The Secret

Capitulo 20: Cara a cara

Narra Damon

Mi cabreo iba en aumento. Pedí un taxi y le dije que me llevase al Mystic Grill. No podía dejar de pensar ''me amenazó con matar a tu hija''. A Elena no la iba a tocar pero a Paula aún menos.

Entre por la puerta y no le vi. ¿Dónde estaría ese malnacido?
De pronto un silbido hizo que me girase. Ahí estaba. Sin más fui hacia allí y me senté.

-Hola hijo, cuanto tiempo sin verte- mientras sonreía.
-Tonterías las justas. Menos sonrisitas- le dije
-Tranquilo hijo, esto no ha hecho nada más que empezar.-

Narra Elena

Me desperté de sobresalto. Había tenido una pesadilla. No sabia lo que era pero lo único que vi es a Damon herido. De pronto paso una enfermera por mi puerta.

-¿Perdone?- le dije
-¿Qué desea señorita?-
-¿Podrías mirar si hay algún familiar mío por favor?-
-Esta bien señorita, pero guarde reposo. ¿Le duele algo?-
-No, esta todo bien, muchas gracias- sonreí.

Los dolores y el mal cuerpo se me habían pasado. Todavía no se me notaba el embarazo, apenas tenía un mes o mes y medio.
La señorita volvió.

-Solo hay un señor-

Tenía la esperanza de que fuese Damon, solo para saber que mi sueño no era real.

-Y ¿Podría decirle que pase? Necesito ver a alguien-
-Bueno, pero no serán nada mas que 5 minutos, ya sabes que tu estado esta regular.-
-Si si, tranquila-

A los pocos minutos llegó. No me imaginé que fuera él.

Narra Damon

-¿Me puedes explicar por qué me mentiste?-
-Simple, no quiero que seas feliz-
-Pero ¿Qué te he hecho?-
-Todo es por culpa de tu madre y el día que se acostó con otro y te tuvo a ti- mirándome con desprecio.
-Pensaba que querías lo mejor para mi.-
-Eso era la idea, que creyeses eso.-
-Hice, hago y haré bien en odiarte siempre-
-Haz lo que quieras, no me incumbe.-
-No te incumbe, pero amenazas a gente por personas que si me incumben a mi-
-Ah, lo dirás por esa niñita ¿no? La verdad que tiene unos ojos muy bonitos...-
-Ni la menciones-
-Damon, por favor, es mi ''nieta'' quieras o no-
-No es nada tuyo- me acerqué a el y le cogi de la pechera.
-Relájate, todos nos están mirando- vi como todos nos miraban y volví a sentarme.
-Que quieres- le dije
-Fácil, quiero que te marches de aquí solo. Se que la única mujer que te puede hacer feliz es Elena.-
-No lo voy a hacer-
-Pues ya verás las consecuencias-
-Te he dicho que no te atrevas a hacer nada-
-¿Crees que te tengo miedo?- se empezó a reír.

Narra Elena

-¿Qué haces tu aquí?-dije mirándole extrañada.
-Me han contado lo que te ha sucedido y quería ver que tal estabas-
-Estoy bien, gracias por venir a preguntar-
-Elena, ese bebe¿existe la posibilidad de que sea mío?-
-No Liam, lo siento- dije con la mirada hacia abajo. Se que era algo difícil de escuchar.
-Bueno, lo suponía- Ambos nos quedamos en silencio- Bueno Elena solo quiero que seas feliz y que todo salga bien.... Al fin y al cabo os lo merecéis.-
-Muchas gracias Liam- intenté sonreír.
-Bueno ya me voy, disfruta de tu nuevo embarazo- mientras se iba.
-¡Adiós Liam!- le dije con la mano.

Al fin y al cabo no se lo tomó a mal, pensé. Me di media vuelta y de pronto se cerró la puerta. Me extrañé y escuché como pusieron el cerrojo. Me gire.

-¿Liam, que estas haciendo?- dije asustada
-Tenía la esperanza de que ese bebe fuera mío. Pero no va a ser tuyo ni de nadie.-

Sin más vi como se acercaba e intentaba quitarme el suero y todas las medicinas que me estaban suministrando.

-Liam, no por favor- dije gritando. -Socorro-
-Tranquila Elena, me he asegurado de que nadie nos interrumpa- mientras sonreía.

Narra Damon

-Deberías tenerme miedo- le dije sin pestañear.
-Mientras tu estas aquí, tu chica se encuentra en el hospital sola...Que mal novio eres Damon.-
-¿Cómo sabes tu eso?-
-¿Quién te crees que ha hecho que este en riesgo de abortar?-
-¿QUÉ LE HAS HECHO?- dije chillando
-Es muy fácil soltar una sustancia en el conducto del agua...-

Mi odio no podía superar las ganas de matarle que tenía. Sin más le solté un puñetazo y me salí afuera. Estaba deseando que saliese, no quería montar ningún espectáculo dentro del grill.
Espere durante 20 minutos y por fin salió.

-¿Todavía sigues aquí?-
-Llegó tu hora-

Sin más me abalance a él. Empezamos a forcejear poco a poco, le solté otro puñetazo y el me lo devolvió. La pelea iba aumentando de intensidad y cada vez mostrábamos mas el odio que nos teníamos.

-Te vas a arrepentir de todo lo que estas haciendo Damon-
-Ya has hecho bastante, quiero que te mueras-

Sin más volví hacia él. De pronto noté como algo me apuntaba al estómago. Baje la mirada y pude comprobar que era una pistola.

-Quizás mueres tu primero-mientras se reía.