Capitulo 26

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POV Christian

Una vida se va y otra llega, hace un año que perdí a mi abuelo, fue un duro golpe para la familia, que nos costo superar. Fue una perdida irreparable. Pero de a poco fuimos recuperándonos.

-Entonces, Grey ¿Aprobarás el proyecto para la nueva planta en Detroit?- Pregunta Ross, eficiente como siempre.

-Si.- Respondo cortante. No quería pero tendrá que ser.

-Perfecto... no te arrepentiras, ademas Bill y Ruth ya viajaron a Detroit para obtener la autorización. Ya tenemos la zona logística, el dinero... ahora solo falta tu firma Christian.

-¿Donde firmo?

-Aqui.- ella me entrega unos papeles... firmo.

-Le diré a mi hermano, que viaje a Detroit.- espero que Elliot no le moleste volver a la ciudad donde nació... por que yo, no pienso poner un solo pie ahí.

-Ok, Grey.

Doy por terminada mi reunión, y salgo de la sala de juntas.

-Andrea, cancelo el resto de mis reuniones.

-Si, como usted ordené.- contesta dudosa.

-Me iré a mi casa, y a no ser que sea importante, no me llame.

-Como diga ¿Algo mas?

-No. Por hoy es todo, Andrea.

Me voy a mi oficina, pongo unos papeles en mi maletin y me dispongo a volver amo casa.

-Hasta mañana, señor Grey.-me dice Andrea cuando me dirijo al ascensor.

-Hasta mañana.- contesto.

Entro al ascensor y oprimo el boton, para que baje a la planta de abajo. El ascensor me parece que va muy lento.

-¿Que tal, Taylor?... llévame a mi casa.

-Si señor...

El camino de Grey house hasta mi casa parece una eternidad... Salgo del auto, y camino a mi casa.

-¡Señor Grey! Buenas tardes. ¿que hace tan temprano?- Pregunta Gail cuando nos encontramos

-Quería estar con mi familia, ¿Donde esta Ana?

-Esta en su estudio.

-¿Y los niños?

-Teddy esta viendo unos dibujos animados, y Phoebe esta durmiendo.- Sonrío

-Ok.

Subo hasta mi dormitorio, me cambio de ropa, y me voy a la habitación de mi hija, ella duerme plácidamente. Con cuidado lo saco de su cunita y la tomo en mis brazos, beso su cabecita.

-Hola, princesa.- susurro.

Ella despierta y me mira con sus hermosos ojos grises, me reconoce de inmediato y me sonrie.

-Me encantas cuando sonries, tu sonrisa es idéntica a la de tu madre.

Me quedo embobado mirando a mi hija de casi cuatro meses, recuerdo cuando nació. Nació el mismo día que la hija de Elliot y no pude evitar sentir nostalgia al recordar a mi abuelo, el hubiese dicho alguna tontería que nos hubiera echo reír a mi a Elliot Mía y Ana, y avergonzar a mis padres.

-Llegaste y se desperto.- dice Ana entrando a la habitación.

-Hola, amor.- nos damos un beso.

-Gail me dijo que regresaste temprano.-

-Quería pasar el resto del día con mis hijos, y mi esposa ¿Que tal tu dia?

-Muy bien, señor Grey, esta princesa comió, durmio, se ensucio, se dio un baño y volvió a dormir, y despertó feliz al ver a su padre.

-¿Ah si?- Beso la manita de mi bebita.

-Iré a buscar a Teddy, no me gusta que mire mucha television.- dice Ana.

-¡Papi!- Chilla mi hijo entrando en la habitación de su hermana.

-Hola campeon.- me inclino y mi hijo me besa mi mejilla.

-Phoebe ¿esta despierta?

-Si, ella esta despierta.-

-¿Puedo besarla?

-Por supuesto.-me inclino y quedo a la altura de mi hijo, con su hermanita en mis brazos. Teddy le da beso en la mejilla y la cabecita de su hermanita

-¡Huele horrible!- mi hijo pone cara de asco.

-¡Oh dios! ya se hizo de nuevo... ahora le toca usted de cambiarla.

Asi es mi vida, entre contratos, pañales, y lo mejor es cuando mi hijo me dice que me ama, y mi hija me sonrie... La mejor adquisición ha sido mi Ana.

POV ANASTASIA

Mi vida ha estado un poco agitada estos últimos dias, mi esposo se fue a New York ayer, por negocios, mis hijos en el colegio, y yo en el juzgado trabajando como abogada.

Pero hoy solo quiero descansar, y envolver el regalo para Christian, por nuestro aniversario numero diez. Cumplimos diez años de matrimonio, ser madre, esposa, y profesional ha sido un lindo desafío que la vida y Carrick Grey me regalaron, a veces pienso que hubiese sido de mí, si Carrick y Grace no me hubieran adoptado. Seguramente viviría entre la cárcel y la calle. Sacudo mi cabeza y alejo esos pensamientos de inmediato de mi mente.

-¿Ana?- me llama mi padre.

-¿Que ocurre?- El ha venido a mi casa a estar con los niños.

-Estabas muy pensativa, y me preguntaba... ¿que pensara esa cabecita?

-Nada... solo en como cambiaste mi destino. Te amo papi.- me acerco a él.

-¡Ay princesa...! siempre seras mi niña.- besa mi cabeza. -Y lo mejor es esto...- toca mi abultado vientre de casi nueve meses de embarazo.

-Por fin un nieto mio llevara mi nombre.- dice con orgullo.

Elliot tiene cinco niñas, Mia tiene dos niñas y niño que lo llamo Ethan Theodore y Christian y yo quisimos ponerlo a nuestro tercer y ultimo hijo Carrick Jamie Grey Steele.

-Será un gran hombre como su abuelo.- Respondo orgullosa.

-Como su abuelo, abuela, papá, mamá y tíos.- agrega orgulloso.

-Perdón que los interrumpa...- entra Christian a la estancia.

-¡Christian!- El se acerca de inmediato a mi y me besa y abraza, saluda a su padre.

-Te esperaba en la noche...- digo.

-Adelanté mi viaje de retorno.- besa mi frente y me rodea por la cintura.

-Yo los​ dejo solos, iré a jugar con Teddy... o si no peinar muñecas con Phoebe, en eso soy todo un experto. Tener ocho nietas mujeres me ha echo un experto.- murmura Carrick con gran orgullo.

-Suerte con eso, papá.- dice Christian.

-Es un gran hombre, el mejor padre y abuelo.- le digo a mi marido.

-... Y este bebé, llevara el nombre de un gran ser humano.- acaricia mi vientre.

-Te amo... gracias por aguantarme estos catorce años que estamos juntos.- dice mi marido con dulzura.

-Te amo, Christian Grey.

-Y yo a ti, mi ladrona de corazones.

Capitulo final
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