Me he levantado asustada de mi cama. Con las manos temblándome ligeramente, la respiración agitada y algunas gotas gordas de sudor corriendo por mi mente, haciéndose caminito hasta mi cuello. Y tu imagen Ray. Tu imagen clavada sobre mi cabeza. No puedes seguir inmiscuyéndote a mitad de la noche en mis sueños, no cuando mañana tengo examen. Economía. Y tú sabes cuánto detesto la economía.
Detesto más que te hayas ido. Eres un cobarde Ray, no escupas promesas que no podrás mantener hasta el final.
YOU ARE READING
MURDEROUS.
Short StoryElla te hizo esto, Ray. ¿Cómo pudiste? Te amaba. Jesús, el cielo sabe que te amaba. La historia de cómo me enamoré de un chico. Y cómo ese chico no me quería. Tú me lastimabas y yo pedía perdón. Éramos tan inexpertos que a eso le llamábamos amor. T...