Cuando Claire vio a George se quedó mirándolo fijamente.
— Mira lo que viene ahí — me dijo como si no hubiese escuchado nada de lo que dije — me gustaría algo así; Ni una mojigata como tu puede negar que ese hombre se ve como quiere daría lo que fuera por un hombre así.
Aproveche que ella lo miraba como una tonta y le musite "aún no" confiando en que George leería mis labios, y lo hizo, él se puso hablar por teléfono con alguien y siguió caminando como si no tuviera nada que ver.
— Déjalo y concéntrate por una vez en tu vida en algo importante — le dije — Claire dejaste a tu bebé abandonada y huiste a Dios sabe dónde y ahora vuelves como si no ha pasado nada.
Estaba tan enojada de no pude evitar insultar a Claire, sinceramente no podía evitar sentirme frustrada por todo esto. Ella solo se mantenía cabizbaja y no decía una sola palabra.
— No pensaste más que en ti misma — le dije — es más dudo que hayas pensado en lo absoluto; si no hubiese sido por George esa niña y yo estaríamos muy, muy mal.
— ¿George? ¿es tu esposo?
— Sí... la persona por la cual no vivo en un refugio o con mi tía Angélica.
George volvió otra vez. Sabía que yo estaba muy afectada.
— Niña, ya estate tranquila — me dijo con su fría sobriedad de siempre — te va a dar un ataque.
Claire simplemente se quedó mirando a George como una imbécil.
— Serenity — dijo George — el abogado está esperando en casa.
—¿Él es tu esposo? — dijo Claire con cierta incredulidad señalando a George.
— Sí, Claire, él es George; y George ella es Claire — dije presentándolos.
No puedo evitar estos sentimientos tan amargos que van ebullendo dentro de mí, como la leche cuando la dejan mucho tiempo en el fuego y termina por derramarse. Y yo no quería que Claire fuera a la casa de George, no quería qué viera a Audrey, pero eso es algo que no se puede evitar.
George se nos adelanta y yo me quedo rezagada junto con Claire, ella mira las casas circundantes y habla sobre como serian sus habitantes.
— ¿La casa de ustedes está muy lejos? — me pregunta — no soy como tú, no me gusta caminar tanto.
— Descuida — fue lo único qué le dije.
Una vez llegamos frente a la propiedad de George ella se queda asombrada (de hecho, creo que es muy posible que la casa de George sea la más grande del lugar).
— Apuesto qué la preocupación más grande quienes viven ahí, es no perder la cuenta de sus millones o no partirse una uña. Seguro que...
— ¿Claire, puedes dejar ese juego absurdo de una vez por todas?
Me detuve frente al portón un instante y como por instinto Claire se quedó junto a mí. Vuelven las dudas y la rabia y un extraño dolor a fastidiarme la conciencia, me siento terrible porque no quiero siquiera que ella conozca el lugar en donde vivo, a la vez sé que somos en parte familia y no puedo negar el hecho de que ella es la mad... la mujer que dio a luz a Audrey.
A lo lejos George nos está esperando, mirando su reloj y levantando la mirada hacia nosotras.
Claire vio que George nos esperaba poco más del sendero, mira a la casa y luego a mí.
— ¿Aquí es donde vives?
— Sí — le digo y mi corazón da un vuelco enorme, George vuelve a mirarme y yo vuelvo a caminar.
KAMU SEDANG MEMBACA
La Ultima Vez Que Lloré
RomansaGeorge Harrison, es un hombre frio y algo estoico que oculta su pasado. Su vida da un pequeño giro al conocer a una muchacha que a pesar de todo siempre sonríe y que aunque es más joven que él, le dará lecciones que lo ayudaran a superarse. La histo...