
-Hablando de dones... Nidia, Vinic -dijo Ludmila.
-¿Sí? -dijeron Nidia y Vinic al unísono.
-Sus dones pueden evolucionar haciendo cierto tipo de actividades -dijo Ludmila.
-¿Evolucionar?, ¿Cómo es eso? -preguntó Nidia.
-Sus dones pueden tener otras habilidades, pero están ocultos y tienen que ser liberados, no puedo decirles el cómo liberarlos ni el que habilidades pueden obtener, si se los digo el don ya no podrá evolucionar -dijo Ludmila.
-¿Por qué solo Nidia y Vinic pueden evolucionar su don? -pregunté.
-Porque su don tienen muchas formas de utilizar el potencial que tiene y por ahora el de Nidia y Vinic tiene algunas formas sin despertar, pero ustedes Milo, Dana, Koldo y Rosalba ya lo han evolucionado sin darse cuenta algunos -dijo Ludmila.
-¿E-en serio? -pregunté impresionado.
-Sí creo que tú Koldo has sido el único que no se ha dado cuenta, me sorprendió que lo hucieras sin ayuda de entrenamiento -dijo Ludmila.
-Pero, yo no siento que haya cambiado nada en mi don -dije.
-Yo te lo explico -dijo Milo, antes de que Ludmila siguiera hablando- tu don al inicio solo podías hacer aparecer armas de cuerpo a cuerpo, pero al ver la situación de Vinic y la desesperación de Nidia, pudiste aparecer un arco, aunque tu pensarás que fuera lo normal.
-No pudo haberlo explicado mejor, y regresando a Vinic y a Nidia, al perecer deberías ya de contar algo, ¿No Nidia? -dijo Ludmila.
-¿Algo?, ¿Qué es ese algo? -preguntó Milo preocupado.
-N-no es nada malo, pero no se los diré, se los mostraré -dijo Nidia alejándose un poco de nosotros.
Nidia se paro firme puso sus manos enfrente de ella y empezó a formarse una esfera de agua entre sus manos...

Nidia

Supe que podía controlar el agua el día que salvamos a Vinic, no quería mostrarlo porque no sabía si podría controlarlo en frente de mis amigos, así que desde ayer empecé a practicar sin que me vieran hacerlo.
-¡¿A-agua?! -dijeron Koldo, Vinic y Milo al unísono.
-Sí, lo supe cuando llegamos con Vinic al refugio, ¿Por qué no les sorprende a ustedes? -dije refiriendome a las chicas.
-¿Crees que no nos dimos cuenta cuando practicabas ayer en la noche en el cuarto? -dijo Rosalba.
-Ya casi es hora de que me vaya, pero antes tengo que decirles esto, morado esta cerca... -dijo Ludmila.
Después de unos segundos ya no sentía la presencia de Ludmila.
-Ya no tienes el ojo amarillo, eso quiere decir que ya no está Ludmila -dijo Vinic refiriéndose a mi-
-¿Morado?, ¿Alguien más de los nuestros? -preguntó Rosalba.
-Por lo que se, sí es uno de los nuestros -dijo Milo.
-¿A qué esperamos?, tendremos que encontrarla, ¿No? -dijo Dana.
-Yo te sigo -le dije a Dana.
-No crean que van a ir solas, yo voy con ustedes -dijo Milo.
-¿Quién dijo que alguien iba a quedarse aqui?, vamos todos juntos -dijo Rosalba.
Salimos todos a buscar a morado, según Ludmila morado era quien estaba cerca, pero para nuestra sorpresa no tuvimos que buscar mucho, a unos metros del refugio había una chica sentada en el piso, recargada en un árbol y otro hombre, que al instante supe que era un cazador, acostado boca abajo en el piso, el cazador paarece ya no tener vida, pero la chica tenía la respiración demasiado agitada.
Rosalba y yo corrimos hacia la chica.
-¿Estás bien? -dije.
Se puso en pose defensiva, obviamente no sabe si somos aliados o enemigos.
-No tienes de que preocuparte -dije lanzandole una brisa a la cara.
-¿S-son igual que yo? -dijo la chica.
-¿No ves mis orejas? -dijo Rosalba riendo.
-Yo no tengo orejas pero si tengo plumas -dije mostrándole una parte de mi brazo.
-Por fin los encuentro -dijo en un suspiro y empezó a tambalearse.
La agarre antes de que pudiera caerse.
-¿Estás bien? -le pregunté de nuevo.
-N-no es nada -dijo la chica.
-Deja que te revise -dijo Rosalba.
No me había dado cuenta de que se estaba sosteniendo el costado.
Movió la mano de su costado y nos dejo ver una herida grande y grave...

