Ya era definitivo, se podia ver en la cara de todos que esto era real, no podíamos sentirnos mas emocionado por el viaje y poder ver a The Stash en vivo, Salt estaba comiendo una barra de chocolate y era algo irónico como su apodo era todo lo contrario a esta gran fascinación que tenia por los dulces, quizás esto le daba ese toque interesante que tanto llamaba la atención y a decir verdad eran de esos pequeños detalles de los cuales quizás estoy inmensamente enamorado, creo nadie la conoce como la conozco yo. Se que debajo de esa fachada de fuerte y ruda hay algo mas hermoso que eso.
-Olly basta!- Reclamo Amal.
-Sabes que los viajes me ponen ansioso, y este sera un poco largo.- Respondió Olly mientras aun masticaba unas papas fritas.
-Has lo que quieras, luego no estés deprimido por que te sientes mas gordo.- Dijo Amal mientras sacaba un encendedor de su bolsillo y Olly bajaba la mirada.
-O...K..- dije a mis adentros. Si escucharlos pelear era un tanto incomodo, decirse cosas a la cara lo hacia más incómodo y raro.
Trate de romper el hielo con un juego de reto o verdad, a los que todos se vieron dispuestos a jugar.
-Reto o verdad Salt?- grito Cris de la parte delantera de la van inclinando su cuerpo contra el asiento.
-Umm- Salt miro a Cris y esta volteo de inmediato y tomo su posición al lado de Rick.
-Que aburrida eres aveces.- Murmuro Cris.
-Reto o verdad?... mmm Olly- Continuo el juego Amal.
Olly tardo unos segundos en responder -Reto!- Dijo limpiándose los labios.
-Te reto a que dejes de comer las papas fritas por una hora.-
-Maldicion... esta bien.- reclamo Olly mientras apartaba la bolsa de papas fritas.
- Para que elegí reto.- bajo su mirada.
Por un momento todos nos estábamos divirtiendo haciendo bromas y chistes, aun nos falta mucho camino por recorrer. Cuando saliéramos de Mount pine y el pueblo que le seguía Tallview yo era el encargado de guiar a Rick con el mapa, ninguno tenia idea de como leer un mapa... (ni que fuese tan complicadas las carreteras y pequeñas ciudades en el camino, TIENEN NOMBRES, DUH! como te puedes perder o no saber leer un mapa cuando es algo tan sencillo). Teníamos unas cuantas paradas estratégicas para que Cris mas que nada pudiese ir al baño a retocarse, cosa que no pasaba con nosotros los chicos, podíamos hacerlo en cualquier lugar, nuestro baño era todo el camino.
La lluvia se puso pesada cuando vi la señal de vuelva pronto a Mount Pine, ya estábamos saliendo del pueblo y aquella emoción se hacia mas real, pude notar como una sonrisa se dibujaba en mi rostro al solo leer esas líneas del cartel. Eran las 6:33de la tarde aunque parecía ser las 9:00 de la noche, las nubes de lluvias que cubrían el cielo tenían un aspecto de que no acabaría, el espectro de gris que llevaba se inclinaba mas al negro. Había llovido todo el día sin parar y una niebla nos hacía compañía. Los primeros pinos al lado de la carretera eran visibles, de la tercera linea ya todo estaba borroso. Las ventanas seguían arriba por la lluvia y un tanto empañadas, se hacia difícil divisar la lejanía, pero este tipo de lluvias eran de lo mas normal para nosotros, vivir rodeado de bosques y montañas traía consigo humedad, frío y lluvias.
Rick manejaba despacio la Van debido a la lluvia ya que era un poco difícil de ver que estaba frente a nosotros con tantas curvas en el camino. Aumentó las luces delanteras, las cuales reaccionaron un poco en descontento pestañeando. La Van era un tanto vieja, había pertenecido a la familia de Rick por ya unos años y no estaba en su mejor condición.
-Mmmh- Gruño Rick agregando. -La lluvia me tiene harto, no veo muy bien el camino.- El tono se notaba enojado.
-Yo también soy tus ojos, amor.- Dijo Cris mientras le dibujaba una sonrisa y pasaba su mano gentilmente por el cuello de Rick.
Yo me encontraba en una esquina de la van mirando cada vez que podia a Salt que había cerrado los ojos por un momento. Quisiera estar a su lado pero ella tampoco me lo hacia muy fácil, estos días ha estado un poco distante de mi y la forma que me hablo en el mini market, no fue muy agradable. Amal y Olly estaban abrazados y envueltos en una manta, mire mi reloj y solo habían transcurrido dos horas desde la ultima vez que alguien pregunto la hora, eran apenas las 8:05 pm.
El sonido de la lluvia, en el techo de la van me hacia sentir paz... no creo que exista un sonido mas relajante que el de la lluvia, trayendo paz para algunos y caos para otros, en mi caso era paz, no podría decir lo mismo de Rick. La lluvia se había vuelto un poco mas intensa, como si nos persiguiera, los chicos parecían estar cómodos y durmiendo. Me acerque a Rick, siento que todo ha estado muy silencioso por mucho tiempo.
-Que tal todo?- pregunte en un tono apaciguado.
-A este paso llegaremos mucho mas tarde de lo planeado, y aun tenemos que hacer la parada para cenar.- dijo casi en voz baja, y mi estomago se hizo presente con un gruñido, dejándome saber que el también necesitaba la parada. Rick continuo en el mismo tono -Este camino parece no tener fin, arboles y mas arboles y no recuerdo hace cuanto tiempo vi la ultima señal del siguiente pueblo o el anterior.- su entonación cambio a preocupado, algo que trato de ocultar, pero lo conozco muy bien.
-Quieres que revise el mapa?- Trate de imitar su tono, a lo que el solo sacudió su cabeza en negación. (Señoras y señores y con ustedes ¨Rick¨, quien controla toda la situación, el que todo lo puede solo, el que su orgullo no deja verlo más allá y lo nubla, el que no necesita ayuda). Volví donde estaba sentado un poco molesto mientras mis ojos enfocaban el parabrisas.
Entre la neblina de la lluvia y el frío, las luces para guiar en las calles no tenían ese color fosforescente que las caracteriza... prácticamente estábamos a ciegas. A lo lejos pude ver unas luces de un brillo opacante entre aquella densa neblina que nos cubría, las luces de la Van no eran tan fuertes, en ese momento Rick se aseguro de tocar la bocina varias veces para llamar la atención de quien viniera frente a nosotros alertando que no estaba solo.
Por un momento me perdí en mis pensamientos, no paraba de ensayar como le diría a Salt que me gusta, que quiero que sea mi novia, el solo pensarlo me hace débil, siento el corazón morir por un milisegundo, y duele, duele por la incertidumbre, por que no se si sere correspondido, duele por que soy un cobarde. En mi mente todo es perfecto pero se que la realidad puede ser otra. Se acerca el momento cumbre de lanzar al suicidio mi cobardía... pero mas que nada estaba decidido ha hacerlo, el concierto es el lugar indicado.
Las luces estaban cada vez mas cerca, con cada segundo se volvía mas cegadora, entraba un rayo de esta por cada agujero de la van, estábamos rodeados por ella... -Es esto el cielo?- Sacudí mis pensamientos. Al ultimo lugar que iríamos seria al cielo, no después de haber robado tantas veces en Al's, no después de tanto mentir y no en este momento, no en este lugar, no sin decirle a Salt todo lo que siento. La van dio un pequeño salto como si hubiésemos atropellado algún animal del bosque sacándome del trance en el que me encontraba y aquella luz se intensifico aun mas volviéndose al instante difuminada con el ambiente hasta cesar.
