Dos destinos. (Creepypastas y Tú)

III "Hey, soy tu hermano"

_____ se mostraba inquieta dentro de aquel cuarto. Observaba cómo el joven que la había llamado se colocaba una camiseta negra y un chándal blanco encima, reinando un silencio bastante molesto para ella.

-Esto... -comentó temblando _____- ¿D-de dónde me-me conoces...? N-no lo-logro reconocerte ni a ti ni a nadie de este lugar.

-Shh... Me sorprende que no seas capaz de recordar a tu familia. Supongo que el internado te ha dejado fuera de lugar como a mí la gente jejejejej.

Tras esas palabras el joven dejó en vista su rostro que, para la sorpresa de _____, se asemejaba al rostro de la tal Nina. La sensación que producía era muy aterradora; ojos que reflejaban a un humano sin cordura, una sonrisa que rebalsaba sangre seca a su alrededor y rasguños profundos por las zonas visibles del cuerpo -aparentemente recientes-.

_____ tragó saliva. No sabía si mencionar que aquel rostro deforme no le recordaba a nadie que ella conocía o mentirle diciendo que sí, que lo reconocía y que lo había extrañado en todos esos años. Optó por la sinceridad y, con la voz quebrada del miedo, respondió.

-Lo siento p-pero no me-me recuerdas a nadi-e...

-Mmm...veamos. Lo que sé de ti, es que de tu familia sólo apreciabas a tus hermanos. Eran los únicos que te brindaban la atención que requería un niño normal, ¿verdad?

-¿Cómo sabes sobre mis hermanos? ¡¿Quién diablos eres?!-Preguntó incrédula y elevando la voz; pero no por querer ser fuerte, sino por el miedo de pensar en que se encontraba frente a un acosador.

-Déjame seguir con la historia-continuó Jeff con una expresión seria:- Tu familia debía mudarse a una nueva casa, en otra ciudad. Y ustedes habían viajado a ver a sus abuelos maternos. Tú te quedarías allí por un mes, los apreciabas demasiado...hasta que, ¡ocurrió esa desgracia!-Exclamó con felicidad y una carcajada escalofriante.

_____ lo observó con sorpresa y retrocedió en el suelo de madera, alejándose lo posible de ese demente; mas no podía no escucharlo, debía enterarse de cómo sabía sobre su familia y la historia de ella.

-¡No te emociones!...¡Han matado a mi familia, eres un maniático! ¡Explícame cómo sabes de mi historia y la de mi familia! No sé quién mierda eres-Exclamó ella poniéndose de pie, estresada y desesperada.

-Jmjmjm, ya veo. ¿Tan hermoso me he vuelto ahora, que ni mi hermanita mayor es capaz de reconocerme?-Interrogó con una sonrisa psicópata.

_____ quedó petrificada tras la respuesta, se notaba en su mirar la mezcla de sorpresa y confusión. Tomó asiento en el suelo antes de caer del susto y se agarró del pelo sin creérselo. Aparentemente, su segundo hermano, el más preciado para ella, se encontraba frente a su rostro; pero ya no era su querido Jeff. Sino un loco con pocos argumentos racionales y que, también, había perdido la cordura de una forma monumental.

-¿No dirás nada, pequeña _____?-continuó Jeff con una sonrisa escalofriante.-Si deseas, podemos volver a jugar, como de pequeños... Jejejejejje pero no serán juegos de pequeñ-

Una patada débil en el rostro lo hizo callar rápidamente, y _____ gritó con todas sus fuerzas del susto, saliendo del cuarto completamente despavorida.

Corrió por el interminable corredor, crujiendo cada madera que pisaba y gritando por ayuda. Jeff, por otro lado, revoleó uno de sus cuchillos en dirección a la pierna de su hermana, dando en el blanco y logrando que ella cayera.

-¡AAAAAH! ¡Apártate! ¡Has matado a nuestra familia! ¡No-no puedes ser mi hermano!-Replicó _____ tomándose de la pantorrilla con dolor y viendo el cuchillo clavado.

-Jijijiji, aún no confías en mi palabra, querida hermanita mayor.-contestó Jeff y de un rápido movimiento dejó a _____ pegada a la madera del suelo, dejándola inmóvil con el pie apoyado en el pecho de ella.

-No soy tu maldita hermana mayor... Si fueras el Jeffrey real lo sabrías.

-¿Saber qué? ¿Que soy tu mellizo? Jajajajajaj. Sí, lo sé, _____. Pero tú has llegado primero.

_____ intentó forcejear, pero no era una chica lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a su hermano asesino, psicópata, y el doble o triple de fuerte. Además, nunca se había preocupado en aprender defensa personal, pues su objetivo era salir de ese internado y nada más.

-Déjame, no te golpearé. Te sanaré ese golpe y ya, ¡pero suéltame!

-No es necesario, _____. Recuerda que a tu hermanito le encanta el dolor.

La castaña no comprendía el drástico cambio que tuvo Jeff. ¿Qué había ocurrido con su querido hermano? El que jugaba con ella en la antigua casa de ambos, el que le había regalado una carta antes de que la dejaran con sus abuelos y partieran a acomodar los muebles en la nueva casa, donde todo acabó en desgracia.

Sally apareció de inmediato al oír el escándalo. Los miró a los dos completamente sorprendida y apartó a Jeff de _____ con el ceño fruncido.

-¡¿Solo pediste que la trajera para lastimarla?! Al menos deja que los demás disfruten de ella antes de matarla.

-Jajajajajaj, no, solo la detuve. Iba a largarse de aquí y sería peligroso para mi hermanita salir en estos tiempos.

Sally mostró una cara de sorpresa y volvió su vista a _____, quien solo sostenía su pierna herida para que no sangrara más. Miró a Sally, adolorida por el cuchillo clavado en su pierna, y soltó un suspiro de frustación.

-¿Eres su hermana?-Preguntó Sally a _____, mientras la ayudaba a ponerse de pie. Revisó brevemente la herida y, por fortuna, Jeff no dio con tanta fuerza su lanzamiento.

-No soy hermana de un lunático, ¡está completamente loco!-Respondió sosteniéndose de Sally, observando cómo Jeff sonreía de forma arrogante frente a ambas.

-¡Soy tu querido hermano! ¡JAJAJAJAJJ! ¡¿No quieres reconocerme?! ¡No quieres reconocer a tu tan perfecto hermano!

Jeff continuaba gritando y riendo como el enfermo mental que era, sin darle oportunidad de hablar a _____ o a Sally. _____ iba a contestarle, pero una explosión en la parte baja de la cabaña hizo temblar el piso de arriba. Todos los creepypastas -incluyéndolo a Jeff- bajaron inmediatamente, mientras que Sally sostuvo a _____ para que pudiera bajar.

Apenas llegar abajo, lograron ver a una de las paredes destruidas y, alrededor de ésta, todos los muebles estaban destruidos; incluyendo cuadros y la mesa en la cual todos se reunían.

Se oyeron gritos de varias personas a la vez, incluyendo gritos femeninos, ¿qué diablos ocurría?