Dana

Llegue a donde estaban Nidia, Rosalba y la nueva chica.
Al acercarme me di cuenta de la herida que tiene la chica.
-¿Pero qué fue lo que te paso? -pregunté.
-He tenido que luchar con bastantes de esos para lograr encontrarlos -dijo la chica señalando al cazador ya muerto- pero éste me sorprendió y logro herirme con la espada que traía.
Rosalba ya había comenzado a curarle la herida mientras nos contaba lo sucedido.
-¿Por qué tenias tanta prisa para buscarnos? -preguntó Nidia.
-Porque sabía que había más como yo y ya se el por qué Ludmila nos dio los dones -dijo la chica.
-Así que has podido hablar con Ludmila -dijo Milo, no me di cuenta de que los chicos ya estaban al lado nuestro.
-Sí, muy poco, pero lo suficiente para saber su nombre y el de nuestro enemigo -dijo la chica.
-No nos hemos presentado, yo soy Dana, quien te esta curando se llama Rosalba -dije.
-Yo soy Nidia y ellos son Milo, Koldo y Vinic -dijo Nidia.
-Yo soy Pandora, una de las últimas en despertar -dijo la chica.
Cuando Rosalba terminó de curar a Pandora, todos volvimos al refugio y le enseñamos a Pandora el refugio y el lugar de entrenamiento.
-Esto es más grande de como lo imaginaba -dijo Pandora.
-¿Ya te lo imaginabas? -pregunté.
-Ludmila me contó bastante sobre ustedes, parece muy orgullosa de ustedes -dijo Pandora.
-No pense que Ludmila hablara de nosotros -dijo Nidia.
-La verdad es que empezó a hablar de ustedes porque yo pregunte por los demás que habían despertado, y al parecer ustedes son los únicos que estan en grupo, por eso quise encontrarlos -dijo Pandora.
-Tendremos que encontrar a los demás para estar más seguros -dijo Milo.
-Se donde estaban los demás ayer, pero no se si se han movido del lugar en el que estaban, ellos no tienen un lugar fijo en el que vivir cómo ustedes -dijo Pandora.
-Tendremos que esperar un tiempo más, si Ludmila nos puede decir la ubicación de los demás iremos rápido a donde nos diga que estén -dijo Rosalba.
-Tal vez sea lo mejor -dijo Pandora.
-Y tú tienes que descansar, que si no esa herida no cerrará -dijo Rosalba.
-Esta bien, descansare -dijo Pandora- pero antes de irme a descansar quiero saber sus dones ya se el de Rosalba y el de Nidia pero no he visto el de los demás -dijo Pandora.
Milo y yo nos convertimos en nuestros animales respectivos, Koldo hizo aparecer un arco y un estoque, Vinic tiro una pared y la volvió a poner en su lugar y Nidia sacó fuego y agua.
-Espera, ¿También puedes controlar fuego y agua? -preguntó Pandora a Nidia.
-Si, pero tengo que practicar más el agua -dijo Nidia.
-Ahora es tu turno de enseñarnos tu don -dijo Milo.
-¿Me prestas tu brazo un momento? -le preguntó a Milo.
Milo estiró su brazo a Pandora y Pandora lo agarro y lo mordio, Milo se quedo en la misma posición sin poder moverse.
-Veneno, interesante don -dijo Milo con dolor.
Y al instante siguiente Milo cayó al piso y ya pudo moverse.
-¿Solo puedes usar tu veneno por tus dientes? -preguntó Vinic.
-No, todo lo que use como arma se impregna del veneno que desee -dijo Pandora.
-¿Hay más de un veneno? -preguntó Koldo.
-Paralizante, agonizante y mortal -dijo Milo.
-Y el agonizante tiene bastantes variables -dijo Pandora.
-Ahora a la cama -dijo Rosalba a Pandora- duerme y después podrás estar como nueva.
Pandora asintió y se fue a uno de los cuartos...

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