Robaste Mi Corazón

Prologo

Narrador.

Christian y Anastasia llevan cuatro años de relación a escondidas.

La relación era llevada casi al límite, habían veces que quedaban a punto de descubrirlos, pero Mía ayudaba a que no lo descubran.

Christian no le importaba entrar por la ventana, del dormitorio de Anastasia, por las noches. Ellos tenían sexo prácticamente por toda la casa, cuando Ana se quedaba sola. Se aman con locura.

Anastasia sueña con casarse con el amor de su vida, pero teme por la reacción y la decepción que pueda causarle a sus padres.

Christian lo único que quiere es gritar a los cuatros viento, el amor que siente por Anastasia, que todo el mundo sepa que esa mujer es suya, lo único que lo detiene son los miedos de su Ana.

Por otro lado, Mía ya se ha comprometido con Ethan, pero no todo va bien, ella se lleva mal con la hermana de Ethan, Kate quien no soporta a Mía, y las peleas son constantes.

En la cárcel, Elena se acuesta y se levanta jurando venganza, quiere tener la posibilidad de escaparse y destruir a Anastasia.

-Pero miren quien está tan pensativa, a la pedófila. Seguramente está pensando como abusar de un bebé recien nacido- una de las compañeras de Elena, cada vez que puede le busca pelea a Elena.

-Dejenme en paz- Elena se levanta del lugar dónde estaba sentada, esta cansada, que la provoquen y después la golpeen, incluso ha sido violada, por algunas carcelarias.

-¿Adonde crees que vas preciosa?- La mujer jala el cabello de Elena.

-¡Sueltame!-Suplica Elena.

-¿Alguna vez tuviste compasión con esos niños, de quienes abusaste?- La mujer le habla al oído, con voz amenazante, y tira más fuerte el pelo de Elena.

-Ya basta, no quiero meterme en más problema, sueltame-pide.

-Cariño, ahora voy a divertirme contigo-gruñó la mujer, que era más grande y tenía mucho más fuerza que Elena.

-Niñas ya vuelvo-Dice y se llevó a rastras a Elena, quien le suplicaba que le suelte...

La mujer entró al baño con Elena, ella ya sabia lo que se venía.

-Ahora me daras placer- la mujer empezó a quitarle la ropa a Elena....

Elena se dirigió al patio, se sentía pésimo, nuevamente había sido violada , y después la mujer la había golpeado.

-¿Por que lloras guapa?- Otra presidiaria, se sentó al lado de Elena.

Elena no contestó, y siguio llorando, tenía rabia impotencia, maldecia a Carrick para sus adentros.

-Te golpearon ¿verdad?- Pregunta la mujer, al ver los moretones que Elena tenía en su rostro.

-Yo estoy aquí, por asesinar al inútil de mi marido, y el hijo de puta de Carrick Grey me metió aquí- eso llamó la atención de Elena.

-Sigueme contando- dijo Elena..

Ya empezaba anochecer, y los guardias ordenaron a todas las presidiarias, regresar a su celdas, Elena se sentia un poco mejor, había echo una amiga, y no sólo eso. Si no que ya habían planeado una fuga, ellas y cinco carcelarias más...

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Anastasia estaba nerviosa, mientras se probaba su vestido para su graduación, ella iba graduarse con honores, hacía muchos años que no tenían una estudiante tan buena cómo Anastasia, en la universidad.

Un golpe en la puerta la distrajo.

-Adelante-gritó

-Hola mi niña, venía a ver si ya estabas dormida, pero veo que estás probandote tu lindo vestido- Carrick ya no podía de tanto orgullo que sentía por su princesita.

-Te ves hermosa, toda una mujercita- añadió emocionado

-Gracias papi- respondió Ana.

-Estoy muy orgulloso de ti hija, amo y estoy orgulloso de mis otros hijos, pero tu eres muy especial, seguiste mis pasos- dijo Carrick, y no aguantó una lágrima rodó por su mejilla.

-No llores papá- Anastasia secó su lágrima

-Estoy demasiado orgulloso de ti, haz sido una bendición para la familia- susurro Carrick y Anastasia sintió una punzada de culpa.

-Papá, tengo miedo de desilusionarte-Dijo Anastasia con culpa.

-Eso no pasará nunca- Carrick se acerco y abrazo a su hija.

-No estoy tan segura de eso- balbuceo Anastasia y se aferró a los brazos de su padre.

Ella estaba triste, amaba a Carrick, él era su padre, su ídolo. Pero el amor que sentia por Christian era más grande que cualquier otra cosa.

-Te amo papi-

Carrick beso la cabeza de su hija

-Buenas noches hija-dijo el y salió de la habitación de Ana. Ella no pudo contener las lágrimas, seguramente Carrick y Grace la odiarian cuando se enteren que ella y Christian se amaban.

Espero que les guste