La chica 457

Hora de Publicación

-Hay que hacerlo- le dije mientras miraba la computadora.

-Pues hagámoslo- contestó.

Mi dedo bajó hasta el botón enter, lo apreté y el blog ya estaba publicado.

Horas antes...

-Laila. Hola. ¿Estás ahí?- dijo Sam pasando su mano por delante de mi cara, parpadee varias veces- ¿estás bien?

-Sí, perdón estaba pensando en algo- dije, miré la mesa de la cafetería en la que estábamos sentadas.

-¿Y en qué?- preguntó curiosa, la miré.

-Nada, una lista tonta- contesté sin darle importancia.

-¿Una del supermercado?- negué con la cabeza- oh, bien.

Miré el celular y vi la hora, ya era bastante tarde y me tenía que juntar con Thomas en su casa. Agarré mis cosas, saludé a Sam y me fui.
Al llegar a la casa de mi gran amigo, toqué el timbre y su madre me dejó entrar.

-Hay una linda chica arriba con él, se juntaron a terminar un trabajo para una clase, ¿lo esperas?- me explicó la madre.

-Emm... si- dije un poco incómoda.

-Es un poco tímida pero parece buena- dijo sonriendo.

-¿Y hace cuánto que están ahí arriba?- pregunté, pensó un poco.

-Creo que dos o tres horas- escuchamos pasos en la escalera- deben ser ellos.

-Bueno, el martes nos vemos de nuevo para terminar la segunda parte- dijo Thomas a Megan, ella asintió felizmente y se dirigió hacia la puerta; yo me agaché en el sillón para que ella no me viera.

-Adiós señora Stevens- saludó Megan desde la puerta.

-Oh, dime Karol- dijo la madre de Thomas, mientras sonreía.

-Bueno, adiós Karol, adiós Laila, nos vemos en la escuela- se despidió y por fin se fue.

-Laila ya llegaste- dijo Thomas ansioso, me levanté del sillón y lo saludé- tengo que mostrarte algo.

Subimos a su pieza, él me dejó entrar y luego cerró la puerta. Observé la habitación, estaba impoluta; nos acercamos a la computadora, él se sentó en su silla y yo me quedé parada al lado.

-Qué querías que viera?- pregunté sin entender, él sonrió.

-Por unos días dejaste de escribir en tu blog, no sé por qué fue eso, pero querida amiga tengo que decirte que ya pasaste las veinte mil personas.

-¿En serio? ¿Tanto éxito tiene? - quedé sorprendida, era verdad que no había subido nada por días pero no podía creer que tanta gente lo leyera.

-Felicidades- dijo y me abrazó, se lo respondí- de todas maneras, y no quiero que te pongas mal, hay gente que te odia.

-¿Y qué dicen?- pregunté un poco triste.

-Pues que te estás metiendo demasiado en la vida de Mason y que a nadie le importa tus consejos, pero yo creo que son tonteras, deben ser los amigos de Mason- asentí con la cabeza.

-Eso espero- tomó mi mano y me sonrió a medias. Miré el blog y vi un comentario de Mason- ¿viste esto?

Thomas vio la computadora, ambos leímos el mal comentario de Mason, este decía:

"¿Ya te aburriste de escribir sobre mí? Se nota que no tienes ideas para tener un blog, solo me usas para que la gente te lea. Suerte con eso, tu blog es una mierda como tú"

-Ya estoy harta, no hablé más de él por varios días y así me trata, además no deja de pegarte en la escuela.

-¿Y que quieres hacer?- levantó una ceja.

-Creo que deberíamos publicar su lista, así tiene un poco de su propia medicina.

-¿Segura?- preguntó, yo asentí, buscó en la computadora el archivo y me miró.

-Hay que hacerlo- le dije mientras miraba la computadora.

-Pues hagámoslo- contestó.

Mi dedo bajó hasta el botón enter, lo apreté y el blog ya estaba publicado.

-¿Qué pasó?- pregunté ya que en la computadora había una página en blanco.

-Maldito hijo de perra- dijo Thomas y comenzó a tocar montones de botones.

-¿Qué pasó?- volví a preguntar, él me miró.

-Me hackeo- dijo, lo miré asombrada- borró la lista y puso un virus, sabía que la íbamos a publicar.

-¿Y perdiste todo?- dije asustada.

-No, algunas cosas las estoy salvando, pero se está comiendo todo.

-Lo lamento tanto- dije y toqué su hombro, él lo sacó.

-Creo que lo mejor es que te vayas a tu casa.

Asentí, agarré mis cosas y me fui, saludé a Karol y caminé hasta mi casa. Al llegar, fui hasta la puerta y en el piso había una caja en forma de regalo, la tomé y la abrí. Mason.

-Te estuve esperando, quería verte cuando la abrieras- dijo desde atrás mío, la caja tenía un usb.

-Te odio, nunca más me hables, no después de lo que le hiciste a Thomas- le dije, puse la llave en la puerta de mi casa.

-El usb tiene el antivirus necesario para que Thomas recupere todo, no te preocupes por él.

-Véte a la mierda, mira lo que hiciste- dije abriendo la puerta.

-Esto no lo hice yo, fuiste tu, y tus ganas de meterte en lo que no debías, jodiste a tu amigo por tu ambición- sonrió.

-Tu le pegaste primero, tu empezaste, y yo lo voy a terminar- cerré la puerta y subí a mi cuarto.

Hola! Espero que les haya gustado esta parte modificada, creo que la anterior estaba muy desorganizada.

Denle me gusta, compartan y comenten, les agradecería!!