No es un secreto que Bruno Lenner me guste. Todos lo saben menos él. Típico.
No es normal que haya comprado una revista donde vienen tips para conquistar a nuestro Crush, e implementarlos con Bruno. Claro que no lo es, pero soy Serena Torres y esto...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Te veo en el centro comercial Perla, a las cinco de la tarde. Puntual, eh"
Leo el mensaje de Alexy a las cuatro de la tarde. Tengo aproximadamente media hora para arreglarme.
Estoy parada justo donde quedamos vernos. Miro a los lados con la intención de encontrarlo, no lo veo por ningún lado.
—Serena
Bruno está frente a mí.
¿Señal del destino? Por supuesto.
—Ho...hola. Estoy esperando a mi amigo Alexy.
—Vaya casualidad, yo también lo espero —se cruza de brazos—, Dijo que quería pedirme un favor.
Ahora es cuando me doy cuenta que Alexy no vendrá. Él planeó este encuentro.
Pasamos unos segundos sin hablar. Resulta incómodo, ahora que me declaré aunque ni haya oído mi declaración.
—¿Por qué no nos sentamos mientras esperamos? —señala una banca disponible frente al local de helados.
Asiento.
El silencio vuelve a reinar entre nosotros. Es una segunda oportunidad que tengo.
—Bruno
Capto su atención pues deja el celular aun lado.
—¿Qué hacer cuando tienes algo guardado en el corazón y cada día se vuelve insoportable?
—Sacarlo -Dice sin vacilar-, verás que te hará sentir mejor. El miedo del porvenir es un obstáculo que, en ocasiones te impide actuar. Si quieres sentirte libre grita lo que tengas guardado.
Por supuesto que necesito estar libre. Si, si quiero exclamar todo lo que tengo guardado desde hace un buen tiempo.
—Serena, no dejes que tus miedos te cierren en un mundo donde nada es posible. Di lo que tengas que...
—¡ME GUSTAS! —grito con euforia.
Bastan pocos segundos para captar que le he gritado que me gusta.
La declaración de amor que planeé, en un momento perfecto, con palabras bonitas y llenas de sentimientos se fue al carajo. Esta confesión ha sido terrorífica.
Él se sobresaltó al gritarle, viéndome estupefacto, algunas personas mirando, otras riendo.
Parpadeo y de reojo miro a mí al rededor. Al menos los mirones desaparecieron, pero él no. Bruno sigue asustado viéndome.
—No sé qué decirte —susurra sin apartar la vista de mí.
Que me quieres.
Desde el fondo de mi corazón anhelo oír esas palabras.
—Ahora entiendo todo
De pronto, suaviza sus gestos, en sus labios observo una pequeña sonrisa.
—Antes de entregarte la revista me atreví a leerla —se cruza de brazos y levanta una ceja—, hice un recuento de las veces que nos vimos y lo sucedido tiene que ver con la revista. Tú... —coloco mi mano en su boca para callar las palabras que pensaba decir.
La vergüenza que tengo me ha puesto roja como un tomate.
Con delicadeza quita mi mano de su boca, sin ni siquiera apartar sus ojos de los míos.
—Todos los tips que seguiste dieron sus frutos.
Trago saliva. Si oí perfectamente.
Mis piernas parecen gelatinas, y ¡diablos! Estoy sudando.
—¿Cómo debería terminar esto?
Antes de que pueda preguntarme a mí misma como podría terminar siento unos labios junto a los míos.
No es el sueño que he tenido más de cien veces, está ocurriendo.
Bruno mueve sus labios sobre los míos y si no fuese por tal motivo estaría en el piso.Poco a poco correspondo.
El mejor beso que he tenido.
...
Queda un solo capítulo y pronto veremos como terminan las cosas entre estos dos personajes. JAJAJA
