3. "Apresurado".

236 19 10
                                    

Mi primer beso. Ha sido hace 3 días y ahora solo quiero que me haga aquella pregunta que he esperado por tanto tiempo, estoy segura que ya no ha de tardar. Todo es mucho mejor, él está conmigo todo el tiempo y aunque sus amigos se burlen de nosotros, sé que nunca imaginaron que Niall estuviera con una chica como… yo. Sophia se ha vuelto muy… ¿insistente? No lo sé. Ella me advierte de que nada de esto sucede tan rápido y aunque sé que tiene razón, quizá solo fue un golpe de suerte. 

Observo como todas las miradas se posan en nosotros por milésima vez. 

-¿Tienes algo que hacer este fin de semana? –me pregunta Niall mientras que da un mordisco a su triangulo de pizza de jamón. 

-No, ¿y tú? –le respondo siento más que obvio que no salgo y toma mi mano mientras que la acaricia con su dedo pulgar.

-Tenía, pero he pensado que es mejor pasarla contigo –me sonríe de lado y mi estómago comienza a revolverse, sé que es porque estoy más que nerviosa. 

-Oh… pero, probablemente no hagamos nada divertido, ya sabes, no tengo mucho que contarte… -susurro y niega con la cabeza.

-Ya sabremos como reponer el tiempo perdido –da un apretón a mi mano y me quedo helada-. ¿Viernes?

-¿Mañana? Oh… no puedo, tengo que ir a mis clases de inglés –bajo mi mirada y él toma mi mentón, clavando sus ojos azules en los míos miel.

-¿Quieres que pase por ti? 

-¿Estás seguro? Salgo a las siete de la noche. 

-Sí, no hay problema –sonríe y continua comiendo. Mi mirada se queda quieta en sus labios y él lo nota porque me sonríe aun así sin verme. Inmediatamente desvío la mirada y escucho una risa coqueta de su parte. Por más que quiera creer esto, no puedo-. Escápate conmigo. 

-¿Qué? ¿A dónde?

-No hay que entrar a clases… vamos detrás de las gradas –se recarga en su asiento y se cruza de brazos, con sus cejas levemente levantadas.

-¿Por qué?

-Quiero besarte hasta cansarme –me dice de golpe y tardo en procesarlo un poco. 

-Oh… -me ruborizo. Lo sé sin siquiera verme en un espejo-. Pero… tengo que ir a decirle a Sophia, se enfadará conmigo si no me ve ahí, en clases. 

-Si es tu amiga te comprenderá, ¿no es así?

-Sí pero…

-No, Lisa. Ven conmigo, sé que quieres… por favor. 

Un debate en mi interior inicia. ¿Debería? Quizás no, pero quiero hacerlo. 

(…)

Su mano está debajo de mi blusa sosteniendo mi cintura. Recostados en el sácate platicando se ha vuelto besos y caricias debajo de nuestra ropa. Cuando sus labios se despegan de los míos puedo ver sus ojos se han transformado a unos… sensuales y ardientes ojos azules. Sonrío tímida mientras que lo sostengo por su cuello y él se acerca para besarme el cuello, me estremezco de inmediato… aunque no quiera, en él es inevitable. 

-Quiero que seas mía –me susurra al oído y abro los ojos como plato. Quiero decir algo… pero no sale de mí absolutamente ninguna palabra. ¡Ser suya! Yo quiero ser suya y me desagrada la idea de que no seré la primera en su vida, quizá sea algún número más –el cual claramente no sé-, pero que definitivamente, no quiero serlo. Me separo de él y me frunce el ceño-. ¿Qué pasa? 

-No quiero ser una más –acomodo mi blusa molesta y me enderezo para cruzarme de brazos. 

-¿Piensas que serás una más? –me dice mientras que también se endereza. Trata de buscar mi mirada con aquellas perlas azules que tanto me gustan. No le contesto, porque no soy nada de él… y aunque quiera serlo, no puedo adelantarme mucho a las cosas-. Contéstame Elizabeth –toma mi rostro con una de sus manos y me obliga a mirarlo-. ¿Eso piensas?

InnocentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora